Costa Rica: Presidente Arias pide a Dalai Lama aplazar visita

Dalai Lama, Oscar Arias, Hu Jintao

Tener que elegir entre dos amistades y decidir a cual invitar a una fiesta es algo sumamente incomodo, ¿a quien no le ha pasado?

Ahora resulta que nuestro Presidente y Premio Nobel de la Paz, Oscar Arias Sánchez está pasando por esta misma situación. Según nos dimos cuenta por las noticias el mandatario le ha solicitado a El Dalai Lama que mejor no venga por el momento y espere hasta el próximo año, aun cuando esta visita era de carácter privado. Casualmente un mes después estará en Costa Rica en visita oficial el Presidente de China, Hu Jintao.

Julia Ardón dice en su blog:

La Asociación Tibetana de Costa Rica por supuesto salta y explica lo que entiende como un desaire de claro cálculo político, ya que por esos días tendrá visita oficial el Presidente de China y se podría molestar o peor aún: decidir no venir. (Y eso no le conviene al gobierno! No ve que los chinos nos están dando mucha plata?!)

La visita del máximo dirigente mundial del budismo tibetano estaba prevista para el 10 de setiembre, pero ante la solicitud formal de Arias la visita queda oficialmente descartada. El presidente indica que en esas fechas el no estaría en el país.

Milagro Rodríguez (vicepresidenta de la Asociación Cultural Tibetano-Costarricense):

Nos preocupa profundamente que a un personaje como Su Santidad se le pida no venir a Costa Rica (…) Es motivo de honda tristeza, como miembro de esta Asociación y como costarricense

La noticia no deja mucho que pensar, pareciera obvio que por la visita de Hu Jintao, no se quiere correr riesgos para evitar una cancelación de este presidente tan generoso en los últimos meses para Costa Rica. Recordemos que desde el 8 de junio del 2007 Costa Rica rompió relaciones con Taiwán y comenzó relaciones con la República de China. Seguidamente Oscar Arias fue recibido en China con todos los honores que esa nación da a los presidentes amigos cuando los visitan.

La Suiza Centroamericana dice:

Lo que si nos sorprende, y nos causa tremendo disgusto, es que nuestro gobierno de turno, presidido por otro Premio Nobel de la Paz, haya guardado un silencio absoluto y sepulcral ante las atrocidades cometidas por su nuevo amiguito oriental

Realmente hay que pensar en las repercusiones de una decisión de esta índole, los presidentes y más de una nación en desarrollo tiene que hacer cálculos políticos muy riesgosos y no siempre a todos se les va a quedar bien. Que es lo que más le convenía a Costa Rica, que es lo mejor para la mayoría. Ser presidente y tomar decisiones no debe ser fácil, mas aun cuando le tienes que decir a un amigo, oye por ahora mejor no vengas a mi casa.

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