- Global Voices en Español - https://es.globalvoices.org -

Hijablogging: Sobre burqas y prohibiciones

Categorías: Europa Occidental, Medio Oriente y Norte de África, Norteamérica, Oceanía, Argelia, Australia, Canadá, Egipto, Estados Unidos, Francia, Derechos humanos, Etnicidad y raza, Gobernabilidad, Migración e inmigración, Mujer y género, Protesta, Religión

Aunque la practica de vestir el hiyab [1] ha existido desde tiempos pre-Islámicos, el debate alrededor de esta práctica se ha incrementado en los años recientes. Mientras que en algunos países (Arabia Saudita, Irán y partes de Afganistán e Indonesia), el hiyab es obligatorio, en otros ha sido prohibido en escuelas y en otros lugares públicos (Turquía, Túnez, partes de Bélgica y Alemania). Sin embargo, obligatorio o prohibido, la vestimenta de las mujeres musulmanas siempre es un topico de caliente debate.

Mas recientemente, el Presidente francés Nicholas Sarkozy propuso [2] una prohibición para el burqa [3]. Su propuesta le da seguimiento a una ley de 2004 que prohíbe el hiyab en las escuelas.

Blogueros alrededor del mundo, demostrando todo el espectro de creencias, han estado hablando sobre la decisión de Sarkozy. En KABOfest, la canadiense Sana escribe [4]:

Dirigiéndose a cómo un pequeño grupo de mujeres decide  afirmar y representar su sexualidad, Francia esta olvidando las verdaderas fuentes del problema, así como implicando que su fundación es tal vez menos estable de lo que al mundo y a su propia ciudadanía les gustaría pensar. Es tiempo para que Francia no arroje los muchos componentes de su identidad, sino mas bien de acercar esas mismas piezas y darles una perspectiva mas amplia. Su población minoritaria se ha adaptado por décadas, pero, ¿puede Francia aceptar una equidad mínima como base de una mayor equidad como lo hemos hecho en Norteamérica?

La bloguera concluye:

Señor Sarkozy, puede que sus esfuerzos sean sinceros; usted esta, después de todo, tratando de proteger el criterio de lo que lo hace a uno lo suficientemente «francés». Sin embargo, recuerde que en su intento de liberar a las mujeres de sus cadenas, usted restringe su sexualidad, su sentido de individualidad y su ser a su propio harén, donde usted dicta los bailes que debe realizar y las vestimentas que debe utilizar para ser de su agrado.

El bloguero americo-argelino de The Moon Next Door hace eco con un sentimiento similar. Argumenta que la propuesta de Sarkozy es «intolerancia vestida de gallardía», dice [5]:

El problema sobre el que deberían preocuparse los franceses no es si el burqa es utilizado en Francia hoy en día, sino que tal prohibición, así como lo ha hecho la prohibición del velo, hará de estas vestimentas un símbolo de identidad musulmán y un signo de desafío cultural. Francia ha hecho una excelente labor buscando maneras para alienar a las minorías religiosas y raciales. De hecho, en las naciones Occidentales es un líder en este campo. Esto es una cualidad que poco hace para la asimilación, aunque los franceses siguen esto. La proposición trae otro equipaje también. La preocupación (puesta por el articulo de The Economist) de que esta propuesta podría ser «malentendida afuera» parece torpe. ¿Que se puede malentender?, es un esfuerzo preciso de limitar la expresión de una religión, Islamismo en este caso específico, y sigue las mismas motivaciones de la prohibición del velo.

Farah, escribiendo para el blog grupal Nuseiba, presenta una excelente ronda de opiniones australianas [6], notando que:

Muchos escritores (incluyendo Posetti y Hussein) en contra de la prohibición, apuntan que muchas mujeres escogen activamente vestir el burqa o el niqab. Mientras que el burqa ha sido usado por grupos para subyugar a la mujer, los escritores realzan la necesidad de identificar a estas mujeres musulmanas, en lugar de denegarselos con una prohibición.

La bloguera de Fe, Tracy Simmons, de los Estados Unidos, ve el asunto como uno muy simple: Pedirle a Sarkozy no quitarle la dignidad a las mujeres, ella alega [7]:

Creo que la gente no se da cuenta que vestir el burqa es una decisión de muchas mujeres islamistas. Y por que es una decisión, el gobierno no debería forzarlas a NO vestirlo.

Por supuesto, no todos los blogueros se oponen a la prohibición de Sarkozy. La popular bloguera y columnista Mona Eltahawy, quien de manera famosa se quito su velo hace algunos años (una experiencia sobre la que ha escrito en su blog [8]) escribio una op-ed [9] (editorial de opinión) para The New York Times en la cual declaró que, como mujer y como musulmán, ella se oponía a que el burqa fuera utilizado en cualquier lugar.

Una bloguera estadounidense, Anne of Cavesville, expresó su apoyo [10] a Eltahawy diciendo:

Soy sensible a la delicada naturaleza del cambio en la política, pero no he vivido mi vida para escuchar en el 2009 que estoy fuera de base, por que creo que los burqas degradan a la mujer, borrándolas de la sociedad como argumenta Eltahawy.

Estoy formalizando mi posición sobre los burqas, de ninguna manera afronto la manera más conservadora en que muchas mujeres musulmanas deciden vestir. No estoy opuesta a las coberturas de la cabeza de ningún tipo.

En términos mas generales, la bloguera añade:

Al mismo tiempo, yo apoyo y defiendo abrazar la sensualidad de la vida – ver, oir, oler y usar toda nuestra sensibilidad para experimentar la vida. Esta visión no me opone a la cultura musulmana, que abraza la profunda y natural sensualidad de la vida.

También aceptaré el uso de burqa cuando los hombres igualmente sean forzados a vestirlo. Que ambos géneros tomen el burqa como un signo de respeto por su religión (que no se requiere en el Corán), entonces aceptaré que los burqas son un símbolo de la cultura musulmán y de sus costumbres religiosas.

La columna de Eltahawy no ha encontrado oposición en la blogósfera, sin embargo, Sahar, escribiendo para Nuseiba protesta:

…la mejor manera de apoyar a las mujeres musulmanas es respetando su decisión en como expresar su religión y cultura. No es imponerles lo que pensamos es lo mejor para ellos. Encuentro irónico que Eltahawy, quien afirma ser feminista, esta ignorando la importancia de la toma de decisiones, agencia y las experiencias vividas de estas mujeres – que son factores esenciales para el entendimiento de las mujeres en el análisis feminista.

Tampoco todos concordamos con Eltahawy, quien, tal vez debido a su posición social privilegiada esta separada de las motivaciones sociales, políticas y religiosas del uso del burqa, y no puede comprender como pueden ser vehículos de éxito para algunas y un orgulloso refuerzo de identidad musulmana para  otras. El burqa puede ser entendido como un símbolo de la indignación que los musulmanes están sintiendo cuando se exponen ante una Europa cada vez más xenofóbica. Es el simbolismo de aferrarse a un identidad que esta siendo erosionada en un ambiente hostil. Escribo este artículo después de haber leído sobre una mujer egipcia que fue apuñalada 18 veces en una corte alemana por un hombre que ella misma había demandado por haberla acosado debido a que vestía velo. No es el burqa lo que esta siendo desacreditado y debilitado, sino toda la vestimenta islámica. Por lo tanto, el llamado a eliminar el burqa no puede ser eliminado de este contexto y que Eltahawy piense divorciar su opinión de tal contexto es políticamente ingenuo.

Aunque todavía esta pendiente si Francia implementará o no la prohibición del burqa, una cosa es segura: Este es un tema que provoca bastante polarización alrededor del mundo.