Esther Mankge de 49 años y madre de cuatro hijos, fue filmada rogando por misericordia mientras dos supuestos encargados de una tienda local en Limpopo, Sudáfrica, la golpeaban con cinturones, una escoba y un martillo de caucho después de haberla acusado de robar en la tienda, informó [1] la Comisión de Derechos Humanos de Sudáfrica.
Mankge describió [2] el hecho como un ataque brutal y que además, fue injustamente acusada de dicho crimen:
I hadn’t bought anything but a woman accused me of stealing panties and hit me in the face. I cried and asked them to call the cops if I had stolen something.
No había comprado nada cuando una mujer me acusó de robar ropa interior y me golpeó en la cara. Lloré y les pedí que llamaran a la policía si había robado algo.
En un comunicado [3] de la semana pasada, Isaac Mangena de la Comisión dijo:
It was very shocking to see such ruthlessness knitted out to a human being, and a woman for that matter. Indeed we are seeing this dark trend in our community whereby women and the elderly are being abused, are being kicked and all those kinds of things.
Fue muy impactante ver semejante crueldad infligida a un ser humano y principalmente a una mujer. Por supuesto que estamos investigando esta oscura tendencia en nuestra comunidad en donde a las mujeres y personas mayores se les está abusando, se les patea y todo eso tipo de cosas.
Abajo se aprecia un vídeo que subió el Daily Sun a YouTube mostrando a los encargados golpeando a Mankge:
[4]El vídeo ha provocado indignación a nivel nacional. La Liga de Mujeres del Congreso Nacional de África del Sur (ANCWL, por sus siglas en inglés) lanzó un llamado [5] para boicotear las sucursales regionales de la tienda. La secretaria provincial de la ANCWL, Maleke Mokganyetji declaró:
We are calling on progressive women and men to protest against all regional branches of the store during any time of the day. Our message to the store is, ‘You strike a woman, you strike the rock’.
Estamos apelando a mujeres y hombres progresistas para que protesten en contra de todas las sucursales regionales de la tienda durante algún momento del día. Nuestro mensaje para la tienda es: «Si golpeas a una mujer, golpeas a la roca».
Nhluvuko Masocha Shabangu comentó en el Facebook [6] de eNCAnews:
Point of correction. It didn't go viral [because] other people's pain entertains us but it went viral because awareness had to be raised about the brutality that takes place behind security doors, that these animals who call themselves humans in their attack lack the mercy to even consider that this is an elderly woman. They just beat her like a dog. Sies! The only person who finds this act amusing is that bish behind the camera. Ntli!
Tengo una corrección: el vídeo no se hizo viral porque la gente se entretenga con el dolor ajeno sino porque se tenía que alertar acerca de la brutalidad que sucede detrás de las puertas de seguridad, que estos animales que se hacen llamar humanos, atacan sin piedad a una mujer mayor. Simplemente la golpean como a un perro. La única persona que encuentra este acto divertido es la desgraciada tras la cámara. ¡Es horrible!
Sin embargo, la indignación no se limitó a Sudáfrica:
El bloguero nigeriano Musibau Lyabo lamentó [7] el hecho en BekkyBlog.com:
There are times when we think Africa is really shifting from its backward mentality, then things like this makes one think otherwise. Why do people resort to jungle justice in this time and age? Do they feel the government and laws put in place are not adequate enough?
Hay ocasiones en los que pensamos que África está cambiando su mentalidad retrógrada, pero cuando ocurren cosas como ésta, entonces pensamos que no. ¿Por qué la gente echa mano de la ley de la selva en esta época? ¿Acaso sienten que el gobierno y las leyes no son suficientes?
La versión en inglés de este artículo fue revisada por Georgi McCarthy.