Presidente Correa en el balcón del Palacio presidencial de Carondelet. Foto de la Presidencia de la Republica [1] y usada bajo licencia creative commons
El Ministro de Economía durante la presidencia de Alfredo Palacios, el señor Correa, publicó un documento en el 2004 el cual puede ser encontrado en La Insignia [2], donde el estableció lo que ahora está siendo discutido en el Art. 303 de la recién aprobada Constitución [3], afirmando que los ecuatorianos usarán de nuevo una moneda nacional, y que el control y regulación del dinero retornará al Banco Central Ecuatoriano. Ya que Ecuador actualmente usa el dólar americano como moneda, esto no ha sido visto como posible por muchos. Sin embargo, ni siquiera las protestas en contra de la aprobación de la nueva Constitución, ha detenido esta «Revolución Ciudadana del Siglo XXI», como ha sido bautizada la victoria por el movimiento político presidencial, la Alianza País.
Los resultados preliminares favorecen al gobierno ecuatoriano (98.87% de los votos han sido contados hasta ahora) y su visión del futuro político de Ecuador. Hasta hoy, el 63.94% de la población ha votado por la petición de Correa y 28.08% apoyan el NO. Guayaquil, una de las ciudad más grandes del Ecuador, no obstante, votó distintamente al resto del país: aunque los resultados estuvieron muy estrechos entre ambas tendencias, finalmente el NO ganó con el 46.97% de preferencia [4]. El alcalde de Guayaquil, Jaime Nebot, tuvo que reconocer los resultados y ser uno de los líderes que se oponían a la aprobada Constitución que rápidamente respondió al llamado de Correa a dialogar y declarar que no busca una Nueva Guayaquil separatista, independiente de su actual país, como muchos han sugerido.
Bloggers en Ecuador han comentado acerca de las repercusiones del referéndum. Algunos están felices por el triunfo del SI y otros piensan que el cambio prometido está aún muy, muy lejos.
Juan Fernando Pachedo de Satturn Attacks [5] comienza su nota preguntándose a sí mismo, ¿esperanzas de una nueva vida? y continua dudando que un simple papel como la Constitución, pueda cambiar las cosas en el país sudaméricano. Por el contrario, aconseja a sus compatriotras a seguir algunos pasos en el área económica:
- Abrir tan pronto puedas una cuenta en Euros, créanme no hay moneda que se ponga al euro
– Sacar tu dinero del país, algunos Bancos te permite abrir cuentas en sus filiales en USA o directamente puedes hacerlo tú, es el mejor camino.
– No embarcarse en deudas en los próximos dos años, no deudas grandes al menos, recuerda que ahora pagas en Dólares y cuando tengas una nueva moneda devaluada te será más difícil de poder pagar a las cuotas de tu casa, auto etc, etc
– Migrar, si tienes a donde y de forma legal hazlo, ojo no aconsejo te subas a un bote y te vayas a EEUU sin siquiera poder articulas dos palabras, pero si tienes un empleo o una profesión que te ayude, puede hacer una migración ordenada tuya y de tu familia.
Eduardo Varas de Libros, Autores y Riesgos [6] lamenta que un gran número de personas, como él, no votaron ni por el SI ni por el NO. Eduardo piensa que esto muestra que los ecuatorianos votan favoreciendo el efectismo y apartan la mirada de las distintas opciones. Recordándonos como ha sido el camino político de Ecuador en la última década, escribe:
Y bueno, ver esa distancia, ver que un país se mueve por pasiones (por ejemplo, ayer en uno de los canales se pasó un reportaje sobre las consultas que se han realizado desde la vuelta a la democracia y me quedé helado al ver que en el gobierno de León Febres Cordero se lanzó una para preguntar al pueblo si se prefería que candidatos independientes pudieran participar en contiendas electorales. La mayoría dijo No. Luego, varias años después, Sixto Durán Ballén, en su gobierno, hizo la misma pregunta y ganó el Sí. No hay opción, se vota por la figura y no por sus ideas… eso suena a condena), y entender que el manejo será así por mucho tiempo, te obliga a despertar a varias ideas…
El Cronista de CronicaCero [7] recuerda que esta es la quinta vez en menos de dos años que el Presidente Correa consigue la venia de los ciudadanos ecuatorianos. Él viene a darse cuenta que la oposición está aún ciega a los cambios que realmente están sucediendo en el país.
Sí, a ver, dirán algunos que nada ha cambiado, que siguen los casos de corrupción, que sigue el gasto, que sigue el desempleo, que sigue la pobreza. Es cierto. Hay ciertas cosas que no cambian. Pero lo que se aprobó ayer, domingo 28 de septiembre, es sin duda, un paso enorme para modificar la estructura de un Estado que hace rato se olvidó de la gente y que se la jugó corruptamente por quienes tenían el poder financiero y político.