El aumento de la llegada por mar de refugiados a Australia ha traído tragedia y polémica. El tema de la protección fronteriza que dominara las elecciones federales del 2001 ha resurgido áun con más malicia si es posible.
Un barco de refugiados ha explotado cerca de la costa noroeste. Tres personas muertas, dos desaparecidas y más de treinta heridos, algunas de ellas con quemaduras de importante gravedad. Tres miembros de las Fuerzas Armadas de Australia (ADF), que remolcaban el barco en ese momento, se hayan entre los heridos.
La polícia de Australia Oeste apunta tres personas muertas y dos desaparecidas tras una explosión a bordo de un barco de inmigrantes ilegales siendo escoltado esta mañana hacia la Isla Christmas.
Tres muertos y docenas de heridos como consecuencia de una explosión en un barco de refugiados [1] ABC News Online 17 de Abril 2009.
El argumento de que la fatal explosión fue causada por los mismos solicitantes de asilo ha hecho revivir la tormenta política entorno a la historia de «los niños al agua» [2].
La tesis de que antes de su explosión el pequeño barco pesquero de madera hubiera sido rociado con combustible de manera deliberada, será objetivo de investigaciones por parte de la policía y el juez de instrucción del Territorio Norte.
Se teme que la explosión del barco fuera sabotaje [3] The Age 17 Abril 2009
Ha estallado una pelea política, con los parlamentarios de oposición acusando al gobierno de ser el causante del aumento de refugiados e incitar al contrabando de personas con los últimos cambios en la protección fronteriza.
Los blogueros también andan quitándose los guantes. Gary Sauer-Thompson en Public Opinion lamentaba el intento de politizar una vez más el tema de los refugiados:
Las cosas siguen como siempre. Los liberales andan haciendo ruido llamando la atención sobre la seguridad fronteriza, los malévolos ilegales, y la lasitud en temas de seguridad. Es como una repetición del antiguo asunto de «los niños al agua», pero con el transfondo de hordas asiáticas invadiendo Australia como consecuencia de haber leído The Australian, y haberse dado cuenta que el gobierno de Rudd se ha vuelto blandengue procesando las solicitudes de asilo.
La realidad es que la mayoría de los ilegales llegan en avión, y muchos son enviados de vuelta, mientras que los ilegales que llegan en barco son procesados en la Isla Christmas. A los niños se les trata con más humanidad, se abolió la llamada «Solución del Pacífico» por la que se enviaba a la gente a Narau, y han producido unas visas de protección temporales y reformado las políticas de detención.
El blog de Mark Thomson, Seeking Asylum Down Under, cuenta con un claro propósito:
Sí, ¡Recordamos! Culpa a las víctimas por su desdicha, saca todo el sensacionalismo que pueda de la figura de los traficantes de personas, pone palabras en la boca del personal de la ADF que ellos mismos no pueden haber emitido, y a continuación instiga los sentimientos del público en contra de los refugiados. Arroja unos pegotes de confeccionado agravio a la falta de preparación de tus oponentes políticos para enfrentarse a la «amenaza», y ahí tienes las típicas reservas liberales como respuesta de intercambio hacia la terrible suerte de algunas de las personas más vulnerables del planeta.
Ah, se me olvidaba: ¡ A continuación ataca a los debilitados países vecinos haciéndoles cómplices de políticas que violan los derechos humanos!
Otro blog progresista, Club Troppo, fue más comedido:
La explosión de «los ilegales» del día de ayer cerca de Ashmore Reef al oeste de Darwin, en el que aparentemente 3 personas sufrieron una muerta inmediata y muchas otras resutaron heridas de gravedad, tiene espeluznantes, por no decir obvios, paralelismos con la saga de «los niños al agua» del 2001 que facilitara a John Howard su tercera sucesiva victoria electoral.
Volvamos al presente. Existe una diferencia crucial entre la situación a la que se enfrentaban los «niños al agua» y los solicitantes de asilo del «Tampa», y la del grupo de ayer, cuyo barco aparentemente prendió fuego y explotó. Este grupo no tuvo que enfrentarse a ser remolcado de vuelta al mar, y casi seguramente que no tuvieron que enfrentarse a una prolongada detención de inmigración mientras se procesaban sus solicitudes de visa temporal.
