¿Los grupos en Facebook, camisetas anti-acoso, entradas, artículos, bloggers y activistas pondrán fin al acoso sexual en Egipto? ¡Wandering Scarab no lo cree así!
Al leer la historia de Asser Yasser [1] y la reacción de la blogósfera [2] en su post, Wandering Scarab escribió [3]:
Últimamente, he visto a un creciente número de bloggers reunirse en contra del aumento de la tasa de acoso sexual en Egipto. He visto a bloggers escribir relatos sorprendentemente conmovedores de sus experiencias así como otros que han escrito acerca del tema en apoyo a las víctimas de violación. Pero también he visto grupos en Facebook dedicados al caso y algunos que surgen con ideas más originales como camisetas que muestras lemas anti-violación dirigidos a desalentar a los hombres de acosar a las mujeres, porque ellos no querrían que le pasara lo mismo a sus madres/hermanas/esposas, etc.
Yo, de todo corazón, apoyo sus esfuerzos de terminar con el acoso sexual. Sin embargo, no creo realmente que el cambio ocurra pronto, si es que sucede.
En el perfil inicial del atacante ella dijo:
Creo que veremos muchas más víctimas junto con crímenes de más aguda intensidad y mayor frecuencia. En mi humilde opinión el problema es de muchas capas. Por encima, pareciera que los depredadores sexuales apresan a las mujeres porque están sexualmente frustrados, como el caso de asaltos sexuales en Maadi [4]. En realidad, los ataques sexuales son raramente acerca de sexo y más acerca de poder y dominio.
¿Cómo suceden las violaciones?
Hay atacantes sexuales que son despertados sexualmente por actos violentos contra las mujeres. Y entre esos están los hombres retados de forma cognitiva, quienes han distorsionado el sentido de los valores. Ellos creen que a las mujeres les gusta ser violadas o que las mujeres piensan que el acoso sexual es un cumplido. Este es el tipo de pensamiento que a menudo lleva a la violación.
En cuando al atacante reincidente, Wandering Scarab acota:
A menudo tiene dificultades para establecer o mantener relaciones, particularmente con mujeres. Es introvertido y propenso a tener una variedad de problemas, sociales y físicos. Pero pienso que el tipo de atacante sexual más común en Egipto es el motivado por la ira. Sus actos de acoso sexual son esencialmente estallidos emocionales acompañados por una seria falta de auto control. Usualmente, este es el atacante sexual más peligroso y violento. Es el mismo que emplea las habilidades lingüísticas más vulgares y coloridas, y el mismo que cae bajo la influencia de la mentalidad mafiosa como el infame caso de los incidentes de acoso sexual en Eid [5]. Es el tipo que no es temeroso de las consecuencias y está consciente que la ley y la percepción pública trabajan a su favor.
Momentos desesperados requieren medidas desesperadas:
El hombre egipcio promedio es abusado cada hora de cada día por el sistema político en Egipto, lo que afecta todo, desde el precio del galón de leche hasta la capacidad de votar libre de opresión. El público egipcio es retado política, económica y socialmente. La política de las minorías gobierna al país y mantiene a la mayoría en jaque. El promedio de vida es extremadamente bajo. Los costos de los artículos esenciales se disparan por las nubes mientras los salarios permanecen al mínimo. Sin ayuda financiera, el hombre egipcio promedio no puede construir o mantener una familia. No tiene control sobre su futuro y encuentra poco valor en intentar hacer algo consigo mismo. Los hombres lidian con esos problemas de forma diferente. Algunos de ellos de forma productiva; otros los usan para alimentar su ira y liberarla.
Wandering Scarab no encuentra mucho sentido en comparar a la víctima de un crimen sexual con la madre/hermana/hija/esposa del atacante sexual, porque:
A los ojos del atacante sexual, todas las mujeres son objetivos, con excepción de las distintas integrantes femeninas de su familia. Parece no verlas como mujeres, sino que las define por su rol.
Para agregar combustible al fuego del acoso:
Las víctimas de crímenes sexuales a menudo son rechazadas por los integrantes masculinos de sus familias. A muchas se les dice que “es su culpa estar en el lugar y momento equivocados” o que “ellas lo atraen por ataviarse de ropa inapropiada”.
La blogger habló gentilmente sobre religión al decir:
Independientemente de nuestra denominación, se nos enseña a temprana edad que cuando la gente comete errores, todos son perdonados si nos arrepentimos. Personalmente he conocido a muchos hombres con esa mentalidad. Creen que está bien atacar sexualmente a una mujer si esto significa que al final se arrepentirán y todo será perdonado.
En cuanto a la ley y su aplicación:
Tristemente en Egipto, aunque hay una ley (insuficiente a pesar de lo que puede parecer) que castiga a los atacantes sexuales, esa ley a menudo no es aplicada. Los oficiales de la policía y otros funcionarios toman las denuncias a la ligera y muy a menudo desalientan agresivamente a las mujeres de denunciar y proceder con su acusación.
La raíz del problema es:
Los hombres árabes, en general, tienden a creer que son superiores a las mujeres, lo justifican de cualquier forma, bien sea religiosa, social o como quieran. Y tampoco estoy generalizando. Sé que hay hombres decentes que aún viven en Egipto. Ellos piensan del forma diferente. Ellos creen en la igualdad de derechos y todo eso, pero son muy muy pocos. Lamentablemente, la mayoría de los hombres árabes caen en la otra categoría.
Y la sugerencia final es:
Es en esa luz que yo aliento a las mujeres a no ser víctimas. Un grupo en Facebook es un sentimiento bonito y una camiseta ciertamente no haría daño. Pero creo que la mejor forma de evitar la violación es armándose y aprendiendo a incapacitar al atacante sexual. La supervivencia es la clave, incluso si eso significa matar al agresor o mutilarlo de forma permanente.