Cuando Alexey Navalny decidió competir por la alcaldía de Moscú probablemente esperaba aprender bastante sobre sus enemigos, es decir, los jefes y los subordinados del Kremlin. A decir verdad, esto sucedió. Poco a poco, Navalny fue publicando en su blog [ru] información comprometedora para el actual alcalde de Moscú, Sergei Sobyanin, que posee una serie de apartamentos de lujo que, sospechosamente, estaban a nombre de su hija. Más recientemente, la campaña de Navalny ha exagerado [ru] la poca atención de Vladimir Putin a los detalles administrativos, que requerían que el presidente diera un permiso escrito para la candidatura de Sobyanin después de que dimitiese (más tarde el Kremlin ofreció un sustituto de forma un tanto chapucera [ru]).
Sin embargo, Navalny no se paró a pensar que él también podría aprender algo comprometedor sobre su propia persona. Esto sucedió hace algunos días, cuando se filtró información que mostraba a Navalny como el propietario de una agencia inmobiliaria en Montenegro. Dicha empresa fue registrada en 2007 y Navalny no declaró su existencia al presentar su candidatura para la alcaldía de Moscú. Por su parte, el sitio web «FLB» (Free Lance Bureau [ru], organización rusa que se encarga de publicar investigaciones) se encargó de sacar a la luz dicha información, aunque fue el bloguero Stanislav Apetyan del LiveJournal el verdadero encargado de crear el caos mediático que prosiguió.
Apetyan saltó a la fama a finales de 2011 cuando publicó en su blog un análisis detallado [ru] de los archivos del correo [en] electrónico de Navalny que el fantasma de la RuNet (apodado «Hacker Hell«) había robado y publicado ese mismo año. Asimismo, en julio de 2012, Apetyan respondió a los ataques que Navalny efectuó contra Alexander Bastrykin, jefe del Comité de Investigaciones, por tener patrimonio en el extranjero, acusándole [ru] del mismo delito ya que, tras mostrar varios fragmentos de los correos electrónicos robados, se ponía de manifiesto su deseo de invertir 350.000 euros en la aventura empresarial para crear la agencia inmobiliaria en Montenegro.
De hecho, cuando el FLB publicó evidencias [ru] de que Navalny había fundado una sociedad limitada en la ciudad de Podgorica, Apetyan ya se había convertido en un experto de este tema.
En su primer artículo [ru] sobre el escándalo, Apetyan volvió a publicar fragmentos de los correos electrónicos robados que hacían referencia a los planes de Navalny para abrir una inmobiliaria y, también, enlazaba los materiales que el FLB había descubierto en Internet. El FLB encontró dicha información al buscar [en] el nombre de Navalny en OpenCorporates.com (una base de datos abierta sobre el mundo empresarial) que incluía información de la página web oficial del gobierno de Montenegro en relación con el Registro Central de Entidades Empresariales. En esta misma página web, Navalny aparece [sla] como el cofundador de «MRD Company», una empresa constructora que se fundó en noviembre de 2007 y que continúa su actividad al día de hoy. Curiosamente no aparece ninguna actividad financiera en las listas del registro de MRD (un detalle que Apetyan omitió).
Además, con la intención de captar interés, Apetyan tituló su publicación como «Deben eliminar la candidatura de Navalny porque tiene una empresa en Montenegro».
El equipo de Navalny respondió rápidamente debido al inminente peligro de tales acusaciones. El director de su campaña, Leonid Volkov, trabajó toda la noche, tuiteando [ru] de madrugada peticiones para conseguir ayuda experta en Joomla, el sistema de gestión de contenidos en el que está basada la web del Registro Central de Montenegro. Al día siguiente, Volkov publicó una larga respuesta [ru] a las acusaciones de Apetyan en la cual reclamaba que Navalny no poseía ninguna empresa con sede en Montenegro. Además, acusó a Apetyan y sus aliados de aprovecharse de los defectos en la codificación del Registro y de haber subido la información comprometedora sobre Navalny. Como prueba de ello, Volkov apuntó al hecho de que el Registro se encontraba fuera de servicio cuando estaba escribiendo; Apetyan, por su parte, más tarde le acusó de organizarlo todo y enlazó una página (aún activa) dentro del dominio del Registro que parecía haber sido hackeada para que apareciese un anuncio de Ray Ban.
Asimismo, Volkov también apuntó a OpenCorporates.com, destacando la presencia de hiperenlances al FSB y al Kremlin en la sección de «enlaces web relacionados» del MRD. Esto, según Volkov, era una clara evidencia de que las autoridades rusas habían perpetrado dicho acto, lo cual era evidente debido a un «trabajo torpe y vergonzoso».
