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Argentina: Conflicto diplomático con el Reino Unido por las Malvinas

Categorías: Latinoamérica, Argentina, Política, Relaciones internacionales

Argentina ha reclamado la soberanía de las Islas Malvinas desde 1833, año en que fueron ocupadas por Reino Unido. En 1982 se libró la Guerra de Malvinas [1], la cual duró dos meses y medio y costó la vida de 907 personas: 649 militares argentinos, 255 británicos y 3 civiles isleños. En ella Argentina se disputaba con Inglaterra la soberanía del archipiélago. Habiendo triunfado, Inglaterra logró mantener la soberanía de las Malvinas, que allí son conocidas como las Falkland Islands.

Sin embargo, el Gobierno Argentino aún sigue solicitando en los organismos internacionales el diálogo con Gran Bretaña para llegar a un acuerdo con respecto a la soberanía de Malvinas. Estos reclamos se han intensificado notablemente durante la última década, y ya en 2011, previo a las elecciones presidenciales argentinas, la Presidenta Cristina Fernández recibió [2] una clara negativa por parte del Primer Ministro británico David Cameron:

Mientras las islas Falklands quieran ser territorio inglés lo seguirán siendo. Punto, final de la historia.

La Presidenta Argentina no tardó en responder, unas horas después, definiendo [3] al Reino Unido como «una burda potencia colonial en decadencia» y a las palabras del Primer Ministro británico como «un gesto de mediocridad y casi de estupidez». Asegurando, además, que Argentina continuaría «incansablemente» con su reclamo en todos y cada uno de los foros.

Este fue quizás el punto a partir del cual la soberanía de las Islas Malvinas se convirtió en un tema aún más recurrente en los distintos medios informativos de Argentina, y en objeto de análisis y discusión en la red entre cada vez más internautas.

[4]

Monumento a los Caidos en Malvinas, Ushuaia, Tierra del Fuego, Argentina. Imagen de Leonora Enkin bajo licencia Atribución-CompartirIgual 2.0 Genérica (CC BY-SA 2.0)

Vaivenes del conflicto

A principios de enero de 2012, con el objetivo de presionar a Gran Bretaña a dialogar el asunto de Malvinas, Argentina coordinó un movimiento junto a los demás países del Mercosur, mediante el cual se bloqueó el acceso a los barcos con bandera malvinense. El 12 de enero el diario argentino La Nación publicó [5]:

Por medio de las respectivas cancillerías, Uruguay, Brasil y Chile ratificaron el bloqueo de barcos con bandera de las Malvinas. […] En todos los casos quedó en claro que aquellos buques que tengan bandera de las Malvinas no podrán ingresar en puertos del Mercosur, pero si cambian la insignia por la bandera roja comercial de Gran Bretaña sí podrán amarrar.

Fue ante estos hechos que el 18 de enero el Primer Ministro David Cameron encendió la polémica acusando [6] [en] a Argentina de ser ‘colonialista’, durante una sesión en la Casa de los Comunes (House of Commons):

Yo diría que lo que los argentinos han estado diciendo recientemente es mucho más colonialismo porque esta gente [los malvinenses] quiere seguir siendo británica y los argentinos quieren que ellos hagan otra cosa.

Previo a estas palabras, el Miembro del Parlamento Andrew Rosindell había exhortado [6] [en] a los argentinos a recordar que «perdieron la guerra», lo cual el resto de los presentes en la sesión festejó con carcajadas.

Tales críticas fueron recibidas con mucha polémica en Argentina y negadas por distintos políticos del oficialismo. El vicepresidente Amado Boudou dijo [7] al respecto:

Realmente es muy triste tener que escuchar esta falacia, este exabrupto. […] como mínimo es una falacia histórica lo que Cameron ha dicho respecto del colonialismo. […] Es un exabrupto torpe, ignorante, de ignorar la realidad histórica, nos deja medio impresionados tanta ignorancia. Que vuelva a los libros de historia.

El canciller Hector Timmerman agregó [8] que «Gran Bretaña es sinónimo de colonialismo», mientras que el Diputado de Santa Fe, Agustín Rossi, publicó [9] en Twitter:

Estoy presentando en Diputados un proyecto de resolución para que expresemos nuestro enérgico repudio a los dichos de David Cameron.

Por su parte, algunos políticos de la oposición recibieron las críticas del mismo modo que el oficialismo. El diputado nacional Ricardo Alfonsín dijo [7] que la palabras de Cameron «expresan una postura espantosa», y el excandidato a Presidente de la Nación Hermes Binner aseguró:

El hecho de que el gobierno conservador británico hable de ‘colonialismo’ suena a broma, dado que no se puede manosear la historia.

El Diputado de la Nación Fernando Iglesias, de la oposición, expresó [10] su desacuerdo con la postura del gobierno sobre Malvinas en Twitter:

Una cosa es el justo reclamo de retiro del Reino Unido y su base militar y muy otra la soberanía argentina sobre un pueblo que no la quiere

Del mismo modo, los internautas argentinos y del resto del mundo se encuentran divididos entre quienes creen que Argentina debería desistir en su reclamo por Malvinas y quienes apoyan la demanda.

La periodista Florencia Etcheves (@fetcheves) publicó [11] en Twitter, en relación también al conflicto [12] actual sobre mega minería en Argentina:

Mientras la prioridad es Malvinas , arrasan el [cerro] Famatina. Qué plato.

El usuario Martín Caparrós (@martin_caparros) también realizó [13] la misma observación:

¿No es maravilloso que simulen pelear por las Malvinas mientras le entregan toda la cordillera a las mineras multinacionales? #Famatina

De manera similar, el panelista de TV Gustavo Noriega (@Gus_Noriega) señaló [14] que hay asuntos más importantes de los que ocuparse:

#cosascotidianas la mitad del país sin cloacas, agua potable ni gas, pero ahora el tema es Malvinas.

Desde Chile, el periodista Felipe Avello Suazo se pronunció [15] en apoyo al reclamo argentino:

Los chilenos apoyamos a los hermanos argentinos: LAS MALVINAS SON ARGENTINAS. Avergonzados estamos por ayudar a los ingleses en los 80.

Los bloggers también opinaron sobre el tema. La médica Ana, en su blog ana-guev-logueando [16], reflexionó [17]:

Interesante y absurdo cruce diplomático con los ingleses, en donde los ciudadanos, argentinos e ingleses, caemos una vez más en la manipulación patriotera. […] Hasta una escandalosa guerra protagonizamos, donde – como siempre – los pueblos ponemos la sangre y los titiriteros ponen las cortinas de humo y los fantasmas. […] Tremenda paradoja de un mundo en donde valen más los quiebres que las comunicaciones, la fachada que la casa, los discursos que los actos, los fantasmas que los hombres.

Y Fabio Baccaglioni [18], en una extensa publicación, concluyó [19] con ironía:

Ese país [Inglaterra] está utilizando la palabra «Colonialismo» para describir a otros, no podemos ofendernos, deberíamos tan sólo cagarnos de risa.

Argentina más bien es un país colonizado. La cordillera le pertenece a Barrick Gold y a otras empresas mineras, no hay casi ninguna mina cuyo beneficio termine en el país. […] El agua poco a poco quedará en terrenos que no nos pertenecen, la patagonia es mitad inglesa o de Benetton, los campos de grandes empresas de afuera […] Tal vez Cameron se equivocó al expresarse y lo que quiso decir es que Argentina era una colonia que se creía independiente.