El Secretario de Estado de Estados Unidos, John Kerry, dijo en un discurso ante la Organización de Estados Americanos (OEA), el pasado 18 de noviembre, que desde que Obama llegó a la Casa Blanca en 2008, su administración se ha centrado en desarrollar nuevas relaciones con Cuba.
Más adelante, enfatizó en que estas relaciones deben ser «creativas, bien pensadas y tenemos que continuar actualizando nuestras políticas».
Añadió:
Nuestros gobiernos están encontrando intereses comunes de colaboración… Cada año, cientos de miles de estadounidenses visitan La Habana, y se envían cientos de miles de dólares por concepto de comercio y remesas familiares.
Al mismo tiempo, Kerry declaró sentirse comprometido con la continuidad del intercambio pueblo a
[1]John Kerry. Foto de wikipedia, reproducida bajo Licencia CC.
pueblo. «En Estados Unidos creemos que nuestros ciudadanos son los mejores embajadores. Ellos representan nuestros ideales, nuestros valores, nuestras creencias».
Kerry apoyó además los cambios que tienen lugar en Cuba, específicamente los referidos a la reforma migratoria y a la apertura del trabajo por cuenta propia. Sin embargo, añadió que «estos cambios no deben cegarnos sobre el autoritarismo que caracteriza la realidad social de los cubanos ordinarios».
Asimismo, criticó la legitimidad del sistema legislativo cubano, y la situación con respecto a la libertad de expresión:
En un hemisferio donde cada ciudadano tiene el derecho de elegir a sus líderes, los cubanos no pueden hacerlo. En un hemisferio donde las personas pueden criticar a sus líderes sin miedo a ser arrestados, los cubanos no pueden hacerlo.
El pasado 8 de noviembre, el presidente Barack Obama participó en un evento de recaudación de fondos de campaña en Miami donde asistieron varios miembros de la oposición cubana. En esta oportunidad, Obama declaró que éste podría ser el momento para que Estados Unidos revise su política hacia Cuba. La participación del mandatario en esta cena fue criticada desde algunos blogs cubanos.
Un artículo [2] publicado por Jorge de Armas en Bloggers Cuba [3], una comunidad que reúne a blogueros cubanos residentes dentro y fuera del país, refirió que «el brevísimo encuentro entre el Presidente de los Estados Unidos con Guillermo Fariñas y Berta Soler -líder de las Damas de Blanco- en la residencia de Jorge Más Santos, es la legitimación de una política de rancia anticubanía y un espaldarazo a los intereses más abyectos y contrarios al pueblo de Cuba».
Según de Armas,
El abrazo a Fariñas no es tan grave como el abrazo a Más Santos. El abrazo a Fariñas es una mueca al aire, pero el abrazo a Mas Santos es certificar una política hostil, es legitimar la vigencia el bloqueo, apoyado e impulsado por la Fundación, y es ratificar que la política norteamericana hacia Cuba no ha cambiado ni cambiará durante su administración.
Más adelante, señala,
Jorge Más Santos, Presidente de la Fundación Nacional Cubano Americana, heredada de su padre, Jorge Más Canosa y con un amplísimo historial de ilegalidades en contra del pueblo de Cuba. La Fundación Cubano Americana patrocinó atentados contra Cuba, protegió, auspició y colaboró con Luís Posada Carriles, subvenciona actividades ilegales en territorio cubano, y busca la subversión y desestabilización de la vida en la Isla.
El investigador de origen cubano radicado en Estados Unidos, Arturo López-Levy publicó un artículo en el Huffington Post [4] donde analiza las declaraciones de Obama. Según López-Levy,
El mantenimiento de una política de sanciones basado en la premisa falsa de que la isla es una amenaza terrorista, aislada en el hemisferio, no solo disminuye la credibilidad de los Estados Unidos, sino que impide el desarrollo de una política adaptada a los retos y las oportunidades creadas por las reformas que se han llevado lugar desde el retiro de Fidel Castro.