Uno de los pilares de la política rusa durante los últimos diez años ha sido que los negocios de los rusos se mantienen al margen de la política. A inicios de mes, treinta y siete empresarios de la industria de Internet intentaron terminar con ese tabú, al firmar un «contrato social público respaldando [ru] a Alexey Navalny como candidato a alcalde en Moscú.
Algunas voces en la blogosfera y en los medios independientes han respondido a la “Carta de los 37” [ru] exclamando que Rusia está experimentando un momento crucial en la conciencia política de su clase ejecutiva. La analista Tatiana Stanovaya llamó [ru] al contrato “la primer reclamación vocal de los empresarios en una posición activamente política.” Los periodistas de Vedomosti dijeron que el documento sienta un nuevo precedente [ru] para los negocios que nunca antes se habían arriesgado apoyando abiertamente a la oposición política. El blogero Oleg Kozyrev felicitó [ru] a Navalny por el primer contrato social de Rusia que cumple los “Niveles Occidentales,» y el guru del Internet ruso Anton Nosik brilló orgulloso [ru] cuando sus colegas se pronunciaron al fin, en vez de mirar a los varios clanes del Kremlin para el mecenazgo y la protección.
La «Carta de los treinta y siete» también tiene fallos, por supuesto. Mientras el compromiso del apoyo empresarial es indudablemente simbólico, eso es, hasta la fecha, donde el pacto empieza y termina. El director de campaña de Navalny, Leonid Volkov, admitió [ru] el siete de agosto de 2013, que aún no han recibido una sola donación de ninguna empresa.
Algunos medios de noticias de tendencia liberal como Slon.ru y Novaya Gazeta han empezado a publicar material acerca de ciertos miembros de “los 37” (incluyendo perfiles y entrevistas [ru]), y críticos online de Navalny como Maxim Kononenko y el grupo de blogs vvv-ig han revelado detalladas miradas a los signatarios del contrato. Kononenko, impugnando la reclamación del contrato que representa gente de negocios de “la economía del conocimiento,” ofreció breves resúmenes [ru] de 30 de las empresas de la lista, concluyendo que 27 no añadían nada a la propiedad intelectual de Rusia. La publicación [ru] de Vvv-ig del 7 de agosto, por otro lado, contiene ataques virulentos contra cada uno de los empresarios que apoyaron a Navalny. Si el intento de Kononenko era extender la relevancia social de las compañías del contrato, vvv-ig pretenden manchar el nombre de los particulares que crearon esas empresas.
Los largos textos empapados de antisemitismo y homofobia de Vvv-ig’s —es de diversas maneras el típico ejemplo de blog de odio dirigido a menudo a figuras de la oposición como Navalny. Escondido a lo largo de la publicación y articulado en su conclusión, sin embargo, hay una provocadora teoría (de conspiración) acerca de qué reúne a los 37 empresarios de Internet aparentemente aleatorios. Según vvv-ig, los signatarios del contrato social de Navalny deben su pellejo a los mismos especuladores. Vvv-ig señalan a Anatoly Chubais, (jefe de la Corporación Nanotecnológica de Rusia) como el culpable aquí (responsable de “chupar la sangre de la economía de Rusia”), pero la publicación también incrimina en otras partes a Renaissance Capital y Mail.ru.
Mientras que las acusaciones contra Chubais parecen ser especulaciones locas, la premisa básica de la idea (que subyacen intereses financieros más grandes detrás de los «partidarios independientes» de Navalny) recibió apoyo adicional del «amigo-enemigo» político de Navalny, Vladimir Milov, el cual en un mensaje de Twitter reconoció el mérito de la inversión del magnate Mikhail Fridman [en] organizando el contrato:
Fridman les telefoneó y dijo que Alfa dejaría de conceder créditos para sus compañías si no firmaban , eso fue el ocho de agosto de 2013
Fridman les telefoneó y dijo que Alfa dejaría de conceder créditos para sus compañías si no firmaban, eso fue todo
Mientras que no hay pruebas concluyentes [ru] de que las empresas partidarias de la “Lista de los 37” de Navalny cuenten con el Grupo Alpha para financiarse, vale la pena recordar que algunos empresarios de Internet rechazaron la llamada de Navalny. Según Kamil Kurmakaev (uno de los signatarios), algunos rechazaron unirse a la lista por falta de interés en la política, algunos porque apoyan al rival de Navalny, Sergey Sobyanin, y otros porque temían consecuencias negativas.
El contrato en sí mismo es resultado directo de los esfuerzos de presión de Navalny el veinticuatro de julio de 2013, cuando su campaña se encontró con un número no especificado [ru] de “empresarios de Internet,” para presentarles la idea de “participar en la recolección de fondos.” Al día siguiente, aproximadamente dos semanas antes de la presentación del contrato social, Dmitri Navosha publicó una larga nota [ru] en Facebook, indicando su participación en el encuentro con Navalny, y explicando su decisión de donar la mitad de su salario a la campaña de Navalny. Mientras que no hay registro de las compañías que tuvieron representación en el encuentro del veinticuatro de julio, exactamente 300 usuarios de Facebook marcaron “me gusta” en el post de Navosha, entre los que se encuentran otros seis nombres de la “Lista de los 37”: Zotova, Kurmakaev, Lysenko, Preobrazhensky, Saltanov y Sharipova. Entre los 297 usuarios de Facebook restantes hay particulares vinculados a otras varias compañías de la RuNet, incluyendo WeClever, Ozon.ru, LookAtMe.ru, Yandex, thelocals.ru, begun.ru, re-construktion.ru, etcétera.
¿Eran estas empresas demasiado desinteresadas, demasiado insolidarias, o demasiado temerosas de prestar sus nombres a Navalny? Milov destacó [en] a una persona, después de observar que no todos aceptaban la supuesta manipulación de la “Lista de los 37” del Grupo Alpha: Ekaterina Skorobogatova, Directora de Crecimiento de Facebook en Rusia y el CIS [ru]. Al parecer a Skorobogatova, también “le gusta” el post de Navosha acerca de reunirse con Navalny. Si ella asistiera, ¿quizás no encontraría tan agradables las maquinaciones políticas del Grupo Alpha?.