Fran, una estudiante universitaria de 19 años, tiene sexo oral con su pareja de 22 en la ciudad de Goiânia. Ella le deja que la grabe con la cámara de su teléfono, preguntándole en mitad del acto, «¿Quieres mi culito apretado?», autorizándole al sexo anal. Pocos días más tarde, él comparte el vídeo a través de la aplicación de WhatsApp, «un almacén de pornografía involuntaria» [pt], donde los momentos íntimos entre parejas se han extendido indiscriminadamente por los teléfonos móviles a lo largo de todo Brasil.
Esto ha generado el debate en torno a los juicios morales, sexistas e hipócritas que han inundado Internet en los últimos días. En Twitter e Instagram, cientos de personas han publicado fotos con el signo de «me gusta» y la etiqueta #ForçaFran [pt] (ánimo Fran), que se ha convertido en un meme. Algunos de ellos lo han hecho como señal de solidaridad; otros, en un claro intento de burlarse de la chica, como Manu Barem (@manubarem [pt]), editor de la página Youpix [pt], quien explica:
Basta uma vasculhada nas postagens da tag #forcafran para você perceber que a maioria delas, principalmente as publicadas por mulheres, revelam um quê de “como ela foi burra e eu não sou”. (Até o dia em que você confiar num babaca ou ter suas imagens roubadas, né amiga?).
Assim, registramos um estágio novo e triste dos desdobramentos de um crime online – o machismo dominando até as iniciativas solidárias.
Tan solo necesitas echar un vistazo a las publicaciones etiquetadas con #ánimofran para darte cuenta que la mayoría de ellas, sobre todo aquellas publicadas por mujeres, tienen el toque de «qué estúpida fue ella, yo no lo haría» (hasta el día en que te fíes de un pendejo o te roben tus propias fotos, ¿no amiga?).
Así, observamos un nuevo y triste desarrollo en las consecuencias del crimen online – el sexismo domina incluso iniciativas solidarias.
Hasta los futbolistas brasileños Neymar y Daniel Alves, quienes juegan para el club español Barcelona, y el conocido cantante Leonardo [anteriormente la mitad de uno de los dúos más populares de música country del país], han publicado fotos de ellos mismos haciendo el signo de «OK» en Internet, tal como lo atestigua el telediario [pt] local de Goiânia. El 12 de octubre, durante un amistoso entre Brasil y Corea del Sur, los hinchas llevaban letreros con la frase «Ánimo Fran». La imagen circulaba también en las redes, demostrando así el efecto del caso.
Tras tanta difusión, Fran dejó la tienda en la que trabajaba y presentó una denuncia contra el chico con la Delegación Especial de Asistencia a Mujeres en Goiânia. El hombre podría ser condenado de tres meses a un año de cárcel [pt] por difamación si cae sobre la Ley de Maria da Penha [pt], que castiga a aquellos que practican la violencia doméstica hacia las mujeres. Sin embargo, él se niega a entregar su teléfono [pt] a la policía y permanece en silencio durante el interrogatorio. Todavía niega haber sido el creador de los vídeos.
Además de las fotos y los mensajes llenos con las letras «KKKK» [pt], que significan «JAJAJA» en español y es usada normalmente en Brasil, los internautas también hacen uso de la web para dar sus opiniones acerca del tema. En Twitter, había comentarios como estos:
Sonho com o dia em que o homem que vaza o vídeo será chamado de imbecil e a mulher seja reconhecida como vítima, não piranha #forcafran
— Luiz Prisco (@luizprisco) October 9, 2013
Sueño con el día en que el hombre que filtra el vídeo sea llamado imbécil y la mujer sea reconocida como víctima, no como una puta
#forçafran o carai. Quem mandou ela ser jacu e sambanga de deixar o homem filmar ela pagando o boquetin.. Sabe que espalha.
— Alexandre Couto ™ (@Alexandre_8) October 9, 2013
#forçafran ¿qué demonios?. ¿Quién le dijo que fuera tan tonta para dejar que el hombre la grabara mientras le hacía una mamada? Debía haber sabido que se propagaría.
