- Global Voices en Español - https://es.globalvoices.org -

República Centroafricana: ¿Cuán fuerte es el acuerdo de paz?

Categorías: África Subsahariana, República Centroafricana, Guerra y conflicto, Medios ciudadanos, Relaciones internacionales

Este post es parte de nuestra cobertura especial Relaciones Internacionales y Seguridad [1].

[2]

Rebeldes al norte de la República Centroafricana, de hdptcar en Flickr (CC BY-SA 2.0)

El 11 de enero de 2013, el gobierno de la República Centroafricana (RC), encabezado por el presidente François Bozizé, y la coalición rebelde Séléka firmaron un nuevo acuerdo de paz [3] [en]. El acuerdo se produce después de un mes de inestabilidad política [4] y militar que vio el avance de los rebeldes [5] [fr] sobre la capital, Bangui, en un intento de derrocar a Bozizé durante un avance militar. Se espera que el acuerdo de paz se traducirá en el nombramiento de un nuevo primer ministro y la formación de un gobierno de unidad nacional. Según Centrafrique Presse Info, se espera que el presidente Bozizé respete la decisión de nombrar a Nicolas Tiangaye [6] [fr], un abogado y ex presidente de la  Liga Centroafricana de Derechos Humanos [7] [fr], como nuevo primer ministro del país.

Preguntas sobre los simpatizantes de Séléka

Pese a los intentos de los rebeldes para tomar el control de una importante región de la República Centroafricana, poco se sabe acerca de Séléka y sus socios de la coalición. L’Observateur [8] [fr], por ejemplo, plantea las siguientes preguntas:

Qui est cette rébellion? D’où sort-elle? De qui reçoit-elle les financements? Autant de questions dont les réponses ne sont pas faciles.

Pour certains analystes, comme Thierry Vircoulon, chercheur à l’International Crisis Group (ICG), les insurgés centrafricains bénéficient d’une logistique importante et sans doute des soutiens politiques au Tchad. (…)

Ce pays est depuis une dizaine d’années le protecteur de la Centrafrique. La libération des geôles de N’Djamena dans les mois passés de plusieurs opposants aujourd’hui dans les rangs du Séléka étaye notamment les soupçons. Tout comme la passivité montrée ces derniers jours par la force d’interposition tchadienne dépêchée à Sibut, un verrou à une centaine de kilomètres de Bangui.

¿Quién está detrás de esta rebelión? ¿De dónde viene? ¿De dónde obtiene su dinero?

Para algunos analistas, como Thierry Vircoulon, investigador del International Crisis Group (ICG), los insurgentes de África Central disfrutan de una logística significativa y probablemente el apoyo político de Chad. (…)

Este país ha sido durante los últimos diez años, el protector de África Central . La liberación de las cárceles de N'Djamena en los últimos meses, de varios oponentes hoy en las filas de Séléka apoya tal sospecha. Además de la pasividad mostrada en los últimos días por la fuerza de interposición que Chad envió a Sibut, una barrera situada a cien kilómetros de Bangui

Un cable Wikileaks [9] [en] de la embajada de EE.UU. en Bangui de 2009 confirma las sospechas de la participación de Chad en el apoyo a los rebeldes. Sin embargo, Séléka siempre ha negado el apoyo de una potencia extranjera, una postura que reiteró en fecha tan reciente [10] [fr] como el 1 de enero. Estas declaraciones, sin embargo, no han detenido al Presidente Bozizé de acusar a la coalición de ser manipulados por actores foráneos [11].

Movilización africana

La reanudación de la violencia provocó una reunión de estados africanos para redistribuir efectivos en apoyo de MICOPAX [12] [fr], la operación de mantenimiento de la paz en la RC conducida por la Comunidad Económica de los Estados del África Central. El 6 de enero Sudáfrica anunció que también estaban enviando 400 soldados [13] [en] a la República Centroafricana, una decisión que fue criticada [14] [fr] por la oposición del país. La decisión de Pretoria refleja sin embargo que Sudáfrica tiene una historia de proporcionar militares para apoyar a la RC. En 2006, por ejemplo, la US Embajada de EE.UU. en Pretoria [15] [en] reveló que Sudáfrica había acordado proporcionar entrenamiento militar y asistencia a la RC sobre la base de que la estabilidad en esta región es importante para los intereses más amplios del país.

Sin embargo, en un artículo de opinión [16] [fr], publicado en Le Nouvel Obs Plus, Florence Gabay, Vicepresidente del Instituto Robert Schuman para Europa, sugiere que dicha movilización constituye un punto de inflexión para la resolución de conflictos en esta parte de África:

Il est intéressant de noter que la force apaisante est ici une force économique, la CEEAC. C’est un fait lourd de sens : Benjamin Constant décrivit fameusement comment le commerce tendait de plus en plus à se substituer aux conflits armés. L’Afrique en montre des signes clairs : on ne fait pas la paix d’abord au nom d’abstractions, au nom d’idéaux, si nobles soient-ils, mais on la fait au nom d’intérêts économiques.

Es interesante notar que la fuerza calmante aquí es una fuerza económica, la CEEAC (Comunidad Económica de los Estados del África Central, o ECCAS, por sus siglas en inglés). Es un hecho lleno de significado: Benjamin Constant célebremente describió cómo el comercio tiende cada vez más a sustituir a los conflictos armados. África está dando señales claras de que: La paz no se lleva a cabo por primera vez en el nombre de abstracciones, en nombre de los ideales, por nobles que sean, sino que se hace en nombre de los intereses económicos

¿Terreno sólido para una paz sustentable?

Sin embargo, algunos de los observadores ponen en duda la capacidad de este nuevo acuerdo de traer una paz duradera a la RC. Survie, una Organización No Gubernamental (ONG) francesa que critica el ‘sistema francoafricano’ publicó un artículo que afirmaba que la RC sigue siendo «una enfermedad terminal [17]» [fr]. Su autor, Raphaël de Benito, argumenta que las condiciones para la próxima crisis están maduras:

L’accord qui en a découlé ne satisfait personne : Bozizé allant jusqu’au bout de son mandat en 2016, flanqué d’un premier ministre de l’opposition civile tandis que la coalition Séléka rentre bredouille au grand dam de ses chefs militaires qui contrôlent la majeure partie du pays.

Este acuerdo no satisface a nadie: Bozizé permanecerá en el poder hasta el final de su mandato, con un primer ministro de la oposición civil, mientras que el Séléka regresa con las manos vacías, para disgusto de sus jefes militares, que controlan la mayor parte del país.

ISN logo [18]Este post y sus traducciones al español, árabe y francés han sido comisionados por la International Security Network (ISN) como parte de una alianza para localizar voces ciudadanas de todo el mundo en temas de relaciones internacionales y seguridad. Este post fue publicado primero [19] [en] en el ISN blog [18] [en], vea historias similares aquí [20] [en].