Desde el mes de setiembre, el estado palestino propugna por uno de sus sueños más anhelados: Ser reconocido por las Naciones Unidas como estado miembro. El presidente de los territorios palestinos, Mahmud Abbas, expresó ese deseo durante la pasada Asamblea General de esa organización, y aunque la gran mayoría de los países miembros reconocen a Palestina como estado, países como Israel y Estados Unidos se siguen oponiendo a su inclusión–especialmente cuando éste último tiene poder de veto dentro del Consejo de Seguridad.
En Latinoamérica son pocos los países que no reconocen al estado palestino—entre ellos Colombia. Por ello, el Presidente Abbas visitó al Presidente Juan Manuel Santos en Bogotá para tratar de cerca el espinoso tema de las relaciones entre Palestina e Israel, que también abarca los territorios de Cisjordania, la Franja de Gaza y Jerusalén Este.
El Presidente Santos reiteró su apoyo a la creación de un estado palestino siempre y cuando esos dos países garanticen la paz por medio de negociaciones. Abbas agradeció el interés de Colombia y su voluntad de iniciar nuevos diálogos en torno al tema, en tanto que el Presidente Santos reportó los resultados de esa reunión al premier israelí Benjamín Netanyahu, al ex ministro británico Tony Blair y la secretaria de estado de Estados Unidos Hillary Clinton.
El blog La Polémica reafirmó lo que el gobierno colombiano opina sobre el conflicto entre palestinos e israelíes:
Tuvimos razón en el año 1947: se creó el Estado de Israel y el conflicto lleva 60 años. Lo que no queremos y no nos parece, y tal vez por ser un país que ha vivido un conflicto interno nos llega más al fondo, es que sin un acuerdo de paz, no se debe crear un nuevo Estado.
La Silla Vacía acota que la visita de Abbas a Colombia fue una pérdida de tiempo, de acuerdo con un artículo de una conocida cadena de noticias, por las estrechas relaciones del Presidente Santos con Israel.
Así lo reconoció en un artículo la cadena Al-Jazeera títulado ‘Mahmud Abbas pierde su tiempo en Colombia’ que reveló los negocios de armas entre Israel y Colombia. El artículo -escrito por Sebastián Castañeda, columnista sobre Colombia en esta cadena- cuenta cómo, desde 2006, cuando Juan Manuel Santos fue nombrado Ministro de Defensa, la relación Israel-Colombia se fortaleció.
El blog Nzazaoth señala que la tarea de convencer a Colombia, quien es además miembro no permanente del Consejo de Seguridad de la ONU en la actualidad, para que dé su voto a favor de Palestina fue ardua:
La tarea en Colombia del presidente de la Autoridad Nacional Palestina (ANP), Mahmud Abbas, no parece fácil. Llegó ayer a Bogotá, en una visita privada, con el propósito de convencer al Gobierno colombiano, como miembro no permanente del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas (ONU), de respaldar el reconocimiento del Estado palestino.
La cadena radial RCN (@rcnlaradio) reportó en Twitter la inconformidad de los nacionales israelíes ante la visita de Abbas:
Israelíes protestan en Plaza de Bolívar por presencia de Mahmud Abbas en Colombia http://turl.co/i/peltz
Santiago Pelaez (@SantiagoPelaezH) se une al sentir de los blogueros ya mencionados:
#SebastianCastañeda: “#MahmoudAbbas está perdiendo su tiempo en Colombia” http://ow.ly/6U5LF#Internacional #Politica #Diplomacia
Pilipe Anakaleki (@The_Whitedemon) hizo uso del humor al señalar que lo único que Abbas pudo sacar de la visita de Colombia fue la visita al centro histórico de Bogotá:
Colombia ofreció mediación en conflicto entre palestinos e israelíes http://bit.ly/pMDYbG // #Hecho Abbas vino de paseo a conocer el centro.
En cambio, un tuiteo del Partido Comunista (@notipaco) defiende la tarea de Abbas en suelo colombiano:
Abbas no viene a tratar de cambiar la posición de Colombia en la discusión, sino a buscar salidas para el conflicto con Israel
Y Andrea Bernal (@abernalNTN24) cree que, a pesar que Abbas reiteró que las relaciones con Colombia no cambiarían independientemente de su posición, no se va satisfecho de Bogotá:
No creo que Mahmud Abbas, quede muy contento con la posición de Colombia. Santos insiste en sentarse a negociar.