Por Sam Gregory, Director de Programa en WITNESS
Este es un extracto de una entrada de blog publicada originalmente en el blog de WITNESS. Lean el artículo completo aquí [en].
Observando el meta-debate [en] que surgió desde que “Kony 2012″ fue lanzado (vean las notas de una sesión de SXSW que organicé aquí [en]), en este blog propongo dos preguntas clave que pueden ayudarnos a convertir la crítica a la campaña en acciones.:
- La simplificación es necesaria para algunas audiencias. ¿Pero cuándo se llega demasiado lejos?
- Asunto de ética, representación y demarcación. ¿Cómo amplificamos la dignidad, fuerza y voces de la gente más afectada, incluso en el contexto de videos de audiencia masiva como Kony 2012?
Hemos sido capaces de tener esta discusión sin amontonar la culpa sobre los Niños Invisibles o satirizar los períodos de atención o compromiso de la gente que vio «Kony 2012″. Es asombroso y positivo ver a más de 100 millones de personas comprometida con un tema de los derechos humanos, incluyendo muchos jóvenes que nunca han estado involucrados con movimientos tradicionales por los derechos humanos.
De hecho, deberíamos desear que esto suceda una y otra vez –¿qué tal Siria, Guantánamo, la crisis mundial del agua o cualquier cantidad de problemas donde la gente necesita movilización más allá de las fronteras para detener la injusticia? (Avaaz ciertamente ha marcado un comienzo en esto).
¿Cuando la narración a una audiencia hace de lo simple algo muy simple?
Una de las principales quejas acerca de la campaña Kony 2012 de IC [Niños Invisibles] es que sobresimplifica la situación en el norte de Uganda.
Muchos comentaristas señalan que el film propone soluciones simples que no son prioridad hoy en día y que no atacan las dinámicas sistémicas que continuarán creando abusos a los derechos humanos (por ejemplo, respaldando al gobierno de Museveni [en] y enfocándose en una futura militarización, en lugar de las necesidades de rehabilitación de los sobrevivientes a la violencia del LRA [Ejército de Resistencia del Señor] y la reconstrucción del norte).
Escribiendo acerca de esto en una entrada previa [en] sobre el video Kony 2012, Ethan Zuckerman del Centro de Medios Cívicos del MIT (y fundador de Global Voices) plantea una pregunta mayor que el movimiento por los derechos humanos debería hacerse:
«Comienzo a preguntarme si este es un límite fundamental a la defensa basada en la atención. Si necesitamos narrativas simples para que así la gente puede amplificarlas y difundirlas, ¿estamos obligados a involucrarnos solo con los problemas más simples? ¿O proponer solamente las soluciones más simples?
Como alguien que cree que la capacidad de crear y compartir medios es una forma de poder importante, la historia de los Niños Invisibles presenta una paradoja difícil. Si queremos que la gente preste atención a los problemas que nos importan, ¿necesitamos sobresimplificarlos? Y si es así, ¿nuestras demarcaciones simplistas hacen más daño no intencional en lugar hacer el bien? ¿O es esta onda de retroceso contra esta campaña de los Niños Invisibles evidencia de que estamos aprendiendo a leer y escribir narrativas complejas en internet y que un estudiante con dudas acerca de los valores y la validez de la campaña puede encontrar una audiencia? ¿La campaña de los Niños Invisibles continuará inalterable o se comprometerá con las críticas y diseñará una respuesta más compleja y variados matices?»
Permítanme partir desde la pregunta de Ethan acerca de la simplicidad, estableciendo algunas sugerencias sobre cuándo ‘lo simple es muy simple’. No estoy diciendo que Kony 2012 es todo eso –por el contrario, sugiero cuánto necesitamos pensar acerca del avance de esta discusión presentando situaciones y soluciones en todo nuestro trabajo. Bajo esa luz, yo daría la bienvenida a sugerencias de videos y campañas que manifiesten tanto los riesgos potenciales como las respuestas innovadoras.
- Lo simple es muy simple cuando la sobresimplificación del problema lleva a modelar soluciones erradas o a impactos contraproducentes para las personas directamente afectadas.
- Lo simple es muy simple si a los participantes de la acción inicial que se les pidió tomar no está seguida por un siguiente paso en la escalera del compromiso (y acotaría que Niños Invisibles señala explícitamente que el video es un ‘punto de partida’ [en] hacia la participación).
- Lo simple es muy simple cuando forma una solución que desvía la comprensión de la audiencia de las causas sistémicas de un problema (dos análisis de esto en el contexto de Kony 2012 son presentados por Ethan [en] de nuevo y Conor Cavanagh [en]).
- Lo simple es muy simple cuando un sencillo punto de partida no permite a los observadores/participantes profundizar con facilidad e involucrarse con mayor complejidad (vean el documento de trabajo de Lana Swartz [en] sobre este potencial para la ‘profundización’ en campañas transmediáticas).
- Lo simple es muy simple cuando perpetúa los estereotipos (por ejemplo, un enfoque de ‘rescate’) o refuerza la falta de fuerza en situaciones donde esta ya ha sido atacada por las propias violaciones de los derechos humanos. En la raíz del trabajo por los derechos humanos está la dignidad humana [en].
- Lo simple es muy simple para un solo video por los derechos humanos cuando oculta los hechos, utiliza imágenes o entrevistas fuera de contexto o cuando abusa de las ideas éticas sobre la representación, particularmente cuando eso compromete la dignidad y seguridad de la gente.
Todo esto es importante si vamos a crear distinciones más claras entre el trabajo de defensa ético y la publicidad o propaganda.
