En el portal tunecino de blogueo Nawaat, Christopher Barrie escribe [en]:
Ciertamente no es irracional sostener que la revolución de 2011 que siguió a este periodo de disturbios bien pudo haber ocurrido en ausencia de los nuevos medios. … Por lo tanto, es claro que la existencia de Twitter no fue un elemento decisivo en el brote de las manifestaciones masivas de 2010-11.