En esas circunstancias, las declaraciones del primer ministro del Estado de Australia del Oeste, Colin Barnett, de que los solicitantes de asilo impregnaron su embarcación y aguas colindantes con gasolina, carecen de sentido. Debe haber algo más que no nos cuentan, a menos que estos determinados solicitantes de asilo simplemente no se hubieran enterado que las políticas del antiguo gobierno de Howard de » zona de remolcado», o «enciérralos lejos de la costa y tira la llave», no seguían operativas. Hay mucho más que contar acerca de esta historia.
La vieja explosiva historia de los refugiados vuelve a prender [6]
El punto de visto alternativo fue expuesto con claridad por Andew Bolt, columnista del periódico para el Herald-Sun de Rupert Murdoch, y quizás el más conocido y controvertido blogero de Australia:
Hasta ahora van tres ilegales muertos. Así que, ¿Cómo de «amables» parecen ahora las medidas de Kevin Rudd?
Se suponía que John Howard era el cruel, dijo Labor. Fue Howard quien en su tiempo como primer ministro presentara la Solución del Pacífico, llevando los ilegales a Narau antes que dejarles desembarcar aquí.
Demasiado duro, dijo Kevin Rudd, y lo descartó. Fue Howard quien daría lugar al circo legal que permitiría a los inmigrantes ilegales jugar con el sistema durante años, hasta que dejamos de intentar deportarlos.
Demasiado duro, dijo Rudd, y facilitó abogados. Fue Howard quien crearía el aliciente de los subsidios para a continuación imponer sobre los inmigrantes la inminente amenaza del retorno.
Demasiado duro, dijo Rudd, y descartó las Visas de Protección Temporal, ofreciendo a todos los inmigrantes ilegales, incluyendo aquellos adinerados que no huían de ningún peligro en particular, acceso inmediato a una residencia permanente con todos sus tentadores subsidios y derechos.
Demasiado duro, dijo Rudd. Y el critero experto lo aclamó. Ahora sí que eramos buena gente. ¿De verdad? ¿Pues qué tiene de bueno haber atraído al menos a tres personas hasta su muerte? Que tiren a un niño de nadie por la borda… (vaya escándalo «confeccionado» que fue ese), ¿Pero un barco entero de 49?
Sí, desde luego. Esto es un escándalo de «barco por la borda», pero esta vez, de verdad.
Possum Comitatus en Pollytics no da muestra de reprimirse cuando condena el post de Bolt:
…no hay un imán más grande para la intolerancia total que los solicitantes de asilo.
Con los refugiados, literalmente, es un bingo de Pánico Moral. Islam, terroristas, raza, xenofobia: los refugiados son el último lienzo sobre el que el fondo poco profundo de la piscina de los asuntos públicos puede dibujar sus particulares animosidades patológicas favoritas. Si no me crees entonces realiza el siguiente experimento:
Escribe los 9 temas favoritos de la colección de los pirados estrechos-de-mente, no específicamente sobre ninguna cosa en particular, cualquier vieja idiotez intolerante genérica ya valdrá, a continuación paásate a las criaturas [8] que normalmente [9]se alimentan [10] a costa de tal estúpida antipatía y lee la sección de comentarios de cualquier post que tengan sobre solicitantes de asilo. Cada vez que uno de los temas que predijiste sea mencionado por un comentador, hazle una cruz, no tendrás que seguir leyeando mucho más para que grites: «¡Bingo derechista!»
De todos los salones de Bingos de derechas del territorio, no hay ninguno mayor que el que presenta The Undescended Testicle [9] (El Testículo Oculto)*.
Ayer empezó con sus insinuaciones despectivas [11] diciendo que los solicitantes de asilo eran «¿Atraídos a su muerte por Rudd?». Realmente, no hay límites que la histérica cólera de Bolt contra Rudd no se atreva a cruzar: aunque lo único que realmente se está «atrayendo» aquí son montones de sinvergüenzas hacia la website de Andew Bolt: conduciendo la escoria de internet hacia los anuncios de News Ltd, siguiendo el juego a sus superficiales y maliciosas, insignificantes fantasías.
Por qué Andrew Bolt debería ser sodomizado con una calculadora: Capítulo 142 [12]
No son las usuales críticas que esperabamos de un estadista y sociólogo electoral. Para sus análisis de datos tendrás que visitar el post de Possum.
Parece ser que la mayoría de este barco habían salido huyendo de Afganistan, un país en el que en estos momentos las tropas australianas se baten contra el Talibán.