Keerthivasan de Chennai visitó Kanchipuram, una ciudad templo. Siendo él un ávido fotógrafo, él tomó muchas fotos, ¡pero mostró sólo una! Él ni siquiera decidió tomar esta foto. Cuando él estaba concentrado en el templo elefante, una paseante con una voz autoritaria le exigió que le tome a esta muchacha, que la estaba acompañado. Keerthivasan no se detuvo a pensarlo e hizo esta toma.

En cuanto la foto fue tomada la mujer brahmán Iyengar y esta muchacha siguieron su camino en el templo. Fué su madre quien le preguntó si apuntó su dirección. Keerthivasan dice que él no recuerda la cara de la señora y que ni siquiera les mostró la foto digital. ¿Entonces por qué? Se pregunta Keerthi. Pero él siente como si la foto le estuviera comunicando algo. Solamente que él no sabe qué es. ¿Y Usted?

Baranee de Coimbatore, India, trabaja en un barco y viaja por todas partes. Él es un excelente fotógrafo y está obsesionado con las puestas de sol. De vez en cuando, comparte fotografías tomadas durante sus viajes a lejanos rincones de la tierra. Esta fue tomada en Turquía. Baranee dice «El respeto de la muchacha turca. Ella miraba el baile de sus compañeras de escuela con gran concentración. Su concentración me atrajo».

Marakkanam Bala, Pondicherry es un periodista que lleva su cámara donde sea que vaya. Él conversa con la gente en las calles y escribe relatos conmovedores. Su post sobre un hombre de 105 años visto pidiendo limosna en las calles puede ser leído aquí. Marakkanam Bala tomó esta fotografía de una muchacha que disfruta del fruto de la Palmyrah tostada en su pueblo natal.

Escrito por Mathy Kandasamy.