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Jordania: ¿enseñar a los jordanos a reírse de sí mismos?

Categorías: Medio Oriente y Norte de África, Jordania, Arte y cultura, Humor, Ideas, Libertad de expresión, Medios ciudadanos

En diciembre se llevó a cabo el Segundo festival de monólogos humorísticos de Ammán [1] [en], con comediantes provenientes de Norteamérica en su mayoría [2] [en]. El periódico The New York Times publicó un artículo sobre el festival, titulado «Los cómicos descubren que los jordanos tienen sentido del humor [3]» [en]. Sin embargo, a algunos nos les agradó el tono. 

As'ad AbuKhalil, un blogger libanés que escribe en The Angry Arab News Service, cita un extracto del artículo de Michael Slackman [4] [en]:

Observen esta introducción en el NYT: «A causa de la animosidad, desconfianza y falta de comprensión que hay entre el Oeste y el mundo musulmán, este pequeño país del Medio Oriente ha demostrado que aquí la mayoría tiene la capacidad de reírse de si mismo, y también de chistes sobre el cuerpo y sus funciones».

Antes que nada, ¿qué tiene que ver el «Oeste» con todo esto? A no ser que quieran decir que el Oeste creó el humor, además de las batidoras, por supuesto. En segundo lugar, ¿qué clase de conjetura se quiere transmitir? ¿Que «esas personas» pueden reír y por eso despiertan a los niños y largan a los cerdos del granero? ¿Qué sigue para el equipo de investigaciones exteriores del New York Times? ¿Una historia sobre cómo los árabes saben cómo tirar la cadena del inodoro y usar una toalla? ¡Qué arrogancia!

En una publicación posterior, As'ad AbuKhalil cita parte de una carta que una estudiante jordana graduada le envió a Slackman [5] [en]:

No pude evitar percibir un tono condescendiente en su informe sobre el Festival de Comedia de Ammán. Dió a entender que los jordanos no supieron lo que es la risa, o mejor dicho, la comedia, hasta la llegada de los Grandes Cómicos Norteamericanos. Parece estar argumentando que los jordanos nunca «se han reído de sí mismos» antes del Festival de Comedia de Ammán, cuando sucede todo lo contrario, y lo hubiera notado fácilmente con una pequeña búsqueda de información. Jordania ha tenido, y aún tiene, comediantes locales muy conocidos, como Nabeel Sawalha, Hisham Yanes, Amal Dabbas y Musa Hijazin, solo por nombrar algunos de tantos.

La carta continúa:

Además, a juzgar por el hecho de haber recibido a estos comediantes, los jordanos están acostumbrados a «reírse de sí mismos». De hecho, incluso el difunto rey Hussein [6] «se rió de sí mismo» cuando Hisham Yanes lo imitó en el escenario. Cuando usted accidentalmente menciona que «los árabes no desconocen la comedia», de todos modos aún fracasa en reconocer que la comedia jordana ya ha realizado todo lo que usted afirma que el monólogo norteamericano ha traído por primera vez al país: hacer «hincapié en el desprecio propio y en cruzar los límites». Es irónico cómo el «cruzar los límites» que se dijo haber dado a la audiencia jordana «No contiene insultos. No se burla de la religión. No se burla del rey (o de su familia). No contiene bromas sobre sexo. No contiene bromas sobre drogas. Y, por supuesto, tiene prohibido el alcohol».    

Entonces, ¿a qué límites se refirió exactamente? ¿Qué límite puede ser superior que interpretar al difunto Rey Hussein en el escenario en la década de los '90 (como lo hizo Hisham Yanes), o al espíritu de Sheikh Ahmad Yaseen [7] luego de haber sido asesinado (como, repito, lo hizo Yanes), o a una mujer de Salt, Jordania [8], [en], postrada y amargada en Norteamérica (como lo hizo Amal Dabbas), o incluso superior que reírse de la historia coránica de Adán, Caín y Abel (como lo hizo el trío de Yanes, Sawalha, Dabbas)? Abundan los ejemplos de comediantes jordanos que han cruzado los límites y están disponibles en YouTube y en árabe. Bastante atrevidos, ¿no? Como jordana, sentí que en su artículo hizo muchas generalizaciones sobre el sentido del humor de los jordanos, quizás valiéndose del estereotipo de que «los jordanos son demasiado serios». 

Y concluye:

El artículo contenía de forma implícita un tono condescendiente que podría llevar al lector a creer que A) los jordanos no supieron lo que es la comedia/risa hasta la llegada de los Dioses Norteamericanos del Monólogo Humorístico, B) la comedia jordana nunca cruzó los límites, ya que esa es la especialidad de los cómicos norteamericanos, C) los jordanos no pueden exprezarse sin la ayuda de los Misioneros de la Risa, tales como los canadienses y los norteamericanos.