Un grupo de estudiantes rinde homenaje a las víctimas de la matanza de Charlie Hebdo afirmando que ellos también tienen sus propias armas para oponerse al atentado del 7 de enero de 2015. No solo los dibujantes aficionados han usado sus lápices para rendir homenaje a las víctimas de Charlie Hebdo y defender la libertad de expresión, los estudiantes también han querido expresarse a través de los dibujos para condenar el terrorismo y transmitir un pequeño mensaje de amor, paz y tolerancia. Los alumnos de segundo curso de un instituto de Estrasburgo se unieron la mañana del viernes para mostrar su rechazo a lo ocurrido en la revista semanal. Han sido espontáneos y auténticos, reaccionando a su manera y sin tratar de hacer algo bonito, simplemente expresándose.
1- En este dibujo, los alumnos muestran su idea de que no hay que responder nunca a la violencia (ilustrada aquí con el Kalachnikov) con más violencia, sino que ésta debe ser combatida usando el lenguaje propio del hombre, con un dibujo simple representado aquí bajo la forma de un lápiz.
2- En este dibujo, los alumnos adoptan el eslogan «Je suis Charlie» (Yo soy Charlie) para afirmar que ellos también reivindican sin miedo el principio de libertad de expresión y de pensamiento.
3- En el siguiente dibujo, los estudiantes denuncian el acto sanguinario cometido contra la revista. Para ellos, basta con tomar un bolígrafo y escribir, para que podamos expresar lo que pensamos, sobre todo cuando no estamos de acuerdo con las ideas de otros. Es el discurso que hay que adoptar.
4- Los alumnos transmiten aquí un mensaje universal, insistiendo sobre algunos valores humanistas como la libertad y la tolerancia.
5- Un mensaje de amor que refleja una visión optimista del mundo: es la lengua de los más fuertes (la escritura) la que triunfará sobre la lengua de los más débiles (las armas), el amor triunfa siempre sobre el odio, y el bien triunfará eternamente sobre el mal.