Las acusaciones de corrupción siguen empañando los preparativos de las Olimpiadas de Sochi. Y a solo dos semanas de la ceremonia de inauguración, aumenta el nerviosismo. Se rumorea que el estadio donde tendrá lugar esta ceremonia está todavía en construcción [en], y los periodista que ya se encuentran en el lugar se quejan de los daños que han sufrido las carreteras por la lluvia y los deslizamientos de tierra [en]. Además, el ministro ruso de Energía, Alexander Novak, dijo [en] el 9 de enero al presidente Vladimir Putin que la red eléctrica todavía no estaba operativa (aunque admitió que estaría acabada el 25 de enero). Mientras tanto, el presidente de la Federación Internacional de Esquí ha afirmado que el alto coste de las Olimpiadas de Sochi (que podría rondar los 55 000 millones de dólares) sentaba un mal precedente para futuras ciudades olímpicas.
El Kremlin se ha dado prisa en defender su proyecto preferido. El presidente adjunto, Dmitry Kozak, responsable de supervisar los preparativos, declaró que el Comité Olímpico Internacional no había recibido ni una sola queja [en] sobre los trabajos previos. También afirmó que el coste total de la Olimpiada de Sochi [ru] es menor que el de la Universiada del pasado verano en Kazán (Tatarstán).
El presidente Putin también decidió lanzar una campaña de imagen [ru], dando una entrevista a un grupo de periodistas de televisoras británicas, estadounidenses, chinas y rusas. Durante dicha entrevista, el periodista norteamericano George Stephanopoulos [en] mencionó los rumores de corrupción. Putin soslayó la pregunta con maestría, diciendo que los medios habían malinterpretado deliberadamente las acusaciones del presidente de la FIE contra Rusia para vender más periódicos. Además, declaró que no había visto ninguna evidencia de corrupción o malversación:
[…] если у кого-то есть конкретные данные о коррупционных проявлениях в связи с реализацией сочинского олимпийского проекта, мы просим предоставить нам эти объективные данные. Мы будем рады и благодарны и используем эту информацию для того, чтобы наводить порядок в этой сфере.
[…] Si alguien tiene pruebas concretas de corrupción en relación con la implementación del proyecto olímpico de Sochi, le pedimos esos datos objetivos. Los recibiremos con gusto y gratitud, y utilizaremos la información para restablecer el orden en ese ámbito.
El opositor político Boris Nemtsov, que ha escrito un informe [ru] sobre la corrupción de Sochi, y alega que más de la mitad del presupuesto de las Olimpiadas se ha malversado, replicó [ru]:
Надо помнить, что главным инвестором в Олимпиаду стали российские пенсионеры, учителя, врачи и военные. Именно они заплатили за всю эту аферу и фестиваль воровства.
Debemos recordar que los principales inversores en los Juegos Olímpicos son pensionistas, profesores, médicos y soldados rusos. Han pagado todo este fraude y el festival de robos.
La campaña de imagen de Putin podría ser insuficiente y llegar demasiado tarde. El artículo de Nemtsov en Facebook se difundió [ru] por la red social rusa VKontakte. Una encuesta espontánea al final de la página preguntaba «¿Qué es lo que espera [el vicepresidente] Kozak?» Casi el 80% respondieron que Kozak espera que los ciudadanos sean idiotas descerebrados.