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Líbano: La propuesta electoral que divide a la opinión pública

Categorías: Medio Oriente y Norte de África, Líbano, Derecho, Elecciones, Medios ciudadanos, Política

2013 es año de elecciones parlamentarias en el Líbano, y eso significa que de nuevo, los debates sobre la ley electoral son noticia de primera plana en un país marcado por el sectarismo institucionalizado.

El contexto local puede ser difícil de entender: Los miembros del Parlamento se eligen en cada distrito por sufragio universal, pero los escaños se distribuyen entre las distintas comunidades religiosas. Los cristianos tienen el 50% de los escaños, y la otra mitad se adjudica a los musulmanes. En teoría, esto pretende minimizar las discordias entre las 18 confesiones religiosas presentes en el país y asegurar una adecuada representación de todas las comunidades. En la práctica, los miembros de las comunidades sin representación acusan al sistema de estar manipulado.

En el intenso esfuerzo por una justa aplicación de la democracia, un borrador de ley denominado «ley electoral de reunión ortodoxa» ha sido un tema reciente de controversia. Sugiere que en lugar de dividir Líbano en distritos electorales, todos los ciudadanos del país voten como miembros de un solo distrito, y cada comunidad elija sus propios diputados. Esto significa que la gente solo podrá votar candidatos de su propia doctrina. Pueden leer el texto completo aquí [1] [ar]. Aunque hay gente que apoya la propuesta, argumentando que permitirá una representación adecuada de todas las comunidades cristianas, otros la rechazan; además, la ley podría tener resultados inesperados, según algunos comentaristas de la red.

@Paul_Salem [2] ha expresado [3] [en] el temor de que una ley así no consiga más que exacerbar las divisiones sectarias del país:

@Paul_Salem [2]: La llamada ley electoral #orthodox [4] (ortodoxa) que se ha propuesto sugiere que cada comunidad religiosa elija sus propios diputados; será un considerable «salto hacia atrás».

En «A Separate State of Mind», el bloguero Elie Fares afirma [5] [en] que rechaza firmemente los argumentos sectarios:

Creo que lo que dice la Ley de ortodoxia es inaceptable. Pero somos una minoría de cristianos los que pensamos así. La mayoría de maronitas y cristianos, sobre todo algunos de nuestros políticos que también ejercen de salvadores de los cristianos, quieren hacernos creer que lo que yo creo no es cierto. Nos dicen que su forma de hacer las cosas es la única manera de conseguir nuestros derechos. Quieren que creamos que si los cristianos no elegimos a todos y cada uno de los candidatos cristianos designados, están siendo perseguidos.

La Ley de ortodoxia no es la forma de recuperar nuestros «derechos». Recuperamos nuestros derechos votando a gente que luche por esos derechos sin convertirlos en propaganda mediática en cuanto inicie su campaña electoral de 2013. Y déjenme decirles que esos derechos no tienen nada que ver con que los cristianos libaneses sean los únicos que elijan la mitad de su parlamento.

Tampoco parece tener importancia que, como siempre, la ley electoral libanesa margine a los muchos que simplemente no se identifican con ninguna comunidad religiosa reconocida. @LeNajib [6] se pregunta [7] [en]:

@LeNajib [6]: Si eres ateo o agnóstico, ¿a quién le votas con la ley de ortodoxia? #JustAsking [8]

Por otro lado, hay quien argumenta que la propuesta de ley está justificada. @maidenrose1 [9]tuitea [10] [en]:

@maidenrose1 [9]: La Ley de ortodoxia electoral es similar a Robin Hood: a veces hay que hacer cosas Malas por Buenas razones #LebanonSectarianSystem [11] #TaefAgreement [12]

Lo interesante es que, según algunos, esta podría ser una oportunidad para los liberales. Elias Muhanna explica [13] [en] en su blog Qifa Nabki que si se implementa, la ley podría tener efectos inesperados. La propuesta (que él llama Ley OMG) podría, de alguna manera, ayudar a desmantelar el sectarismo, al movilizar a muchos ciudadanos frustrados por el sistema sectario del país. Añade que si se aprobase la ley (aunque no cree que esto suceda), podría poner los cimientos de un senado, y también abriría las puertas a la elección de liberales:

Con la ley OMG, no podrá esconderse el hecho de que la «democracia consociativa» se ha convertido en nada más que una constelación de comunidades sectarias que coexisten con alianzas incómodas y sospechosas. El mito de la armonía interconfesional saltará en pedazos.

(…) Creo que vale la pena anotar que un parlamento libanés elegido sobre la base de la ley de ortodoxia no es más que un senado, al menos así lo percibe la mayoría de gente que se ha molestado en pensarlo.

(…) Parecerá que crea oportunidades sin precedentes para que sean elegidos los candidatos proclives a la reforma. Al implementar una representación proporcional en un solo distrito nacional, la ley reduce drásticamente las barreras de entrada a los candidatos ajenos a los partidos políticos mayoritarios.

Con una perspectiva similar, el bloguero Karl Sharro expone [14] [en] cuatro consecuencias involuntarias de la ley:

1- Si se adopta la propuesta de ortodoxia, será la primera vez que los seglares tendrán la posibilidad de unir sus votos en el ámbito nacional, aunque en agrupamientos sectarios. (…)
2- La movilización sectaria se debilitará si no hay amenazas de otros votantes «distorsionando» el proceso. (…)
3- Paradójicamente, las credenciales sectarias se harán menos importantes que la competencia y la credibilidad política. (…)
4- Los zo’ama (líderes) locales acabarán por perder su poder. (…)

En Beirut Spring, Mustapha añade [15] [en]:

Si la ley de ortodoxia electoral entra en vigor y los miedos existenciales de los cristianos se reducen, ¿qué excusa utilizará la gente para evitar que las mujeres libanesas puedan transmitir a sus hijos la nacionalidad libanesa, para tratar a los refugiados palestinos con dignidad o ya que estamos, para tener un censo demográfico decente en el país para asignar correctamente los fondos de desarrollo?

La cuestión es: ¿deberíamos perder el respeto a los liberales que decidan apoyar esta ley por la razón mencionada? ¿Debemos admirar el hecho de que por fin piensen de forma táctica? ¿O preferimos que languidezcan en un infierno altruista en vez de respaldar una ley de moralidad tan cuestionable?

La propuesta se ha promovido en la red y en televisión con este vídeo [16] [ar] en el que gente de distintas doctrinas cristianas manifiestan su religión y después expresan su preocupación por el hecho de que no se sienten representados en el parlamento con la actual ley electoral.

En los días siguientes al estreno del anuncio en televisión aparecieron ocurrentes parodias en Internet, con gente declarando marcas de identidad aleatorias, como su grupo sanguíneo o ser hipster. No se pierdan el vídeo en YouTube [17] [ar] de Ali Zakaret o los que ha colgado Karl ReMark en su blog [18] [ar].