Al mismo tiempo, OpenCorporates solo agrega información de empresas dentro de registros gubernamentales. Por su parte, la información que Volkov destacó como evidencia clara de una conspiración del gobierno fue presentada por usuarios anónimos en Internet, probablemente como una broma, después de que la historia llegara a las noticias. En respuesta a esto, Apetyan explicó [ru] que el gobierno de Montenegro había empezado a conectarse con agregadores de información como OpenCorporates muy recientemente, lo cual hizo posible que la información estuviese disponible a través de Google a principios de año. A esto se debe que únicamente ahora los investigadores sepan sobre la existencia de la inmobiliaria, ya que antes de poder verlo en Google, solo alguien que hubiera rebuscado entre los archivos del Registro podría haber descubierto información relacionada con la empresa de Navalny.
Dos días después de esta noticia y un día después de que Volkov presentase la acusación de que algunos hackers habrían creado la información incriminadora, la Administración Tributaria de Montenegro confirmó la existencia de MRD y el papel de Navalny como cofundador de la empresa, por lo que negaron cualquier tipo de intrusión en su página web. El informe oficial [ru] de las autoridades tributarias (promovido por el Artículo 28 de su Ley de Medios [en], la cual enfatiza bastante la corrección de errores en la prensa) afirmó que Navalny firmó los estatutos de la empresa entre otros papeles, y asimismo ofrecieron copias de su pasaporte. La prensa también publicó varios errores en el procedimiento de registro de la empresa; entre los que destaca, la ausencia de ciertos documentos que debían ser presentados en el Registro Central de Contribuyentes y la falta de cualquier tipo de declaración de impuestos o beneficios.
Visiblemente avergonzado, Volkov respondió [ru] algunas horas más tarde y ya no negaba la existencia de la agencia inmobiliaria; pero se mantuvo firme en el hecho de que Navalny desconocía por completo que dicha empresa se hubiese registrado. Según escribió Volkov, había una explicación «lógica» y esta se debía a que Navalny compartió y firmó una serie de documentos en 2007 cuando se decidía sobre la compra de terrenos en Montenegro sin conocer que tales documentos se usarían para registrar una hipotética empresa. Ávido por volver a la campaña por la alcaldía, Volkov concluyó su artículo con un eslogan: «¡Lo más importante es que esta es nuestra campaña electoral y nuestra victoria!»
Mientras que Apetyan propagó esta información con la idea de que el negocio en Montenegro podría poner en peligro la candidatura de Navalny, la mayor parte de los observadores dudaban que la opinión pública cambiase su posición y que esto le costase a Navalny la victoria en las elecciones del 8 de setiembre. De hecho, la mayoría cree que Sobyanin está protegiendo la candidatura de Navalny y este hecho se ha convertido en el mayor catalizador de teorías conspiratorias en lo que respecta a la salida de prisión de Navalny el mes pasado. Para tranquilizar la situación, la comisión electoral de Moscú acabó con todas las especulaciones con su comunicado de prensa [ru] del 22 de agosto donde declaraban que la agencia inmobiliaria de Navalny no violaba la ley electoral rusa [ru], ya que esta solo prohíbe a los candidatos que posean terrenos y cuentas bancarias en el extranjero. Como de costumbre, parece que la comisión electoral se equivoca en materia de la ley sobre activos en el extranjero, ley que el gobierno ya modificó el pasado mayo. Por tanto, aunque la primera versión de la ley no les permitía a los funcionarios poseer propiedades en el extranjero, la versión final sí lo permite [ru].
Dada la aparente consistencia de la candidatura de Navalny, es fácil pensar si los bloggers o los periodistas han exagerado sobre el escándalo de Montenegro. Algunos analistas, como Tatiana Stanovaya, sin embargo, han manifestado [ru] en Facebook que, debido al momento en que se ha producido el ataque, las autoridades rusas podrían haber mancillado la reputación de Navalny lo suficiente como para que este se viese relegado a un tercer puesto. Sin embargo, los encuestadores de Navalny vaticinan [ru] que podría forzar unas segundas votaciones en las que se encontraría cara a cara contra Sobyanin. Por otra parte, un comité asesor que simpatiza con el gobierno del Kremlin ha manifestado [ru] que posiblemente Navalny acabe en la tercera posición en las elecciones de septiembre.
La institución responsable de esta afirmación, la Fundación para el Desarrollo de la Sociedad Civil, [ru], es el empleador de no otro que Stanislav Apetyan.