También hemos blogueado algunos principios clave [en] sobre el uso de medios sociales en la inclusión con los derechos humanos y hemos discutido extensamente cómo pensar acerca de cuestiones de dignidad, seguridad y consentimiento en el video por los derechos humanos [en]. Además tenemos algunas guías internas que estaremos compartiendo en una próxima entrada de blog. Motivada por la discusión acerca de Kony 2012, Katrin Verclas de Mobileactive también ha compartido un proyecto de código de conducta sobre el activismo en línea [en] dirigido a una esfera más amplia de defensa.
¿Cómo una narración panorámica amplifica mejor las voces locales y aún así se conecta con bases de gente más amplias?
Un elemento clave de la narración faltante en Kony 2012 es la voz y acción de cientos y miles de ugandeses viviendo con el legado del LRA, o en el activismo y movilización para enfrentar ese legado. También faltan las voces de las personas que viven con la amenaza de la violencia del LRA en la República Democrática del Congo, la República Centro Africana y Sudán del Sur.
El retroceso de Kony 2012 indica un sendero híbrido que debemos seguir. Un camino que encuentra formas de entender cómo un mensaje más simple para las nuevas audiencias masivas puede ser informado por (y combinado con) la riqueza del conocimiento, soluciones y voces que existen pero no están siendo amplificadas. TMS Ruge ha acotado que la discusión ha dado la oportunidad a los ugandeses para que tomen el micrófono -desde los bloggers individuales como Rosebell Kagumire [en] hasta esfuerzos más sistemáticos como la promoción de Al-Jazeera de las voces ugandesas en respuesta a Kony2012 a través de su campaña #UgandaSpeaks [#HablaUganda; en]. Otros grupos como Resolve [en] (aliados a IC en el Explorador de Crisis del LRA) han agregado respuestas [en] al film desde comunidades en áreas actualmente afectadas por la violencia del LRA.
¿Cómo luciría una campaña como la de Kony 2012 completamente arraigada en las voces locales?
Comenzaría desde el debate con los activistas locales sobre soluciones y luego aprovechadas en poderosas narraciones para comunicarse con su audiencia principal de maneras éticas y directas que apoyen la fuerza de esos activistas locales. Esa narrativa pudiera ser dirigida por gente en el sitio o por un cineasta, pero habría un esfuerzo útil en asegurar que esas historias fueran parte del relato desde el comienzo -en películas solas y en el flujo de contenido que rodea a los medios de alto perfil. Aseguraría que cuanto más ‘difundible’ sea la campaña, esta también sería ‘profundizable’ (lo que significa que una persona puede indagar y entender fácilmente más allá del mensaje y la narrativa principal) y tendría una profundidad de voz y contexto (para más información vean un artículo en el blog de Henry Jenkins [en]). También crearía espacios para que esas historias de videobloggers, videoactivistas y testigos ciudadanos sean creadas, amplificadas, curadas y agregadas: Existe una cantidad de modelos para hacer esto bien, desde programas de formación de SmallWorldNews [en], WITNESS y muchos otros, hasta las comunidades editadas de Global Voices [en] y los espacios de curación y agregación de Crowdmap [en] y Crowdvoice [en] y las páginas en Facebook que actúan como nodos de múltiples voces como ‘Todos Somos Khaled Said‘ [en].
Entonces, ¿qué sigue?
A nivel de una campaña, son los primeros días de Kony 2012. Puede y habrá desacuerdos legítimos sobre su enfoque a la justicia y la reconstrucción de África Central. Tengo la esperanza que Niños Invisibles abrirá el diálogo con otros acerca de sus próximos pasos y cómo utilizan su púlpito de amedrentamiento. De cualquier forma, esta atención aumentada en los crímenes del LRA presenta una asombrosa oportunidad para pensar cómo asegurar la justicia y la recuperación en África Central y Oriental.
Más allá de las críticas, la comunidad por los derechos humanos necesita trabajar en cómo facilitar a los activistas que se involucran con IC una entrada hacia otros problemas en derechos humanos. Necesitamos construir una mejor distribución no patentada para involucrar a los seguidores y redes entre sí. Y necesitamos ayudarlos a involucrarse con las voces locales y las opiniones de los lugares donde su defensa y conocimiento tendrán un verdadero impacto.
IC ha resaltado (en en su video de respuesta [en]) su interés en responder las preguntas de la gente sobre su enfoque y estrategias y ser transparente. Ben Keesey, su director ejecutivo, pide a la gente que tuitée @Invisible [en] con #AskICAnything [#PreguntasparaIC; en] y han comenzado a responder algunas de esas preguntas aquí, aquí y aquí [todos los enlaces en inglés].
¿El increíble alcance y debate que ha generado Kony 2012 es algo bueno o malo? No hay respuestas sencillas a esto. Y no puedo hablar por el rango y diversidad de voces en Uganda, África Oriental y África Central, así como por los profesionales humanitarios, en derechos humanos y política, quienes pudieran argumentar soluciones alternativas a las defendidas en el video. El concenso sobre la solución política presentada inicialmente en el video parece ser: Muy simple y muy enfocada en la milicia. IC necesita trabajar en cómo expresar que hay más matices de los que buscan tras el titular. Pero independientemente, la atención se puede traducir en opciones concretas de cambio que generarán una paz duradera.
Además, el video ha atraído a 100 millones de personas, le ha dado una oportunidad a las personas de la región de decir por qué se oponen a él [en] (o lo aprecian [en]) y de amplificar sus voces (aunque accidentalmente) y nos está permitiendo tener una conversación sobre algunas de las principales preguntas. Impulsemos esa parte. Tengamos una discusión constructiva sobre el difícil balance entre defensa, audiencia y fuerza y sobre la ética, la simplificación y la voz local.