Este post es parte de nuestra cobertura especial Derechos Indígenas.
El asesinato de una niña de ocho años de la comunidad indígena Awa-Gwajá, presuntamente quemada viva [pt] por leñadores en el estado de Maranhão, Brasil, ha causado escándalo en internet, así como la incredulidad de muchos ante tanta crueldad.
El Consejo Misionero Indígena (CIMI) confirmó [pt] que «las sospechas indican que ha ocurrido un ataque entre septiembre y octubre contra el aislado campamento indigena» de la reserva Araribóia y agregó más información:
O corpo foi encontrado carbonizado em outubro do ano passado num acampamento abandonado pelos Awá isolados, a cerca de 20 quilômetros da aldeia Patizal do povo Tenetehara, região localizada no município de Arame (MA). A Fundação Nacional do Índio (Funai) foi informada do episódio em novembro e nenhuma investigação do caso está em curso.
Según [pt] Rosimeire Diniz, coordinadora de CIMI en el estado de Maranhão, «la situación ha sido reportada desde hace tiempo. Se ha convertido en un suceso frecuente, la presencia de estos grupos de leñadores, poniendo en peligro a los aislados indígenas. No se ha tomado ninguna medida concreta para proteger a esta población».
«El mundo necesita saberlo»
El periodista Eliano Jorge entrevistó [pt] a un indígena Guajajara que dijo:
[…] Os madeireiros estavam comprando madeira na mão dos índios (Guajajara) e acharam uma menininha Gwajá. E queimaram a criança. Só de maldade mesmo. Ela é de outra tribo, eles vivem dentro do mato, não têm contato com os brancos, são brabos.
El periodista Luis Carlos Azenha, por otra parrte, pidió precaución [pt]:
Renato Santana [assessor de imprensa do CIMI] negou a existência de alguma foto do corpo carbonizado. Só uma investigação oficial da Funai pode confirmar se de fato existe o corpo carbonizado e se de fato é de uma criança. Além disso, é preciso esperar o testemunho direto de alguém que presenciou o episódio para saber se houve crime e, se houve, para identificar os autores.
A lo que la periodista Niara de Oliveira respondió [pt], planteando el problema de supuestas coaliciones no oficiales entre entre «funcionarios de FUNAI en la región de Arame [y] leñadores y terratenientes locales»:
«não surpreende, portanto, que não haja investigação em curso e que o caso só agora tenha vindo à tona». Baseada no comportamento do governo federal para apurar o assassinato do cacique guarani em MS e na importância que dão aos povos indígenas quando se trata de beneficiar aliados (empreiteiros, ruralistas, desmatadores, madeireiros, etc) e baseada na importância que a imprensa governista dá aos mesmos povos indígenas, tendo a confiar na apuração do Rogério.
Rogério Tomaz Jr, nacido en Maranhão, fue el primero de la blogósfera en reportar el caso; publicó de forma irónica [pt] las diferentes hipótesis que han surgido acerca del caso, especialmente aquellas que acusan a los indígenas y las organizaciones sociales de mentir y fabricar una historia. Critica el silencio de los medios sobre el caso y afirma [pt] con molestia que si un indígena abofetea a un leñador o a un agricultor en el rostro habría innumerables editoriales.
El antropólogo Uirá Garcia, citado por ISA (Instituto Socioambiental) en su página de Facebook, dijo [pt] que «hay indicios de que una niña Guajá Awa del grupo que vive aislado en la reserva indígena de Araribóia, ha desaparecido de un pequeño grupo que se encontró con un conjunto de leñadores hace meses»:
Os Guajajara que encontraram o corpo comunicaram o ocorrido à Funai, mas nada foi feito. Essa informação já era conhecida por algumas pessoas ligadas aos povos indígenas do MA, a pelo menos 2 meses, porém, pela falta de provas mais concretas, ainda não havia sido divulgada. E agora, me parece que a informação (que pode sim ser verdadeira) «vazou» para a internet.
La doctora Diana Serra ha incitado [pt] a protestar en relación a la noticia:
Vejam a que ponto está chegando a violência no nosso estado do Maranhão. E o governo nada faz, Os representantes da Justiça nada fazem. Os representantes do povo nada fazem. […] É preciso que o mundo saiba o que acontece no Maranhão. Terra sem lei para os detentores de dinheiro e poder. Alguns, verdadeiros marginais, onde ainda resiste o coronelismo.
