Hace un mes Nurgeldy contó a neweurasia [1] cómo están combatiendo la pobreza de conocimiento del idioma del estado en la ciudad norteña de Kustanai en Kazajistán. Su post dió pie a una acalorada disputa en las versiones en ruso [2] e inglés [3] del blog, cubriendo temas como: por qué la población urbana habla el idioma kasajo tan ligeramente y por qué las etnias kazajas también fallan al usarlo:
Las razones que los bloggers enlistaron fueron: la falta de necesidad social del idioma del estado entre 1980-90s, bajos estándares de enseñanza del idioma kasajo en las escuelas de habla rusa y los departamentos de las universidades, pobre motivación de la juventud urbana y la ausencia de esfuerzos estatales en el desarrollo, enseñanza y promoción del idioma del estado.
Más adelante la discusión continuó en el segmento ruso de la comunidad LiveJournal en Kazajistán. Miss-crazy ratificó [4] el hecho que los estándares de enseñanza del idioma tasajo en las escuelas siguen desanimantes. Además, la situación se agrava ante la corrupción, pues los niños sacan “A” en las lecciones de kasajo por nada más que suscribirse al diario “Druzhnie Rebyata” (Niños Amigables) (RUS):
Suscripción “obligatoria” –es una artificial forma de alimentación de las ediciones económicamente agonizantes del Estado, siendo por su naturaleza una forma de corrupción escondida presente no sólo en las instituciones infantiles.
Al mismo tiempo, una chica rusa, Slavoyara, viviendo al norte de Kazajistán –la región tradicionalmente señalada como la más “no.kazaja” de todas- declara que sus habilidades en el idioma kazajo han estado mejorando día a día. Ella dice [5], en particular: “Puedo entender todo lo que se dice y con facilidad y casi sin notarlo hacer el cambio a hablar kazajo”, lo que provoca respeto y admiración entre sus colegas (RUS).
Escrito por Adil Nurmakov [6].