La revista en línea Commentary [en] y muchas otras han estado tratando sobre la decisión del gobierno polaco de prohibir matanzas rituales de animales, de acuerdo con prácticas humanitarias, por las que muchos países de la Unión Europea se han estado inclinando recientemente. Sin embargo, para Polonia, esta decisión es controvertida, a la luz de su historia y significado para la comunidad judía en el país y en todo el mundo:

La noticia de que el Sejm, el Parlamento polaco, ha rechazado un proyecto del gobierno para proteger la matanza ritual, en sus variantes judía y musulmana, sugiere que, tristemente, judíos y polacos enfrentan direcciones opuestas cuando se trata de libertad religiosa. Como resultado de esta votación, que le pisa los talones a una decisión del año pasado de la Corte Suprema que establece que la matanza ritual, o shechita, ya no está exonerada del requerimiento de atontar a los animales antes de matarlos, la producción de carne kosher ha quedado efectivamente prohibida en Polonia.

[…] Polonia no es el primer país en prohibir la shechita – estados europeos desde Noruega a Suiza también han prohibido esta práctica –pero su posición histórica como la cuna del Holocausto significa que la atención extra de toda medida legal contra los rituales judíos es inevitable.