Errado ta o caboco que divulgou as fotos e vídeos. Tem q se fuder pra aprender a virar homem! #forcafran
— Alberto D. Filho (@albertofilho) October 8, 2013
El que lo hace mal es el tio que hace públicas las fotos y los vídeos. «Necesita irse a la mierda para aprender a ser un hombre!
En apoyo a Fran, la periodista Nathalia Ziemkiewicz de la web Na Pimentaria [pt], escribe:
Lamento muito por todos os comentários grotescos e ofensivos que têm circulado na internet. Eles foram feitos pelas mesmas pessoas que acreditam que, se estava de saia curta na rua, pediu para ser estuprada. Tipo: não queria ser exposta, então não deveria ter se deixado filmar. É uma lógica machista que inverte os valores. Você é puta – e não o cara, um mau-caráter. Querida, nossa sociedade está mergulhada nos próprios pudores. Não há nada de errado no que você fez. A cretinice da história toda pertence somente àquele(a) que primeiro repassou o vídeo de um celular privado para uma rede infinitamente invisível.
Estoy triste de ver todos los comentarios grotescos y ofensivos que han estado circulando por Internet. Éstos eran dichos por las mismas personas que creían que si vas por la calle con una minifalda, estás pidiendo ser violada. Tipo: si no querías ser expuesta, no deberías haberte dejado grabar. Es una lógica machista que invierte la culpa. Tú eres la zorra – y no el hombre, el chico malo. Cariño, nuestra sociedad está impregnada de nuestra propia mojigatería. No hiciste nada malo. La idiotez de la historia retrocede a la primera persona que reenvió el vídeo de un teléfono móvil privado a una red infinitamente invisible.
La página Apoio Fran [pt] (Yo Apoyo a Fran) fue creada en Facebook y tiene ya más de 30,000 ‘me gusta’. En Youtube, Andrea Benetti, una de las fundadoras de otra página de Facebook, Moça, você é machista [pt] (Chica, tú eres machista), habla sobre el caso. Para Benetti, el incidente retrata cómo la sociedad juzga todavía a una mujer por su comportamiento sexual:
(tem o) caráter definido a partir do que ela faz na cama, como se ela perdesse o valor…ou não valesse nada, (porque) alguém viu e tem certeza do que ela faz na cama
(tiene su) carácter definido por lo que hace en la cama, como si hubiese perdido su valor…o como si no valiera nada, (porque) alguien vio y está seguro de lo que hace en la cama.
La bloguera y escritora Nádia Lapa también refleja este asunto en su blog Feminismo pra quê [pt] (¿Feminismo para qué?), publicado en la página web de la revista CartaCapital [pt]:
Fran fez sexo. Coisa que a maioria de nós já fez, já quis fazer, ou continua querendo e fazendo. Qual o grande pecado dela? Sim, fazer sexo, ter desejo e expressá-lo. Simone de Beauvoir fala sobre como a sociedade encara a sexualidade feminina: «a civilização patriarcal condena a mulher à castidade; reconhece-se mais ou menos abertamente ao homem o direito a satisfazer seus desejos sexuais, ao passo que a mulher é confinada ao casamento: para ela, o ato carnal, em não sendo santificado pelo código, pelo sacramento, é falta, queda, derrota, fraqueza. Ela tem o dever de defender sua virtude, sua honra; se «cede», se «cai», suscita o desprezo; ao passo que até na censura que se inflige ao seu vencedor há admiração».
Fran tuvo sexo. Algo que la mayoría de nosotros ya hemos hecho, ya quisimos hacer, o continuamos queriendo y haciéndolo. ¿Cuál es su gran pecado? Si, tener sexo, tener deseo y expresarse. Simone de Beauvoir habla sobre cómo la sociedad ve la sexualidad femenina: «la sociedad patriarcal condena la mujer a la virginidad; reconoce abiertamente el derecho del hombre a satisfacer sus deseos sexuales, mientras que la mujer es confinada al matrimonio: para ella, el acto carnal, no siendo santificado por el código, por el sacramento, es una falta, una perdición, un rechazo, una debilidad. Tiene el deber de defender su virtud, su honor; si ‘cede’, si ‘cae’, provoca desprecio; mientras que incluso en la censura impuesta en su vencedor, hay admiración».