En cualquier otro momento, Pakistán hubiera estado muy ocupado con la noticia de que la Asamblea Nacional aprobó un proyecto de ley para declarar ilegal la violencia doméstica la semana pasada. El proyecto de ley de violencia doméstica (prevención y protección) es el gesto administrativo más significativo para asegurar los derechos y protección de mujeres y niños en Pakistán. El proyecto, que todavía debe ser aprobado en el Senado, tiene como objetivo detener la violencia doméstica con juicios penales rápidos, emisión de órdenes de protección, creación de comités de protección a nivel de bases y sanción a los que golpean a sus esposas con largos periodos en la cárcel y considerables multas.

Pero quién tiene tiempo para la violencia doméstica en un momento en que los pakistaníes están ocupados preguntándose si han matado a Baitullah Mehsud, el jefe talibán de Pakistán, o debatiendo la reciente decisión sin precedentes de la Suprema Corte en el sentido de que la decisión del ex presidente General Pervez Musharraf de declarar el estado de emergencia fue inconstitucional.

Aunque los medios convencionales de Pakistán han brindado poca cobertura o análisis del proyecto de ley de violencia doméstica, los bloggers del país han reconocido su significado.

Manzer Munir, que bloguea en Pakistanis for Peace, señala que el proyecto es importante en un momento en que los militantes en Pakistán están acosando a las mujeres.

Las mujeres están siendo cada vez más aisladas y marginadas por la difusión del fundamentalismo en muchas partes de Pakistán donde el Talibán ha traído una interpretación estricta y de mentalidad estrecha del Islam y de los roles de la mujer en él.

Yasser Latif Hamdani en Pak Tea House celebró la noticia del proyecto:

Nunca hay ninguna justificación para la violencia en contra de mujeres y niños. ¡NUNCA! Esta debería ser una llamada de atención para todos los hombres pakistaníes, incluso yo mismo, de portarse bien. ¡Zindabad a Jinnah de Pakistán!

Como muchos pakistaníes en Twitter, Farhan compartió la noticia. Y algunos tweets, como el de Abbas Azhar, fueron cautamente optimistas.

Finalmente, viene después de mucho tiempo… ¡Ojalá que no demos un paso atrás!

Multipak trató de aclarar algunos errores acerca de la violencia doméstica para destacar la importancia del proyecto:

Con la violencia doméstica en mente, muchos creerían que es un crimen en contra de las mujeres de las clases más bajas las que son golpeadas o torturadas por sus esposos. Esto es un error. Según los expertos, existe en toda clase socioeconómica, y puede verse justificada con cualquier argumento. Puede ser emocional, lo que incluye amenazar a una esposa con severas consecuencias….

Desafortunadamente, muchos crímenes en contra de las mujeres son barridos debajo de la alfombra por el hecho de ser un asunto “privado”. Así, hay necesidad de restringir toda división de espacio en un delito.

El proyecto recordó a Phillygirl en un blog grupal desde el extranjero, Sepia Mutiny, del predominio de la violencia doméstica en su niñez:

Hasta donde puedo recordar, he colocado a la cultura pakistaní en la categoría de indiferencia/aceptación cuando se trata del asunto de proteger a mujeres y niños de los efectos de la violencia doméstica. Como niña, la violencia doméstica era una inextricable característica de la cultura en la que crecí….

De mis padres, seguí escuchando historias de mujeres cuyos esposos y padres les daban cachetadas. Y cuando estaba en secundaria, escuchaba historias similares de otros compañeros de clase que eran del sudeste asiático. Pero me complace que Pakistán (¡por fin!) esté dando un pequeño paso en la dirección correcta cuando se trata de ver la violencia doméstica como un delito sancionable opuesto a un asunto familiar privado.

En el post más extenso acerca del proyecto – que compara la legislación sobre violencia doméstica con las draconianas Ordenanzas Hudood y pone al proyecto dentro del contexto de la historia de los derechos de las mujeres pakistaníes – Sana Saleem en Mystified Justice toma el tema con la cláusula de que una denuncia falsa de abuso se sanciona con prisión así como con una multa. También plantea interrogantes sobre la efectividad del proyecto:

• Primero y principal, hacer que las mujeres realmente presenten una queja. En la mayoría de los casos las mujeres están demasiado asustadas como para denunciar y no tienen medios para hacerlo. Considerando eso, se necesita tomar medidas significativas para registrar las peticiones genuinas.
• El comité de protección consistirá de “dos oficiales de policía y dos mujeres consejeras”. Dada la enorme falta de confianza que la gente tiene en el departamento de policía, ¿cómo se asegura la transparencia? El informe de Amnistía Internacional establece: “Cuando las mujeres están seriamente heridas por sus esposos o familias, la policía encima las desanima a que presenten denuncias y les aconsejan que busquen la reconciliación con sus esposos o familias….
• También, cuando las leyes sin sentido como las Ordenanzas Hudood, sigan estando parcialmente vigentes, cuál sería el destino sugerido para el proyecto de violencia doméstica. La Ordenanza Hudood es un ácido recordatorio de las condiciones de los derechos de las mujeres en Pakistán.
• Elaboración de quién será responsable de juzgar la autenticidad. De nuevo la Ordenanza Hudood es responsable de que muchas víctimas de violación terminen en prisión.

Mientras tanto, Tanzeel en Pak Spectator trató de reconciliar la postura progresiva del proyecto con visiones conservadoras sobre la permisividad de la violencia doméstica:

Sorprendentemente, la violencia doméstica es un problema que crece rápidamente en los países islámicos, aunque el Corán claramente niega cualquier clase de violencia en la mujeres en cualquier manera, sin embargo nuestros ilustrados eruditos a través de diferentes interpretaciones finalmente han llegado a la conclusión de golpear a la esposa….

Los que traen justificaciones religiosas para golpear a sus esposas deberían pensar también en razones humanitarias, a veces no tenemos que creer en todos y cada uno solamente porque un erudito siente que sus mujeres deben ser tratadas así, con el debido respeto le sugeriría al juez saudita que deje de retratar una falsa imagen del Islam y que evite mezclar cultura con religión.