El proyecto Castor provoca movimientos sísmicos en la costa española

Vista de la plataforma Castor desde la costa de Vinaroz (provincia de Castellón). Imagen de lanoticia.cat, con licencia CC 3.0

Vista de la plataforma Castor desde la costa de Vinaroz (provincia de Castellón). Imagen de lanoticia.cat, con licencia CC 3.0

España no es un país que tenga una fuerte actividad sísmica. Salvo en contados casos, como el terremoto de Lorca de 2011, la actividad sísmica del país es de muy baja intensidad, y los temblores no suelen causar ni siquiera daños materiales.

Por eso, cuando hace unas semanas comenzaron a detectarse movimientos sísmicos frecuentes –más de 350 en el último mes– en el golfo de Valencia, frente a la costa de la provincia de Castellón, saltaron las alarmas, sobre todo cuando en la madrugada del pasado 1 de octubre se registró un seísmo de 4,2 en la escala Richter.

Esta inusual actividad sísmica estaría provocada por la inyección de gas natural en la superficie que rodea un antiguo pozo petrolífero, ahora vacío, a 1750 m de profundidad y a una distancia de 22 km de la localidad de Vinaroz, dentro del llamado proyecto Castor, que pretende convertir dicho pozo en un almacén de gas:

de acuerdo a la regulación europea, los comercializadores (…) tienen la obligación de mantener unas reservas equivalentes a 20 días de ventas en firme del ejercicio anterior.

Aunque en España existen otros depósitos de este tipo que hasta ahora no han causado problemas, el proyecto Castor parece situarse en una zona especialmente inestable. La actividad sísmica estaría causada por la inyección de lo que se denomina «gas colchón», que según el blog Ciencia, información y emergencias, se trata de:

600 millones de m3 [de gas] (…) cuyas funciones básicas son rellenar espacios “muertos” de difícil drenaje del yacimiento, servir como aislamiento entre el Gas de Trabajo y el acuífero subyacente (para evitar la posible producción de agua libre) y, en menor medida, contribuir al mantenimiento de la presión del yacimiento.

Estructura del proyecto Castor de almacenamiento de gas. Imagen de la meteoweb.eu

Estructura del proyecto Castor de almacenamiento de gas. Imagen de la meteoweb.eu

Además, el proyecto Castor se ubica sobre la falla de Amposta, que recorre la costa levantina a lo largo de 51 km y actúa como límite del pozo. José Luis Simón, profesor de Geología de la Universidad de Zaragoza y experto en el estudio tectónico de la zona, dijo al diario Levante:

se inyecta gas a una presión bastante alta en un subsuelo submarino del que se conocen pocas cosas, pero una de las que se conocen es que justamente bajo el emplazamiento del pozo pasa una falla que se considera activa. (…) Las tensiones hubieran tardado cientos o miles de años [en producir un terremoto], pero al inyectar gas hacemos que se produzca ahora.

El ministerio de industria ordenó la paralización de los trabajos en la plataforma el pasado 26 de septiembre y los técnicos de dicho ministerio estudian la paralización completa del proyecto si se demostrara su relación con los seísmos. Los gobiernos autonómicos de Cataluña y Valencia han activado sus planes de riesgo sísmico.

La preocupación de los vecinos de la zona se ha reflejado en las redes sociales, que también han servido para convocar manifestaciones y caceroladas de protesta en los pueblos afectados. Hay que señalar que en un radio de 100 km de la plataforma Castor se ubican localidades turísticas como Salou y villas históricas como Peñíscola y las ruinas de Tarraco, pero también instalaciones de la industria petroquímica de Tarragona y las centrales nucleares de Ascó I y II y Vandellós.

Económicamente, el proyecto –que muchos tildan de innecesario–, ha disparado su presupuesto. A finales de 2011, ya se habían invertido 1195,5 millones de euros, un 89,54% por encima del coste previsto inicialmente. Según El Confidencial, actualmente dicho presupuesto

se ha disparado hasta los 1.700 millones. Todo un ejemplo emblemático de los modificados que han hecho de oro a las constructoras al calor de las vacas gordas.

(…) Un dinero que será sufragado por los usuarios del gas a través de la tarifa. (…) [Castor recibirá] En total, 250 millones de euros por ejercicio. Unos fondos que, como costes del sistema, se incluyen en el recibo [al consumidor].

[Solo podría] evitarse el impacto de esa instalación en los recibos del gas si puede demostrarse que ha existido una negligencia grave en el proceso de puesta en marcha.

En Twitter, el tema ha sido muy comentado. La tarraconense Andrea Lahoz se muestra preocupada por los efectos de los terremotos en su entorno:

Ubicación del proyecto Castor y las centrales nucleares de Vandellós y Ascó I y II. Imagen de Google Maps.

Ubicación del proyecto Castor y las centrales nucleares de Vandellós y Ascó I y II. Imagen de Google Maps.

La construcción de Castor corre a cuenta de la empresa ACS, cuyo presidente es Florentino Pérez, presidente también del Real Madrid C.F. Trapichaire subraya el doble rasero que muestra Pérez a la hora de aprobar ciertos gastos:

Blanca Civit parafraseaba el discurso de la alcaldesa de Madrid ante el COI para defender la candidatura olímpica de la ciudad, que provocó una avalancha de bromas mordaces en Internet:

El buen progre también se lo toma con mucho humor:

Según informa El Periódico, «La Fiscalía Provincial de Castellón ha acordado incoar diligencias de investigación penal» para aclarar el origen de los seísmos. El viernes 4 de octubre,

Sobre las dos de la tarde, miembros del servicio aéreo de la Guardia Civil, junto a varios agentes del cuerpo en Castellón, llegaron a la planta, situada a unos 23 kilómetros de la costa de Vinaròs. Según las fuentes, los agentes se trasladaron para «comprobar cómo se encuentra la plataforma y su funcionamiento».

Los agentes verificaron que la planta se encuentra paralizada. Ahora solo queda esperar el informe de los expertos para conocer el destino definitivo del proyecto Castor. 

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