El cóctel explosivo entre burbuja inmobiliaria, crisis y paro ha dejado a miles de familias sin casa en España. Pero las víctimas de la ejecución de hipotecas que ya no pueden pagarse no son anónimas, tienen nombre y una historia que contar.

Se trata de Francisco, que había de ser desalojado de Getafe (Madrid) esta semana; y de Sheila y Madeleine, madres solteras de cinco niños, que lo serán en Barcelona; y de Álex y su familia, que han regresado de okupas a la vivienda que perdieron en la localidad catalana de Terrassa. Todos ellos contrajeron hipotecas en los años de supuesta bonanza y créditos fáciles, se quedaron sin ingresos y ahora no pueden afrontarlas. No sólo pierden sus pisos sino que continúan endeudados. Son muchos más, se cuentan a miles, pero han salido del anonimato gracias a un colectivo de activistas, compuesto por afectados y personas solidarias, que se han unido en una campaña de resistencia pacífica para parar la sangría. El lema es claro: “No dejaremos que el banco nos eche de nuestras casas”.

Esta suerte de guerrilla contra los desahucios nació en 2009 en Barcelona cuando un grupo de víctimas creó la Plataforma de Afectados por la Hipoteca (PAH), que denuncia el desamparo de la población y la sobreprotección jurídica de las entidades financieras. “Ni a los bancos ni a los poderes públicos les interesa que hagamos ruido”, afirman en su blog. “Resistir a los desahucios significa desafiarles, plantarles cara, mirarles de igual a igual (…). Nuestra casa es nuestro instrumento de lucha, nuestra palanca de presión, nuestra mejor aliada”. En noviembre de 2010 consiguieron marcar un hito: paralizaron un primer desahucio cerca de Barcelona e impidieron que Lluís y su hijo de trece años se quedaran en la calle.

La PAH siguió trabajando, hasta que esta primavera recibió un refuerzo inesperado, el apoyo de los colectivos que forman parte del movimiento 15M. Ahora existen otros grupos similares y asambleas de barrio, entidades sociales y vecinales en muchas ciudades españolas que luchan por el derecho a una vivienda digna. En total, la PAH asegura que se han conseguido paralizar 109 desahucios. Son muchos, pero queda un enorme trabajo por hacer teniendo en cuenta que calcula que entre 2007 y 2011 se producirán cerca de medio millón de ejecuciones hipotecarias en España (han sido 32.000 procedimientos en el primer semestre de este año y fueron casi 48.000 en 2010, según datos del Consejo General del Poder Judicial).

Una alianza digital

La campaña cuenta con un potente aliado en la red, desde donde se organiza y conecta a los afectados con activistas y el resto de la sociedad. La página web de Stop Desahucios se creó en junio con el objetivo de generar una red de alertas y un mapa estatal del drama. Cualquiera que vaya a ser víctima de una ejecución hipotecaria puede colgar ahí su caso y poner en marcha un mecanismo de coordinación para recibir ayuda. Los avisos se difunden también a través de sus cuentas en Twitter, como @LA_PAH y @stopdesahucios, y de los hashtag #stopdesahucios o #stopdesnonaments (‘stop desahucios’ en catalán). Y funciona: los tuiteos se retuitean y la información se disemina y se consigue que grupos de simpatizantes, vecinos y activistas acudan a la cita para paralizar las expulsiones. Aquí hay unos cuantos ejemplos de estos últimos días:

@oscartaxibcn: Mañana pararemos un desahucio 13D, Barcelona – Ciutat Meridiana. A las 08:30h, C/ Les Agudes 58b, bloque K #stopdesnonaments via @LA_PAH

@alertadesahucio: L'Hospitalet. Parado hoy desahucio en la C. Jardín. Próxima cita el jueves a las 8 en C. Llançà, 7 miguel-delamo.blogspot.com/2011/12/otro-d… #stopdesahucios

@GetafeAsamblea: Si conseguimos ayudar a Antonia, el miércoles hay que apoyar a Paco ¿venís?#stopdesahucios bit.ly/sMs2pi

«Familia desahuciada, casa reapropiada!”

Con el tiempo, la PAH y el 15M han abierto otro frente de lucha. Ya no se trata sólo de paralizar los desahucios sino también de realojar a las familias en edificios en desuso fruto de la especulación inmobiliaria. (“Familia desahuciada, casa reapropiada!”). Los primeros casos tuvieron lugar en Barcelona y Madrid el 15 de octubre, tras la manifestación indignada global, masivas en ambas ciudades. Bajo el lema, “de la indignación a la acción”, en la capital catalana se ocupó un edificio propiedad de una constructora embargada y en la española, el “Hotel Madrid”, un establecimiento en concurso de acreedores. Ambas iniciativas cuentan con un blog: Edifici 15O y Hotel Madrid. Aunque la policía acabó desalojando a las familias acogidas en el Hotel Madrid, el movimiento no se desanimó. El usuario de twitter @Arganda15m escribió ese mismo día: “Se corea «Un desahucio otra ocupación» #sincasa».

Un mes más tarde, el 18 de noviembre, se produjo un caso parecido en Barcelona, cuando miembros de la Asamblea Indignada del barrio de Sants, integrantes del 15M, ocuparon un bloque de pisos nuevos que llevaba un par de años vacío. Albergaron en él a cinco familias desahuciadas y abrieron un blog y una cuenta en twitter para difundir la información sobre el caso, conocido ya como “Habitatge18N” (‘Vivienda18N’ en catalán). Doce días después, cundió la alarma.

@La_Directa: Els #Mossos tenen previst desallotjar @habitatge18n d'Hostafrancs aquesta matinada

@Acampadabcn: Va, som-hi! Hashtag per seguir tot el que (no) passi aquesta nit a @habitatge18n ->#totesambH18n Recordem: c/ Hostafrancs, 3

El edificio fue, efectivamente, desalojado esa madrugada en una operación policial polémica que, según el colectivo, está siendo investigada por Amnistía Internacional. Pero el proyecto sigue en marcha y muy activo.

La campaña contra los desahucios ha captado el interés de los medios y algunas de las propuestas que defiende están haciéndose un hueco en la agenda política. Ese es el caso de la “dación en pago”, que promueve que se regule por ley que la deuda quede liquidada con la entrega de la vivienda, como sucede en otros países europeos. También han conseguido que algunas familias sean realojadas en viviendas sociales y que algunos ayuntamientos hayan pedido que se modifique la legislación hipotecaria.

Hay motivos para celebrarlo. Así es como lo hicieron en twitter el 30 de noviembre pasado:

@acampadasol Cumpleaños feliz para @La_PAH: 100 desahucios paralizados, ¡sí se puede! bit.ly/tBUefB#stopdesahucios

y en respuesta:

@LA_PAH: «@acampadasol felicidades tb a vosotr@s! es una victoria de tod@s!”