Artículo publicado originalmente el 8 de setiembre.

El Presidente Correa posa junto a una niña de El Maicito, Carmen-Manabí, donde estuvo la semana pasada. La foto pertenece a Presidencia del Ecuador y se reproduce bajo la licencia de Creative Commons.

Con una actividad política que se enardece conforme se acerca el referendo del 28 de septiembre en el que los ecuatorianos aprobarían la nueva Constitución, muchos podrían pensar que este país gira únicamente en torno a la política. Los blogueros ecuatorianos están al tanto de este fenómeno social en su país. Si bien las encuestas indican que es probable que se apruebe la nueva Constitución, todavía hay muchos que tienen una opinión diferente.

Para muchos la nueva constitución representa el progreso, no sólo por su esfuerzo en redefinir la relación entre los seres humanos y el mundo natural sino que también representa cambios en materia de aborto, gobierno electrónico, software libre, para mencionar algunos.

Sin embargo, la oposición rechaza completamente la nueva constitución sin considerar sus aspectos positivos. Carlos Jumbo, quien por lo general no escribe sobre política sino sobre la seguridad en la red, piensa que los argumentos vienen de ambos bandos, la oposición y la gente que apoya al presidente Correa, añade, igualmente, que existen «pequeños líderes» que no representan a nadie y que creen que su verdad es absoluta:

Los seudos abanderados como Lucio Gutierrez, Jaime Nebot, Carlos Vera, entre otros, no entienden que lo único que logran es fortalecer y darle la razón a la tesis de Rafael Correa, lo más lógico desde su posición seria la de promover (adelantarse) sus “figuras” como potenciales candidatos presidenciables y derrotar a Correa en las urnas, si tanto odio y si tanto daño les ha causado Correa. como lo afirman, ¿no creen que el pueblo lo castigaría en una nueva elección presidencial?, o es que como dice el mismo Correa “les tiemblan las piernas”.

Recuerden el dicho «no crean todo lo que ven». Juanpi de Babahoyo publica nuevamente un post escrito por Febres «Pájaro» Cordero, quien señala que la discusión sobre la nueva Constitución está cerrada. El Presidente es la única autoridad que puede decidir qué está bien y qué está mal, y, es infalible:

La culpa, para él, es siempre de los otros. De todos aquellos que disienten. Por eso, si son economistas, pasan sin más trámite al rol de contadores. Si son ricos, al de pelucones. Si periodistas, al de bestias (salvajes o no, pero bestias, al fin), mediocres, mentirosos, pitufos. Si jóvenes, al de majaderos. Si compañeros de su movimiento, al de infiltrados. Si emigrantes, al de idiotas. La lista, que puede resultar interminable, no deja fuera a nadie que haya osado discrepar. Y a nadie, tampoco, que haya sido sorprendido haciendo un gesto considerado contrario a esa majestad que él encarna: para ellos, la cárcel.

Finalmente, Raul Farias en Un granito de arena hace una analogía entre la película de Ralph Fiennes, Land of the Blind (La Tierra de los Ciegos) [ing] y la realidad política de Ecuador, donde afirma que la sociedad está ciega.

Casi nunca he estado de acuerdo con los escritos de Gabriela Calderón para el diario EL UNIVERSO, pero no tengo más que darle la razón y compartir el pensamiento, en su articulo “Utopía y violencia”, de que para librarnos de la corrupción, la pobreza y todos los males anteriores, no necesitamos ceder nuestros derechos o libertades, ni dar paso a la violencia. Es que con los actos del gobierno de Rafael Correa y la Asamblea Constituyente, muchos no volveremos a creer en la palabra revolución.