La ecologista Bharati Chaturvedi voló 40 horas desde su Delhi natal (la India) a Santiago de Chile, para ahondar en un asunto sucio: la basura. Mientras que los políticos en Chile intentan ver qué hacer con el reciclaje a un nivel nacional, Chaturvedi anima a que aquellos que recogen basura de forma profesional, o «recicladores», se incluyan en la solución.
Chaturvedi soportó el doble vuelo nocturno para compartir su riqueza de conocimientos sobre los recicladores en la India y también para aprender del incipiente sistema de reciclaje chileno. Representantes de Kenia, India, Colombia, Argentina y Brasil, junto a Chaturvedi, llegaron a un foro en Santiago el 16 de agosto para tratar el tema de los recicladores, con un enfoque especial en la mujeres.
Chaturvedi, fundadora y directora del Grupo de Investigación y Acción Ambiental Chintan, aboga por formas respetuosas con el medio ambiente para tratar con la creciente urbanización en la India. Chaturvedi también prioriza el aspecto humano del comportamiento ecológico en ciudades indias con barrios marginales desbordados.
Trabajar para organizar a tantos como 1,5 millones de recicladores en la India [en] requiere un cierto ímpetu. Mientras se sienta para la reunión del miércoles por la mañana después del vuelo, rechaza con educación una taza de café mientras se pone manos a la obra.
Dijo, «reciclar (en la India) no es ecológico porque los recicladores… trabajan realmente en malas condiciones. Si no trabajan en buenas condiciones, no deberíamos estar orgullosos de ello», y añadió, «muchas personas dirían que está de moda ser ecológico, pero ellos no se tomarán la molestia de hacerlo».
Gracias a grupos altamente organizados, como el Movimiento Nacional de Recicladores de Chile, los chilenos modernos pueden ser ecológicos sin levantar un dedo. Chile acumula más de 15 millones de toneladas de basura, según un informe de 2010. Los recicladores ayudan hurgando en la basura en busca de objetos que llevar a los centros de la ciudad.
Para las personas ocupadas que trabajan de nueve a cinco, la caminata a un centro de reciclado no está siempre al principio de la lista de cosas por hacer. Emily, una estadounidense en Chile y que publica Don't call me Gringa, escribió en su blog [en]:
Este fin de semana tuvimos, con probabilidad, la experiencia de reciclado más difícil de toda nuestra vida. Reciclar en Santiago ya no es especialmente fácil… Hay todavía una peregrinación involucrada (nada del tema de recogida casera a la que estoy acostumbrada en E.E. U.U.).
Sin embargo, los recicladores están ansiosos por sacar la basura y algunos terminan ganando el doble del salario mínimo en Chile al hacerlo, según el presidente de los recicladores, Exequiel Estay.
Los recicladores que entienden de tecnología mantienen un blog, una página de Facebook, una cuenta de Twitter y un canal de Youtube para organizar su red de apoyo. Se han expandido por todo el mundo uniéndose a organizaciones internacionales de recolectores. Según Boston.com [en], 50 millones de personas en todo el mundo recogen basura para ganarse la vida.
Los recicladores quieren asegurarse de que sus trabajos no se destruyan cuando entren en vigor las nuevas leyes de reciclado.
Uno de los seguidores de los recicladores, Santiago A. (@racionalisimo), escribió en Twitter:
Es necesario apoyar a las cooperativas de recicladores. Hacen un gran aporte a la sociedad y se trata de formalizar un poco más su trabajo.
En Sobre politicas, un blog político en Colombia, se lee:
En ella [la ley] hay algunos párrafos que prohíben:
1. Abrir las bolsas de basura en lugares poco apropiados como la calle.
2. Llevar basura en vehículos poco apropiados.
En otras palabras, las personas con ingresos bajos «no reciclan«, es el lema de esta ley, y se pudren (no malinterpreten la palabra) en la calle sin nada que comer.
Esta ley apoya claramente la gestión de la basura por personas que tienen dinero y se lo impide a personas que realmente lo necesitan.
La Corte Constitucional de Colombia cambió la ley. Ahora redefine [en] a los recolectores como «empresarios».
En muchos países de todo el mundo, los recolectores suponen un estereotipo negativo. Chaturvedi explica que los recolectores empobrecidos en la India viven en condiciones poco mejores que en un vertedero, lo que contribuye a una cierta animosidad.
«Mucha gente dice, ‘Qué asco. ¿Has tocado la basura y ahora vas a tocar mis platos? Es repugnante. Voy a coger una enfermedad'», dijo.
Teniendo en cuenta la avalancha de manifestantes que marchaba por las calles de Santiago, «Chile debería saber por sus circunstancias actuales lo importante que es incluir a las personas y escucharlas», añadió.
Tan diferentes como pueden parecer, la India y Chile comparten «un lugar para hacer políticas que incluyen especialmente a los pobres».
Estas leyes benefician tanto a los negocios como a los recolectores, según Chaturvedi, debido a que el «sector informal es mucho más eficiente que el sector formal» al tratar con desechos.
Hasta el momento, las leyes sobre el reciclaje están sólo en fase de debate; no obstante, los recicladores buscan estar en medio de la acción durante la toma de decisiones.
» Tenemos que mirar a la ciudadanía que mira a los ciudadanos», dijo Chaturvedi, «no es un asunto de ricos contra pobres. Es sobre cómo queremos vivir en una ciudad con principios básicos».
5 comentarios
Muy interesante. El reciclaje es fundamental para que tengamos un medio ambiente puro. Los paises deben garantizar el manejo adecuado de sustancias contaminantes, ya que las consecuencias sobre la población pueden llegar a ser muy peligrosas.