Francia: ¿Prestigioso premio literario conlleva un “deber de reserva”?

La temporada literaria francesa de este año se inició con la entrega a la novelista y dramaturga franco-senegalesa Marie N'Diaye del muy esperado Premio Goncourt. Sin embargo, N'Diaye y su familia se mudaron a Berlín hace dos años, en gran parte debido a la política del presidente francés Nicolás Sarkozy. El año pasado, el panel de este prestigioso premio provocó asombro cuando eligió al escritor afgano Atiq Rahimi por su novela escrita en francés Syngué Sabour. ¿Será esta otra oportunidad para celebrar la diversidad en una cambiante sociedad francesa? ¿O la controversia echará a perder el momento?

DW_World explica:

En una entrevista con la revista “Inrockuptibles” el pasado verano, N'Diaye dijo que había decidido salir de Francia y mudarse a Berlín en 2007 “en gran parte debido a Sarkozy”.

La controversia comenzó luego que Eric Raoult, legislador y miembro del partido de gobierno de Sarkozy, Unión por un Movimiento Popular, escribiera al Ministro de Cultura la semana pasada  recomendando que a NDiaye le recordaran el “deber de reserva” que viene con el Goncourt.

En respuesta, el sistema cultural de Francia ha lanzado al debate acusaciones de censura. Bernard Pivot, uno de los miembros del jurado del Goncourt, acusó a Raoult de no saber nada de la escena literaria.

N'Diaye  nació en 1967 y es hija de madre francesa y padre senegalés. Ganó el Premio Goncourt por su novela, “Trois femmes puissantes” (”Tres mujeres poderosas”), una historia acerca de tres mujeres atrapadas entre Francia y Senegal y la infernal odisea de la migración ilegal desde África.

“La historia de estas migrantes ha sido contada muchas veces antes, pero si esto puede ayudar a que la gente entienda su destino un poquito mejor, estaré feliz”, ha dicho NDiaye.

¿Qué es lo que ha provocado la ira de Eric Raoult? Nada menos que una entrevista de la novelista, cuando respondió a la pregunta de la revista Les Inrocks: “¿Te sientes bien en la Francia de Sarkozy?” diciendo [fr]:

«Yo encuentro que esta Francia es monstruosa. El hecho de que nosotros (con su pareja, el escritor Jean-Yves Cendrey, y sus tres hijos) hayamos elegido vivir en Berlín está relacionado con eso. (…) Encuentro detestable esta atmósfera de vigilancia, de vulgaridad…»

El reconocido blogger de derecho Maître Eolas desvirtúa la afirmación del señor Raoult en un post irónicamente bien fundamentado [fr], y finalmente le concede el “Premio Busiris” (”buse” se puede traducir como “estúpido”).

Primero, corrige un error gramatical:

Para empezar, y el Ministro de Cultura y Comunicación deberá rectificarse él mismo, el deber de reserva no puede ser atribuido a los premiados sino que debe ser atribuido por los premiados: este error en la preposición convierte al premiado en el acreedor, mientras que en la mente la cabeza del diputado, sería evidentemernte el deudor.

¿Y legalmente? Entre los textos, el blogger cita por supuesto la Declaración de los Derechos del Hombre y el Ciudadano de 1789 junto con la Convención Europea sobre Derechos Humanos. ¿Y el “deber de reserva”, que tradicionalmente se pide a los servidores públicos?

El deber de reserva es invocado a menudo a diestra y siniestra por personas que no han entendido nada, como prohibir a un funconario a expresarse, a veces incluso por encima de temas puramente privados.

El abogado blogger concluye sobre la deshonestidad del parlamentario, antes de dar el golpe final:

Agreguemos que en 2005, mientras era alcalde de Raincy, durante los disturbios de otoño, fue el primero en proclamar el estado de emergencia en su comuna a pesar de estar libre de los actos de violencia con la finalidad de saltarse al Primer ministro, lo que muestra una cierta tendencia a la gesticulación inútil para atraer la atención hacia él.

Lo que al mismo tiempo establece el motivo de oportunidad política, y conlleva la decisión.

Otros bloggers tuvieron también irónicas palabras.

En Art contemporain, la peau de l'ours, Philippe Rillon escribe [fr]:

Comprendemos bastante bien que el deber de reserva se le impone a todo servidor del Estado, pero ¿desde cuándo la literatura y los autores han sido asimilados a los funcionarios con sus derechos y deberes?

Ya teníamos una “cultura administrada”, ahora nos hemos convertido en “artistas funcionarios” como si París fuera Berlín Oriental antes de la caída del Muro…
(…)
Sería asombroso que al día siguiente de una conmemoración hipermediática de la caída del Muro, este incondicional partidario venga a echar a perder la idílica vista de la caída de los dominós.

Mientras tanto, Marie Ndiaye, tras un intento de bajarle el tono a sus palabras en una entrevista con la estación de radio Europe 1, que pasó desapercibida en medio del alboroto, hizo un llamado al Ministro de Cultura de Francia, Frédéric Mitterrand. Este último considera que la controversia es “trivial” y “ridícula” [fr], y los principales actores se mantienen en sus trece [fr].

Inicia la conversación

Autores, por favor Conectarse »

Guías

  • Por favor, trata a los demás con respeto. No se aprobarán los comentarios que contengan ofensas, groserías y ataque personales.