Desde las elecciones generales de octubre, 2010, Tanzania ha sufrido varias crisis, incluidas algunas que dieron lugar a violencia y muerte. La bloguera Dunia Duara hizo [en] una (incompleta) lista de acontecimientos alentados por diferentes tipos de crisis o conflictos, que han causado recientemente serios problemas en Tanzania:
2011 enero: La manifestación liderada por CHADEMA [principal partido de la oposición] en Arusha choca con la policía
2011 febrero: Explosiones en Gongo La Mboto
2011 julio: [Vendedores ambulantes] chocan con la policía en Mwanza
2011 setiembre: El MV Spicelander se hunde entre Zanzíbar y Pemba
2011 diciembre: Las inundaciones de Dar es Salaam
2012 febrero: Los asesinatos de la policía en Songea
2012 abril: Cuestiones de tierras y elecciones parciales en Arumeru
2012 mayo: Revueltas en Zanzíbar relacionadas con UAMSHO [grupo separatista en Zanzíbar]
2012 junio: Huelga de médicos (en el pasado mes de febrero y a partir de ahí) y el secuestro del Dr Ulimboka.
2012 julio: Se hunde un ferry en camino de Dar es Salaam a Zanzibar.
2012 julio: Revueltas en Zanzibar relacionadas con UAMSHO, y luto por los muertos en el accidente del ferry.
Más recientemente, el 2 de septiembre, 2012, el periodista tanzano Daudi Mwangosi fue asesinado con un bote de gas lacrimógeno en Nyololo Village en el sur de Mufindi (en la región de Iringa) al sur de Tanzania. El Citizen estuvo entre los primeros diarios tanzanos en informar [en] sobre el incidente, describiendo como la policía usó gas lacrimógeno para dispersar un grupo de partidarios del CHADEMA (partido de la oposición):
El señor Mwangosi se convierte en la segunda persona en ser asesinada en conflictos que enfrentan a las fuerzas de la policía y el partido de la oposición en el espacio de dos semanas. El 27 de agosto, Ally Zona fue asesinada en Morogoro mientras la policía dispersaba a los partidarios de Chadema que se estaban preparando para unas manifestaciones.
Rápidamente circularon por las redes sociales las fotografías del incidente en Nyololo Village. El blog Wawuti.com ha recogido una completa selección (ver la foto de arriba). [Por favor, tengan en cuenta que algunas de las fotos son muy gráficas y muestran los restos del periodista fallecido cuyo cuerpo fue volado en pedazos por un bote de gas lacrimógeno].
El incidente ha sido cubierto intensamente y muchos periódicos, en kiswahili e inglés, así como internacionales, lo han comentado extensamente. Los usuarios de las redes sociales han expresado su enfado y conmoción por lo que parece ser un asesinato sin sentido y muy violento. La gente ha expresado su conmoción tanto por el asesinato como por la brutalidad policial.
El blog Daraja produjo rápidamente una lista factual de «fuentes clave» [en], que incluye enlaces a la declaración [en] del Consejo de Medios de Comunicación de Tanzania y la declaración [en] del Consejo de la Asociación de la Prensa Mundial, pero Daraja también hizo un análisis profundo – afirmando en el titular que «se ha cruzado una línea».
Primero, una descripción general [en] de lo que pasó:
Nos dicen que Mwangosi estaba en Nyololo, junto con varios otros periodistas, para informar sobre la apertura de una oficina de Chadema en el pueblo, desafiando las órdenes de la policía contra las actividades políticas durante el periodo de realización del censo. Había una fuerte presencia policial en el pueblo. Otro periodista, Godfrey Mushi, de Nipashe, fue detenido por la policía y, Mwangosi, fue a averiguar por qué. Entonces, un grupo de policías se volvieron contra Mwangosi, pegándole duramente durante varios minutos.
Los informes nos dicen que el Jefe de Policía Regional, Michael Kamuhanda, estaba cerca en un coche aparcado, y fue informado que el hombre al que la policía estaba pegando era un periodista. Sin embargo, no hizo nada para pararlo y unos pocos minutos más tarde un bote de gas lacrimógeno fue disparado al estómago de Mwangosi a quemarropa. Mwangosi murió instantáneamente y un agente de policía fue herido.
Daraja continúa [en]:
No hay ninguna sugerencia de que Daud estaba haciendo algo indebido. Estaba allí como periodista, con un derecho legítimo a estar allí e informar sobre las actividades de Chadema y la respuesta de la policía. No estaba allí como un partidario de Chadema en una concentración, así que ni siguiera estaba rompiendo la prohibición de la policía de actividades políticas durante el periodo de censo. (Aunque incluso si un activista de Chadema hubiese sido asesinado de esta manera, las acciones de la policía todavía habrían sido desproporcionadas y erróneas).
Daraja plantea cuestiones serias [en]:
¿Rendirá cuentas el policía responsable de esto?
Y ¿Cúal será su efecto en los medios de comunicación?
Las respuestas están lejos de ser dadas.
Los profesionales de los medios de comunicación tanzanos han expresado su solidaridad con su antiguo colega cuando se manifestaron en Dar es Salaam el 10 de septiembre, contra la más reciente violencia policial.
Desde luego, la reputación de Tanzania como un país pacífico se está volviendo cada vez más cuestionable con estos reciente acontecimientos.