La engañosa guía de The Guardian a las tendencias sexuales japonesas

女子会 at kasahara

«La aversión al matrimonio y a la intimidad en la vida moderna no es exclusiva de Japón,» dice The Guardian. «Como no lo es el interés creciente en la tecnología digital. Pero lo que innumerables comités japoneses han sido incapaces de comprender cuando afrontan la falta de procreación entre los jóvenes es que, gracias a su punto de vista a corto plazo, la decisión de permanecer solteros a menudo adquiere pleno sentido.» (Imagen: 女子会 en kasahara, por el usuario de Flickr sakaki0214. CC BY-NC-ND 2.0)

¿Por qué los jóvenes en Japón han dejado de tener sexo?” [en] Un artículo con este titular apareció en el periódico británico The Guardian el 20 de octubre de 2013 y pronto se hizo viral, compartido por más de 70.000 usuarios en Facebook. El artículo fue rápidamente comentado en la revista TIME, el Washington Post y Slate, en piezas con titulares alarmistas como La apatía sexual de Japón amenaza la economía global [en], La última tendencia en Japón es no tener sexo [en] y Los jóvenes en Japón han sacrificado el sexo [en].

El artículo comienza con una anécdota sobre Ai Aoyama, una dominatrix reconvertida en consejera sexual, y explora el supuestamente extendido fenómeno del “síndrome del celibato” entre los jóvenes japoneses. Se apoya en gran medida en afirmaciones de Aoyama, evidentemente una de las fuentes clave del autor, así como en entrevistas a jóvenes hombres y mujeres japoneses y estadísticas tomadas de encuestas y estudios.

El artículo destaca algunas de las verdaderas tendencias que se dan actualmente en Japón, como el descenso de la natalidad, y fue valorado favorablemente por los usuarios del foro de Internet 2ch, quienes confirmaron que tampoco ellos estaban teniendo sexo.

Otros, sin embargo, mostrándose escépticos con el enfoque del asunto, las amplias generalizaciones y conclusiones, pensaron que el articulo tergiversaba y caía en el sensacionalismo al analizar la sociedad japonesa.

Este artículo de The Guardian es una versión de un reportaje de la misma autora, Abigail Haworth, aparecido en julio de 2013 en la edición online [en] de la revista de moda Marie Claire bajo el menos llamativo titular «Sin sexo en la ciudad» [«No Sex In the City»]. Antes de que fuera mencionado en el programa de Al-Jazeera The Stream, el artículo parecía haber atraído poca atención, con solo 10 personas habiéndolo compartido en Facebook.

En una serie de tuits [ja] publicados el 24 de octubre, Tomomi Yamaguchi, una antropóloga y feminista cuyas afirmaciones aparecen tanto en al artículo de Marie Claire como en el de The Guardian, dijo que la periodista contactó con ella la pasada primavera solicitando una entrevista telefónica. Hablaron durante 30 minutos. “Entendí que se trataba de una historia para Marie Claire,” dijo [ja] Yamaguchi, quién explicó que una persona de la revista contactó con ella en junio para verificar de los datos, y ella pudo comprobar las citas que se iban a usar en el artículo.

“Pensé que eso era todo,” dijo [ja] Yamaguchi. El 20 de octubre, sin embargo, comenzó a recibir correos electrónicos de periodistas preguntándole sobre el artículo de The Guardian. “Al principio pensé que iba a ser una re-edición del artículo aparecido en Marie Claire, pero después de leerlo descubrí que mi cita no se correspondía exactamente con lo que había dicho.”

En los días que siguieron a su publicación en Internet, el artículo de The Guardian fue criticado por usuarios de Twitter japoneses o viviendo en Japón, que cuestionaron la interpretación de la información por parte de la autora, su conocimiento de la sociedad japonesa y su compresión de las claves culturales del país.

Brian Ashcraft, el editor con base en Osaka del blog de videojuegos y entretenimiento Kotaku.com, escribió un entrada [en] en la que echó por tierra algunos de los argumentos del artículo.

“¡Algunas de las cosas son sorprendentes! Parte de la información ha sido totalmente malinterpretada,” dijo Ashcraft. “[El artículo] afirma que «otro estudio descubrió que un tercio de la gente menor de 30 años nunca había salido con alguien.» Así que… dos tercios sí que lo ha hecho, ¿no? La última vez que lo comprobé, «estar saliendo con alguien» y «tener algo de una noche» o simplemente «tener sexo» eran cosas diferentes. Y, de acuerdo con ese mismo estudio [ja], una de cada 10 parejas se casaron después de que la mujer se quedara embarazada. Pero… ¿No era que los jóvenes japoneses no estaban teniendo sexo?” 

“@guardian #fail,” tuiteó [en] el “norteamericano, japonés” @eidoinoue. Señaló que el estudio citado en el artículo en el que se afirma que “un abrumador” 90% de jóvenes japonesas creían que era preferible «permanecer solteras», de hecho mantiene que cerca de un 90% de las mujeres consultadas dijeron que tenían intenciones de casarse. “Llámame snob,” le dijo a otro usuario de Twitter [ja], “pero creo que la gente que informa sobre Japón debería entender el idioma japonés y acudir a las fuentes originales sin traducir.”

@eidoinoue rebatió [en] la existencia del “viejo proverbio japonés” citado en el artículo (“El matrimonio es la tumba de la mujer”), y criticó otros numerosos aspectos del artículo, incluyendo el hecho de que el autor apoye gran parte del mismo en el testimonio de la «consejera sexual» Ai Aoyama [en].

@hunyoki sintió [ja] que la autora estaba mezclando asuntos distintos: “'matrimonio’, ‘sexo’, y ‘descenso de la natalidad’ están relacionados, pero son asuntos completamente diferentes que deben ser tratados por separado.”

Este sentimiento se hizo eco en las palabras de Tomomi Yamaguchi, quien tuiteó [ja] que The Guardian “parece haber confundido qué asunto intenta tratar: falta de sexo, matrimonio o descenso de la natalidad.” Otra preocupación [ja] de Yamaguchi fue que la autora tendió a enfocarse en zonas urbanas, sin afrontar “el problema en las áreas rurales, donde el descenso en el número de niños tiene serias consecuencias.”

@Ucaty sugirió [ja] que el estudio podría estar sesgado por la deseabilidad social [ja]: “Creo que los japoneses suelen rebajar tanto lo que han estudiado realmente como su nivel de interés en el sexo. Como cuando solíamos decir a nuestro compañero de clase justo antes del examen: «No he estudiado nada esta noche».”

“Vamos, periódicos británicos, ¿es que no pueden escribir un artículo sin usar palabras como «sexo» y «drogas»?” tuiteó [ja] un descarado @mogura, refiriéndose tanto a la famosa impudicia de los medios británicos como al aparente uso de la más baja forma de «link bait«.

La investigadora de teoría queer Akiko Shimizu, sin embargo, pensó que la furia desatada por el artículo es quizá exagerada [ja]:  “… esta revocación—»Sí, están teniendo sexo»—es necesaria para poner las cosas en su sitio, pero empieza a parecer una defensa directa del sexo mismo. ¿Es que necesita el sexo realmente ser defendido en primer lugar?”

Keiko Tanaka es una entusiasta de los medios ciudadanos interesada en compromiso digital, radio y cultura juvenil.

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