Persecusión de pueblos indígenas
Los Awá, vocablo que significa «hombre» o «persona», son, según [en] la organización Survival International, «una de las únicas dos tribus nómadas de cazadores y recolectores que quedan en Brasil»:
Algunos están incomunicados [en] y constan desde pequeños grupos familiares que huyen, viviendo en los últimos fragmentos de la cada vez más escasa selva tropical de Maranhão fuera de los territorios legalmente reconocidos, hasta aproximadamente 60 individuos viviendo en la reserva Araribóia, la cual está fuertemente invadida por leñadores ilegales.
En 2008, un niño Guajajara de siete años fue asesinado [pt] de un disparo por un motociclista en el pueblo de Arame y otros grupos indígenas también fueron víctimas de una violencia similar y de violaciones en la región. La violencia contra los pueblos indígenas en Brasil se ha extendido en proporciones alarmantes.
El actual genocidio contra los Guarani-Kaiowá en el estado de Mato Grosso del Sur ha estado recibiendo cada vez más atención en los medios alternativos, especialmente en la blogósfera, pero sigue siendo un tema prohibido en los medios masivos. El gobierno federal brasileño, tampoco ha tomado medidas para publicitar los delitos y en especial para evitar más muertes.
Otras poblaciones tradicionales también son víctimas [pt] de la violencia [pt], cometida mayormente por el gobierno federal -o a través de su silencio, que utiliza al ejército para intimidar a los negros cimarrones y expulsarlos de sus tierras. La construcción de la represa de Belo Monte es otra seria amenaza a la sobrevivencia de todas las comunidades indígenas en la región de la Amazonía.
Otro de los peligros presentes para los indígenas y poblaciones tradicionales de Brasil es la posible aprobación del nuevo Código Forestal, presentado por el político comunista Aldo Rebelo, en conjunto con el líder campesino Katia Abreu, y que está siendo respondida por ambientalistas y activistas de diferentes áreas.
El periodista Lucão, recordando el caso reciente en el que dos activistas del estado de Pará, José Claudio Ribeiro da Silva y Maria do Espirito Santo da Silva fueron «asesinados cobardemente por leñadores», como reportó Global Voices en mayo de 2011, es otro motivo para levantarse [pt] ante la atrocidad contra los Awá:
Como se não bastasse a brutal agressão que os madereiros promovem constantemente no norte do Brasil contra nossa flora e fauna, -pois derrubando árvores, pássaros e animais são agredidos diretamente-, a coisa agora descambou para a covardia tosca de atrozes bandidos que atrelados à cifras ignoram a vida da floresta e a vida humana.
El periodista Carlos Hermes, asombrado, se pregunta [pt] por cuánto tiempo serán toleradas tales atrocidades:
[…] imagine quantas atrocidades são comendidas [sic] por esses monstros em meio à disputa por mata virgem a ser desmatada e vendida por eles?O índio é um impecílio [sic] histórico a estes sertanistas fascínoras [sic] que destróem a maior riqueza do Brasil. Vivemos isso há mais de quinhentos anos e o Estado inoperante e conivente assiste como se fora algo banal. Até quando? Será que vai ficar impune?
Este post es parte de nuestra cobertura especial Derecho Indígenas.
1 comentario
!No me sorprende la noticia, pues el mismo hecho a ocurrido en otros paises de america latina. Espero que el gobierno de Dilma Rouseaff nombre inmediatamente una comision seria que investigue este y otros casos si los hay, rigurosamente. Ignorar estos crimenes, es fomentarlos y darles a los autores la impunidad para seguir cometiendo sus crimenes. En honor y respeto a nuestros indigenas, que son los primeros pobladores del continente, debe darsele primera prioridad a esta investigacion de asesinato y el Estado tiene la obligacion moral, de ir informando periodicamente al pueblo el curso de la investigacion segun vaya avanzando; pues el pueblo de Brazil y el mundo en general estara pendiente al desenlace de estos horribles sucesos. la comunidad internacional demanda justicia lo antes posible, para tranquilidad de los pueblos indigenas!