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Legisladores rusos debaten ley contra los tatuajes en la espalda de las mujeres

Categorías: Europa Central y del Este, Rusia, Arte y cultura, Derecho, Medios ciudadanos, Mujer y género, Política, RuNet Echo
Image edited by Kevin Rothrock.

Imagen editada por Kevin Rothrock.

El parlamento ruso debate [1] su próxima intromisión en la vida de los ciudadanos: obligar a los salones de tatuajes a advertir a las mujeres de que la tinta en la parte baja de su espalda podría suponer un peligro a la hora de recibir la anestesia epidural durante el parto. La legislación [2], sobre la que la Duma tenía previsto hablar el 10 de octubre, está propuesta como una regulación de protección del consumidor, pero muchos (por no decir la mayoría) de los rusos parecen interpretarlo como la última de las muchas leyes creadas con el fin de detener un supuesto comportamiento inmoral. Las reacciones han sido incluso más animadas porque varios medios de información rusos describen de forma engañosa [3] esta iniciativa como un esfuerzo para prohibir rotundamente a las mujeres tatuarse la parte baja de la espalda.

En comentarios en la red, en foros y en redes sociales, aparentemente dominados por hombres, la discusión sobre los tatuajes en la parte baja de la espalda en las mujeres tiene más que ver con la estética que con preocupaciones de salud. “Un cuerpo bonito sin ningún tipo de estupidez pintada es mucho más atractivo», escribía Aleks3 en el tablero de comentarios de Vott.ru [4], publicando enlaces a imágenes de abdómenes de mujeres, uno tatuado y otro al natural. «Noten la diferencia», les dice a los lectores.

Otro chico encantador, cuyo nombre en Vott.ru es «Fosnet», y que claramente apoya el esfuerzo de frenar los tatuajes en la espalda de las mujeres, declara: «un tatuaje en el culo ya es una prueba de algún tipo de problema mental. El parto apenas es nada que añadir.»

Los retuits rusos compartieron su cobertura sobre la historia del tatuaje en Vknotakte, la red social más popular de Rusia, donde los usuarios dejaron casi 200 comentarios. De nuevo, la mayoría de las respuestas pertenecían a hombres cuya mayor preocupación era la idea de que un tatuaje en la parte baja de la espalda refleja la promiscuidad sexual de una mujer. Alexey Maslov escribía: «Opino que tales tatuajes son propios de prostitutas, quienes, teniendo en cuenta su estilo de vida, en principio deberían tener prohibido tener hijos, ya que solo darán a luz al mismo tipo de persona que ellas». A continuación añadió: «Tal vez me equivoco.»

Tatiana Seminchenko, una joven mujer residente en Krasnodar, se atrevió a comprometer a Maslov con la pregunta: «¿Por qué piensa usted así?», a lo que él respondió que los tatuajes en las mujeres pertenecen a un «esquema global» de Europa, «con su incesto y matrimonios del mismo sexo.»

El chovinismo y la homofobia entre los hombres no son nada nuevo, ni en Rusia ni en ningún otro sitio, pero es difícil ignorar cómo el nuevo esfuerzo de la Duma por proteger a las mujeres frente a los tatuajes encaja con las actuales tendencias reaccionarias del país. Mientras el conflicto en el este de Ucrania se tranquiliza en un agitado alto el fuego, los legisladores rusos parecen considerar la vuelta a las políticas de preguerra sobre el escándalo moral. Antes de que Moscú se enfrentara a los «fascistas» asentados en Kiev, se pasó años protegiendo a los rusos de malvados padres de acogida extranjeros y de sospechosos depravados sexuales. Las leyes en contra los «tatuajes en la espalda en las mujeres», aparentemente basadas en consideraciones médicas, tiene la capacidad de satisfacer a una gran cantidad de personas que ya temen al «esquema global» de Occidente.