El fotógrafo coreano Ahn Se-Hong fue acosado antes y durante su exhibición en Japón, en donde expuso fotografías de las “mujeres de confort” en su vejez. El término “mujeres de confort” se refiere a las mujeres coreanas que fueron forzadas a la esclavitud sexual por los japoneses durante la Segunda Guerra Mundial. Ahn reveló que ha recibido amenazas [en] de grupos japoneses de derecha, quienes protestaron contra la exhibición.
En su página de Facebook [ko], Ahn Se-Hong (ahnsehong) reveló que durante su exhibición, lo vigilaron de cerca y que sus visitantes fueron requisados por agentes de seguridad contratados por Nikon, la compañía fabricante de cámaras, que también es dueña del edificio en donde se llevó a cabo la exhibición.
Al principio, Nikon se negó a prestar el lugar y canceló abruptamente el evento hace dos meses. Sin embargo, Nikon cedió ante la orden del Tribunal Distrital de Tokio que le ordenó ofrecer el lugar. Los medios especularon [en] que la cancelación repentina de la exhibición por parte de Nikon fue un intento por evitar la controversia y la presión de grupos conservadores [en].
En Corea del Sur, los internautas estallaron con ira y un sin número de usuarios acusó a los grupos japoneses de extrema derecha no solo de haber negado sus crímenes de guerra, sino también de tratar de sabotear la exhibición.
La exhibición de Ahn, “Capa a capa: las mujeres coreanas que fueron mujeres de confort del ejército japonés están olvidadas en China”, muestra los rostros de las víctimas inocentes que fueron arrastradas, sin razón, a situaciones horribles durante su adolescencia y su juventud y que ahora están arrugadas y lisiadas. Durante la colonización japonesa, cerca de 50 000 a 200 000 mujeres coreanas fueron secuestradas y forzadas a abandonar sus hogares para convertirse en esclavas sexuales del ejército. Menos del 70 % de estas mujeres lograron regresar a sus hogares.
El 26 de junio, Ahn escribió [ko] este comentario en su página de Facebook junto a la foto anterior. El post se ha compartido más de 900 veces:
오늘 사진설치를 하기 위해 기쁜 마음으로 니콘살롱에 왔으나. 도착해서 들어가 보니 실상을 달랐습니다. 니콘은 전시장을 빌려주는것 외에 아무것도 안한다고 했지만,외부 언론의 출입 통제및 개인이 사진 찍는 것 조차 못하게 하고 있으며, 심지어는 니콘측 변호사 3명이 저에게 붙어 일거수 일투족을 감시하며, 대화를 엿듣가하면 촬영을 하고 있습니다. 보러올 관객들을 위해 참고 있지만, 일제시대가 따로 없습니다. 니콘은 전시기간 내내 변호사를 상주 시켜 저를 감시하고 꼬투리를 잡아 전시를 중단시킬 계획입니다.
El fotógrafo añadió este comentario [ko] a la foto anterior:
이건 분명 인권 침해입니다. 오시는 모든분께 죄송할 따름입니다.
Hubo mítines menores de grupos de derecha frente al lugar de la exhibición. Ahn escribió que esperaba tal presión desde el principio. Dijo [ko]:
다음주부터 전시에 들어갑니다. 지금 일본에서는 우익들의 강한 반발이 시작 되었습니다. 조심하라는 등 지난번보다 협박의 수위가 높아지고 있습니다.
Otro usuario, Ahn Hyun, compartió [ko] su experiencia en la página de Facebook de Ahn:
건물 입구와 니콘의 홈페에지에는 할머니의 사진전에 관한 정보가 하나도 없습니다. 니콘 살롱 문을 을 여는 순간 니콘 경비원들은 관람자들의 가방을 열어 확인하고, 금속탐지기로 몸을 검사합니다. 오전중에는 여러 우익 단체들이 데모를 하고 전시장으로 찾아와 소란을 피우며 저에게 항의 서한을 전달 하여 했으나 실패하자, 더욱 거세게 소란을 피웁니다. 많은 언론매체가 취재를 위해 왔지만, 니콘의 건물전체 에서의 취재불가라는 이유로 기자와의 대화조차 가로막고 있습니다.결국엔 니콘의 시선을 피해 갤러리 건물을 벗어나는 순간에도 니콘관계자 둘은 건물밖까지 쫒아나와 감시하였습니더. […] 관람객 몇분이 할머니에게 꽃을 가져다 놓았지만, 니콘은 그것 마져 하지 못하게 저지하였고, 좋은일에 쓰라며 주는 기부금도 문제가 된다며 니콘의 변호사가 보관하고 있습니다. – 모든것이 상식밖의 일이고 저의 분노 또한 한계에 다다르는 순간이었습니다.
Sin embargo, hubo apoyo [ko] de algunos ciudadanos japoneses:
오늘 셀 수 없을 정도의 많은 분들이 다녀 가셨습니다. […] 저에게 많은 응원을 하시고, 할머니들을 위로하는 일본분들이 많았습니다. 혼란과 뿌듯함이 함께한 하루였습니다. 내일도 우익들의 집회가 예정되어 있습니다. 또 어떠한 난동을 피울지, 니콘의 감시는 어디까지 이어질지, 이 모든것이 할머니를 응원하는 이들을 이길 수 없습니다.
Muchos usuarios como @iron_heel escribieron [ko] en su Twitter [ko] que boicotearán a Nikon.
Esta no es la primera vez que grupos japoneses de extrema derecha provocan a los coreanos, chinos y otros pueblos asiáticos que sufrieron antes y durante la Segunda Guerra Mundial, cuando Japón colonizó Corea y ocupó partes de China. El 21 de junio, este video de Youtube, que muestra a un miembro de un grupo de derecha introducir una estaca en la estatua de las mujeres de confort, creó controversia. Se refería a las mujeres como “prostitutas”.
Estos grupos también están recolectando firmas para pedir [ko] que se quite un monumento en conmemoración a las mujeres de confort en los Estados Unidos [ko]; y así vuelven a despertar viejos rencores entre Japón y Corea del Sur.