Ser homosexual en un Caribe homofóbico

El 17 de mayo se conmemora el Día Internacional contra la Homofobia y la Transfobia [en]. El sitio web oficial explica el propósito de la campaña de este año:

Luego de meses de acercamiento y de consultas realizadas a activistas por los derechos LGBTI y a sus aliados alrededor del mundo sobre cuál debería ser el punto de interés en el Día Internacional contra la Homofobia y Transfobia de 2014, descubrimos que el asunto más popular de convocatoria, en distintos escenarios, era la Libertad de Expresión.

El sitio web [en] detalla casos, en todo el mundo, en donde las comunidades vulnerables están siendo blanco de ataques y sus defensores silenciados [en], y situaciones en las se está usando la doctrina religiosa, normas culturales [en] y leyes arcaicas están para justificar el ostracismo de la comunidad homosexual. La declaración demostró que pese a que el público en general puede tener la impresión de que dichas leyes y políticas están orientadas hacia el bien común, la realidad es muy diferente:

Activistas de numerosos países también señalaron que, aunque estas leyes en teoría están dirigidas a las comunidades de LGBTI, en la práctica también se relacionan con la vigilancia y estigmatización de diferentes clases de comunidades incluyendo trabajadoras sexuales, inmigrantes, minorías étnicas, individuos en riesgo socioeconómico y mujeres.

El blog caribeño The Bajan Reporter [en] ha tenido en cuenta la conmemoración, señalando:

Nelson Mandela nos recuerda que la dignidad de cada uno de nosotros sólo puede lograrse si todos nos ocupamos de la libertad de los demás. 

Debemos respetar la libertad de cada uno de amar a quien quiera y a expresar quién es. Las personas lesbianas, homosexuales, bisexuales, transgénero e intersexuales (LGBTI) [en] han mostrado un inmenso coraje y están generando una transformación de la sociedad. 

El blog se ocupa del asunto de la criminalización de los actos homosexuales (numerosos territorios aún conservan en sus ordenamientos jurídicos legislación arcaica contra los homosexuales) y establece una conexión entre dicha actitud y la incidencia del VIH:

Tratar como criminales a las personas LGBTI pone a comunidades enteras en peligro. Impide que quienes que necesitan servicios de prevención y tratamiento tengan acceso a intervenciones que pueden salvarles la vida.

No sólo en las calles, sino también en los tribunales, en los salones de clase y en los centros de salud.

Los estigmas y la discriminación basados en la orientación sexual y en la identidad de género conduce a nuevos casos de pacientes infectados con VIH.

Sólo conseguiremos ser libres cuando respetemos la libertad de nuestros hermanos de la comunidad LGBTI. 

Recorramos el camino a la libertad juntos. 

En este Día Internacional contra la Homofobia y la Transfobia [en] convoco a todos a sumarse a la transformación para lograr alcanzar nuestro objetivo de cero nuevas infecciones de VIH, cero discriminación y cero muertes relacionadas con el SIDA.

Havana Times publicó un artículo [en] donde el autor comparte su experiencia personal de cómo es ser homosexual en Cuba:

Al menos yo, siempre me he enfrentado a aquellos que no me aceptan por mi condición de homosexual.

Nuestra vida nos pertenece y siempre y cuando no dañemos a los demás, todo está bien. Que un hombre sienta amor o adoración por otro es algo que no considero una aberración, menos aun un pecado mortal.

Pero, por supuesto, ese es mi punto de vista. Pienso de esa manera porque soy homosexual y he experimentado en persona las consecuencias de mi notoria homosexualidad.

Reconoció que las personas heterosexuales pueden no estar de acuerdo:

La persona que no es homosexual, ni tiene un miembro de la familia con estas características, piensa de manera muy diferente.

Muchos aún conservan la falsa idea de que somos enfermos, que no tenemos los mismos sentimientos que los demás. Y otro gran sector de la sociedad considera sorprendente la posibilidad de que exista amor en una unión entre dos hombres o dos mujeres.

He conocido muchas personas, generalmente hombres heterosexuales, que sienten repulsión cuando ven a una persona que es demasiado abiertamente homosexual.

El bloguero trata el tema de las presiones [en] que sufren los homosexuales que evitan que salgan del clóset:

Muchos hombres homosexuales no son considerados como tales porque simplemente logran engañar a la sociedad. Han escuchado los comentarios de la gente respecto a los homosexuales y por eso prefieren permanecer en el anonimato.

Como no desean enfrentar a sus familias y al resto de la sociedad, optan por llevar una doble vida, que no sólo les hace daño a ellos sino que afecta también a otras personas.

El tema se volvió un asunto personal cuando a una expareja le avergonzó que su familia supiera que estaba «con otro hombre»:

Entonces, una vez más mi homosexualidad es un problema, y no sé si es un problema suyo o si es un problema de la sociedad que a esta altura del juego aún no es capaz de entender que las diferencias existen y continuarán existiendo.

Pensó que tomar la decisión de adoptar un enfoque más valiente, sin importar cuál fuera la actitud de la sociedad, significaba ser fiel consigo mismo:

En mi opinión, cuando eres homosexual, lo eres y punto. 

Lo más importante es saber que aunque sufras el maltrato de la sociedad, tu vida es tuya… y debes vivirla de manera tal que estés en paz contigo mismo y te aceptes como eres.

Si los demás no nos aceptan, no deberíamos considerarlo un problema nuestro sino, más bien, un problema de ellos.

Quizás sea cierto, pero cuando la mayoría de la sociedad trata de excluir o castigar a las personas por no conformarse a las normas, se convierte en un asunto de derechos humanos. El Día Internacional contra la Homofobia y la Transfobia [en] está tratando de ponerle un nombre al problema y generar conciencia sobre las injusticias que muchos miembros de la sociedad -en el Caribe y en todo el mundo- enfrentan cada día.

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