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La «flagrante dictadura criminal» en la región minera carbonífera de Ucrania

Categorías: Europa Central y del Este, Ucrania, Activismo digital, Ambiente, Derecho, Desarrollo, Economía y negocios, Gobernabilidad, Medios ciudadanos, Protesta

Stanislav Kmet (usuario frankensstein de LiveJournal), bloguero que vive en Donetsk [1], visitó Severnyi, aldea minera carbonífera venida a menos en el este de Ucrania, después que un grupo de habitantes de la zona le escribieran para pedirle que los ayudara a llamar la atención sobre la minería ilegal que amenaza con echar a perder sus casas. El 10 y 11 de enero de 2013, Kmet publicó en su blog un informe con fotos de su viaje: parte 1 [2] y parte 2 [3] [ru] (unas 70 fotos y dos videos), que se sumaba a la ya extensa colección de artículos sobre la historia y problemas contemporáneos de Donbas [4], la región donde se lleva a cabo la mayor parte de la producción de carbón de Ucrania.

Según Kmet, si no fuera porque la moneda ucraniana y el pasaporte ucraniano se siguen usando en Severnyi, sería difícil decir que esta aldea es parte del estado ucraniano: un «enclave» – uno de muchos en Donbas – donde «ni la Constitución ni las leyes tienen verdadero poder».

Este es el resumen de Kmet de la situación:

[…] Como suele ocurrir con las aldeas mineras carboníferas, Severnyi […] empezó a morir con la mina local. En 2000, la mina Severnaya fue declarada improductiva, y pronto la extracción de carbón casi se detuvo. Actualmente, la minería solamente tiene lugar en numerosas [minas ilegales conocidas como kopankas], cuyos propietarios tienen todo el poder en la aldea. La población local está privada de sus derechos, los funcionarios que deben aplicar la ley descuidan sus deberes, las autoridades locales se quedan calladas y hacen como si nada pasara. Los empresarios del carbón sin ninguna vergüenza toman tierras que son ricas en carbón, excavan en bosques cercanos y arruinan las casas de la gente. He estado en muchos rincones de Donbas, pero no he visto una dictadura tan flagrantemente criminal en ninguna parte antes.

[…]

Ubicada entre los pueblos de Snezhnoye y Torez [5] [en], la aldea de Severnyi no es un buen lugar para vivir – casi no hay trabajo ahí, y llegar a los pueblos cercanos usando la destrozada carretera es difícil y toma demasiado tiempo. Los inmuebles valen casi nada, la población se ha reducido de 17,000 personas (a comienzos de los años 90) a 10,000 (en 2012). […]

Casas sin terminar, en ruinas y vacías, caminos de tierra intransitables: las fotos y las palabras de Kmet hacen un buen trabajo para transmitir la «atmósfera sin esperanza» de Severnyi. Escribe:

[…] Hasta los edificios deshabitados en Severnyi tienen la marca de la decadencia y la muerte. Mientras caminas por las calles, todo lo que hay alrededor está de alguna manera vivo a medias, inclinado, descuidado. Parece como si estas casas no estuvieran habitadas por personas sino por momias andantes, por lo desgastadas y polvorientas que están sus viviendas. […]

Parece que todo aquel que pueda hacer algo ya se hubiera ido de la aldea.

[…]

Estoy seguro de que [el cineasta Andrei Tarkovsky [6], que dirigió La zona (Stalker) [7] en 1979,] hubera adorado este lugar. […]

Las minas ilegales de carbón están por todas partes, escribe Kmet:

[…] Todo se hace absolutamente de manera abierta. Ni las autoridades, ni quienes aplican la ley reaccionan. El saqueo de las entrañas de la tierra sigue como si el estado no existiera, y todos están extrayendo carbón donde quiera que sienten que es correcto.

Encontramos numerosos «agujeros» con recursos agotados, abandonados. Cuando una kopanka agota sus recursos, simplemente deben ir y excavar una nueva. […]

Parte de esta minería ilegal ocurre justo debajo de las casas de la gente – y este es el problema que llevó a Kmet y sus colegas a Severnyi.

Los habitantes de las calles afectadas muestran a Kmet dos kopankas ubicadas peligrosamente cerca de de sus casas, así como la calle Kozlov, cuyos habitantes se vieron obligados a irse a otra parte después de que sus casas se vieron dañadas como resultado de la minería ilegal:

[…] Saben que el carbón yace debajo de sus patios. Si empiezan a escarbar ahí, sus casas van a derrumbarse debido al hundimiento de tierras. […]

Los intentos de los habitantes del lugar para resistirse a la minería ilegal no tienen resultados: las autoridades siguen sin reaccionar adecuadamente a los reclamos presentados oficialmente, y además hay señales de que realmente están colaborando con los mineros ilegales (por ejemplo, les dan acceso a electricidad).

Cuando una de las mujeres de lugar confrontó personalmente a los mineros ilegales, recibió una amenaza de muerte como respuesta. Kmet cita su historia (que también fue registrada en video [8] [ru]):

[…] Al comienzo, solamente queríamos llegar a un acuerdo […]. Cuando los bandidos llegaron, fui donde ellos y les dije: «Oigan, no se les permite excavar acá». Entonces uno de ellos me dijo: «Señora, usted está cansada de vivir, ¿no es así? Porque podemos [arrojar dos botellas explosivas] en la noche – ¡y todo va a estar bien!» Entonces, por supuesto que decidí quedarme con la boca callada. […]

Kmet escribe que los habitantes del lugar solamente pueden tener la esperanza de que los medios intervengan.

El otro video incluía este informe con fotos de un hombre trabajando en una de las ilegales kopankas. Kmet escribe que este video será parte del documental sobre Severnyi en el que está trabajando y que pronto pondrá en línea: