- Global Voices en Español - https://es.globalvoices.org -

Guatemala: Recordando a Monseñor Gerardi y su informe «nunca más»

Categorías: Latinoamérica, Guatemala, Derechos humanos, Guerra y conflicto, Historia, Política

«Conocer la verdad es doloroso, pero es una acción altamente liberadora»

-Monseñor Juan Gerardi el 24 de abril de 1998

Hace diez años, Monseñor Juan Gerardi [1] publicó un informe titulado «Guatemala, nunca más! [2]«, que contenía serios testimonios de personas afectadas para siempre por el conflicto armado en Guatemala. El informe proporcionaba información gráfica detallada y los nombres de los que cometieron esos crímenes; finalmente y como consecuencia de la publicación de este informe, Monseñor Gerardi perdió la vida. Una década más tarde, los blogueros de Guatemala recuerdan al hombre que informó al público sobre las atrocidades que ocurrieron durante la guerra.

El asesinato de Gerardi fué brutal, fué golpeado hasta la muerte con una losa de hormigón en frente de la casa donde vivía. Aunque algunos de los participantes fueron juzgados, es posible que todavía queden más sueltos. Muchos piensan que el crimen estuvo directamente relacionado con la recopilación del informe realizado por el proyecto Recuperación de la Memoria Historica (REHMI) de la Iglesia Católica.

neveragain2.jpg

Fotografía [3] de James Rodriguez de Mi Mundo y utilizada con autorización.

El blog Cerigua publicó una carta [4]donde el Centro por la Justicia y el Derecho Internacional (CEJIL) exige la captura de otros involucrados en el asesinato del Obispo, mientras que el blog The Dominon [5]proporciona información sobre algunos de los eventos celebrados para recordar su muerte.

El cardenal Rodolfo Quezada Toruño dijo un sermón muy convincente en memoria de Gerardi en la catedral de la ciudad de Guatemala. Recibió una ronda extra de aplausos cuando afirmó que «la Iglesia Católica no parará de exigir que se aclare el caso del Obispo Gerardi hasta que se sepa quienes fueros los responsables de su muerte.»

La profesora y ex-periodista Ana María Rodas, bloguea en La Columna de Ana donde recuerda el día en que el informe fué publicado: [6]

El 24 de abril de 1998 salí de la Iglesia Catedral luego de haber asistido a la ceremonia donde la Oficina de Derechos Humanos del Arzobispado había dado a conocer a grandes rasgos los resultados de sus investigaciones sobre las atrocidades cometidas durante la guerra sucia en Guatemala. A grandes rasgos, digo, porque en un par de horas no se podía conocer todo lo que contienen los cuatro libros con los hallazgos del Obispo y de sus colaboradores, el REHMI. El aire de la tarde era suave y sentí que por primera vez en muchos años, podía respirar libremente. Desde el atrio vi hacia el parque central….. y lloré en paz. Mis muertos, nuestros muertos, podían comenzar a descansar en paz.

Después del asesinato, las conclusiones del informe se concentraron en el crimen. El proceso de encontrar a los asesinos se convirtió en parte de la historia nacional y en muchos casos en un confrontamiento. El libro escrito por Francisco Goldman titulado «The Art of Political Murder: Who Killed the Bishop?»( El Arte de un Asesinato Político: ¿Quién mató al obispo?), investiga algunas de las actividades realizadas para encubrir la verdad. Este libro ha sido revisado por el blog Guatemala Solidarity Network [7] (La red de Solidaridad Guatemala):

La compra del libro de Goldman fué debido a un impulso. Una crítica en algun lugar de la página web del Guardian, decía que al parecer se trataba de un libro importante evaluado por Salman Rushdie. Además estaba basado en Guatemala, una parte del mundo a la que siempre le he tenido un afecto especial. Sabía que Goldman estaba escribiendo sobre un asesinato político, pero eso era todo. Me concentré en todo, desde la elaborada descripción de la escena del crimen hasta el principio del anuncio de las conclusiones. Se trata de una historia meticulosa y fascinante, como si se tratara de un relato policiaco. El ritmo del libro te permite reflexionar sobre la intención y motivación, además de ver en acción todas las fuerzas que han determinado la historia de Guatemala, y la de otros muchos paises de América, al principio como hechos individuales de una brutalidad casi mundana, y después como una opresión organizada.

Los blogueros de Guatemala recuerdan la esencia de este hombre tan memorable, que hablaba por aquellos que no tenían voz y por las personas que sufrieron directamente los efectos del brutal conflicto armado. En la guerra muchos niños fueron asesinados o incluso obligados a participar en ella como niños soldados. La sociedad ha olvidado parte de esta historia, pero el bloquero Hunapu e Ixbalanque escribe sobre este fenómeno en Gerardi y su lucha contra la Amnesia [8]:

Monseñor Gerardi dió su vida por que se conociera la historia que hasta hoy en día aún es desconocida por la mayoría de guatemaltecos. Su enemigo mayor fue la amnesia colectiva, una de las peores formas de injusticia. De ahí que para honrar la memoria de Monseñor Gerardi lo menos que podemos hacer los guatemaltecos es leer el Informe REHMI [9].

Un extracto de un poema del blog Biblioteca del Grillo [10]expresa:

Querías “construir un país otro”/ soñabas una nueva Verapaz. “La construcción del Reino tiene riesgos”, lo sabías muy bien, pero vivías los derechos humanos como sueños divinos; con tu sed de justicia verdadera; en tu opción por las víctimas, que son también los pobres.

Hay muchos recursos desde donde se pueden escuchar los testimonios de los supervivientes; uno de ellos es «Para nunca olvidar [11]«, donde profesores de diferentes paises pueden descargar testimonios para poder utilizarlos en sus clases.

neveragain1.jpg

Fotografía [3] de James Rodriguez de Mi Mundo, utilizada con autorización.

El blog Diario Paranoico va al grano, el mensaje del Obispo [12]:

 Es sorprendente el alcance que ha tenido la guerra, incluso en nuestros días. En nuestro ADN, se ha inyectado el cromosoma del miedo y del silencio. Nadie está interesado en conocer su historia; miles de jóvenes y adultos se preguntan ahora quién fue ese tío desaparecido al que no conocieron y sus padres no se han atrevido a contar su historia. Huérfanos que no saben dónde está su familia…