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Por qué la foto del «soldado de la muerte» en Mali se convirtió en viral

Categorías: África Subsahariana, Europa Occidental, Francia, Mali, Fotografía, Guerra y conflicto, Medios ciudadanos, Periodismo y medios, Relaciones internacionales

Esta es la foto que recorrió el mundo desde el comienzo de la operación Serval en Mali:

 le militaire en opération au Mali porte un foulard avec un imprimé tête de mort [1]

Militar francés en Mali con un pañuelo y una cabeza impresa de un muerto – a través de odieux connard – dominio público.

En efecto, esta foto de un militar francés que tiene un pañuelo con la cabeza impresa de un muerto se ha compartido por todo el mundo, como símbolo del inicio de las operaciones militares francesas en Mali. Pero, ¿por qué este militar ha impresionado tanto la imaginación de los cibernautas?

Motivos de la controversia

En un contexto compartido entre los saludos agradecidos de una mayoría de la población maliense y de acusaciones de intervención neocolonialista, la operación Serval se desarrolla con doble objetivo: protección de la población civil y recuperación de las ciudades bajo control de los grupos jihadistas. De esa manera, los riesgos son grandes para el ejército francés en términos de estrategia de comunicación. Pero, ¿realmente tiene razón de ser una controversia sobre un pañuelo cuando un conflicto armado que generará numerosas víctimas está en curso? Es lo que destaca el autor del Odieux Connard en su post «El pañuelo de guerra» [2] [fr]:

Aussi, l’indignation a fait son chemin, et l’un après l’autre, de courageux militants du web se sont sentis dans l’obligation de hurler au scandale et de demander à l’état-major de réagir pour que soit sanctionné l’individu dont le choix d’imprimé sur le foulard le faisait ressembler à « Ghost », personnage portant un passe-montagne à l’imprimé proche et tiré du jeu vidéo « ultra violent » Call of Duty. [..] Heureusement, nombreux ont été celles et ceux à tenter de désamorcer la polémique en affirmant que le militaire ne faisait que « se protéger du sable », ce qui est un argumentaire pertinent, tant en fait qu’il le porte pour se protéger sur sable, du soleil ou même fumer la pipe ne change pas grand chose, le vrai problème étant que visiblement, il y a des gens à qui on a pas dû bien expliquer en quoi consistait la guerre.

También, la indignación se abrió paso, y uno después de otro, los valerosos militantes de la web se sintieron en la obligación de gritar por el escándalo y de pedir al estado mayor que reaccionara para que se sancione al individuo cuya elección de imprimir sobre el pañuelo lo hacía parecer a «Ghost», el personaje con un pasamontañas tiene el impreso parecido a un juego de video «ultra violento», Call of Duty. […] Felizmente, fueron muchos los que trataron de neutralizar la polémica y que afirmaron que el militar solamente «se protegía de la arena», lo que es una argumentación pertinente, tanto por el hecho de que si lo lleva para protegerse de la arena, del sol o por rabia, no cambia gran cosa, el verdadero problema era que, visiblemente, hay gente a la que se ha debido explicar en qué consistía la guerra.

Una estampa exacerbada

Ese enfoque exacerbado sobre la imagen que podría proyectar la intervención también inquieta a Electrosphère, que escribe [3] [fr]:

Cette image devint vite du pain béni pour une bienpensance de tout poil qui, étrangement, ne trouva rien à redire sur l'arme porté par ce soldat ou sur ses activités quotidiennes. Il est donc utile de rappeler certaines réalités du métier de légionnaire et de la guerre aux moralisateurs 2.0 (et autres bienpensants sous Windows/Android/iOS) qui « veulent en savoir plus mais pas trop », et ce, peu importe que l'on approuve, désapprouve ou questionne l'intervention française au Mali contre les milices djihadistes. On peut sincèrement s'interroger sur les fondements d'une polémique visant un foulard qui susciterait tout au plus de l'indifférence, de l'hilarité, des sarcasmes ou de l'admiration dans la cour d'un lycée à Paris ou lors d'un vernissage à Lyon. Je suis d'autant plus frappé que la hiérarchie militaire (dans des bureaux feutrés et chauffés/climatisés à Paris) veut infliger des sanctions à ce soldat

Esta imagen se convirtió rápidamente en pan bendito para los políticamente correctos de toda clase que, extrañamente, no encuentra nada que decir sobre el arma que tiene este soldado o sobre sus actividades cotidianas. Es útil recordar algunas realidades del trabajo de legionario y de la guerra a los moralizadores 2.0 (y otros usuarios de computadoras en Windows/Android/iOS) que «quieren saber más pero no demasiado», sin importar que se apruebe, se desapruebe o se cuestione la intervención francesa en Mali contra las milicias jihadistas. Uno realmente se pregunta sobre los fundamentos de una polémica ante un pañuelo que suscitaría más que nada indiferencia, risa, sarcasmo o admiración en el patio de un colegio de París o en una inauguración en Lyon. Yo estoy francamente sorprendido de que la jerarquía militar (en sus oficinas alfombradas y calentadas/climatizadas en París) quiera aplicar sanciones a ese soldado.

A Aurélien Legrand le gustaría que la gente se cuidara de reaccionar [4] [fr] ante la más mínima alegoría al mal gusto que podría aparecer en la web:

Ce qui me dépite le plus, c’est l’épidermisme réactionnel, les torrents de bonnes pensées déversés aussi sec sur le Net avec une élaboration qui aurait bénéficié d’un peu de maturation. [..] Notre environnement culturel ne nous aide pas. Lors de la prise d’otages d’In Amenas, il fut lâché sur les chaines d’informations des vidéos prises au téléphone portable, et ce en un temps record. Images désertiques, corps abattus.. [..] On veut de l’info, on veut que ça claque, mais pas trop quand même.

Lo que más me molesta es el epidermismo reaccional, los torrentes de buenos pensamientos vertidos así tan bruscamente en la web con una elaboración que se hubiera beneficiado de un poco de maduración. [..] Nuestro ambiente cultural no nos ayuda. Cuando se tomaron rehenes en In Amenas, se soltó en las cadenas informativas videos grabados con teléfonos portátiles, y todo en tiempo récord. Imágenes desérticas, cuerpos abatidos. […] Se quiere información, se quiere que reviente, pero tampoco tanto.

Por desgracia, el conflicto en Mali parece que tiene para largo. Será interesante ver si la dialéctica sobre los acontecimientos superará los debates sobre los cuidados en la ropa de los combatientes e versará hacia lo que está en juego y las consecuencias para las poblaciones locales.

Anna Gueye [5] [fr] colaboró en este post con las fuentes de los artículos citados.