Concurso Miss Tanguita, enero 2015. Imagen de Flickr del usuario remolacha.net (CC BY-NC-SA 2.0).

El municipio de Barbosa, en el departamento colombiano andino de Santander, fue escenario de un controvertido concurso de belleza llamado Miss Tanguita. Las concursantes del certamen, patrocinado por la alcaldía local, eran niñas entre los seis y diez años de edad que modelaban en traje de baño.

Las diversas opiniones no se hicieron esperar en blogs y redes sociales. El sitio web Evangelizadoras de los apóstoles se manifestó en contra del concurso:

Resulta que cada año desde hace 25, en el municipio de Barbosa, Santander, niñas entre seis y diez años desfilan en tanga, maquilladas, contoneándose y tirando besos a una audiencia de adultos que ingieren licor.
Miss Tanguita, según la alcaldesa Maryury Rocío Galeano Jiménez, es una tradición de Festi-Río, y nadie en el municipio, ni los padres de familia, ni las empresas privadas que pautan, ni la misma Alcaldía (que invita y promociona), ve nada malo en que las niñas participen en este reinado de belleza. De hecho, la alcaldesa afirma que a las niñas las educan en valores (¿qué valores?) y que se les enseña que su cuerpo es un templo (¿un templo para quién?).

El Festi-Río es una actividad anual muy importante de Barbosa y Colombia en general, en la que participan muchos turistas nacionales y extranjeros.

Por su parte, el sitio web PedroVisión publica fotos y videos del concurso y comenta:

Lo que en Barbosa, localidad del departamento de Santander, al noroeste de Colombia, consideran una bonita tradición que se remonta a un cuarto de siglo, en Bogotá lo han tachado de espectáculo bochornoso. Y el ICBF, organismo dedicado a proteger la infancia, ya ha anunciado que investigará el singular certamen para impedir que se repita.
Las voces críticas […] llegan a decir que se podía equiparar a la pornografía infantil. También agregaban que supone fomentar el que las mujeres tengan como aspiración máxima convertirse en modelos y hacer de la belleza, en lugar del estudio, el centro de sus vidas.

Por su parte, Confidencial Colombia analiza las consecuencias que pueden tener consursos de esta naturaleza:

¿Qué niña no sueña con ser princesa o reina?”, se pregunta indignada la madre de la miss tanguita 2015.
[…]
Después de que los aplausos y los flashes les llegan por mostrar su cuerpo, no nos extrañemos de ver adolescentes soñando con una operación de tetas o de culo a los 15 años, o consumiéndose en la anorexia y la bulimia, en permanente contradicción con su cuerpo. Después de sexualizarlas desde los 7 años, no nos quejemos del altísimo índice de embarazos adolescentes, primer factor reproductor de la pobreza y la inequidad.

Los usuarios de Twitter también se expresaron al respecto:

el concurso de #MissTanguita no es malo, lo malo es el marco en el q se lleva a cabo, con ron de por medio no se puede hacer nada con niños.

— Will Oliver (@DJWill_Oliver) enero 16, 2015

#MissTanguita existe no porque falten leyes para prohibirlo sino porque nuestra consciencia social lo tolera y aprueba (@DanielSamperO)

— Fabian Mendez (@efmcuiti) enero 16, 2015

#MissTanguita No podemos seguir enseñándole a las niñas que su valor radica en la belleza de su físico ¿Qué posibilidades les estamos dando?

— Calentana viajera (@paosan1) enero 16, 2015

Se indignan con lo de #MissTanguita pero son felices con #Diomedizate que participó en violación y asesinato de Doris Niño #asiescolombia

— Héctor Galvis (@galvisoto) enero 16, 2015

Se refiere a un caso policial de 1997, donde se acusó a Diomedes Díaz del homicidio de Doris Niño García, de 22 años de edad.

Un usuario reflexiona sobre lo que considera un doble rasero:

Muchos indignados por el concurso tradicional colombiano de niñas en bikini #MissTanguita. Ah, pero con los desfiles de primavera no hay tos

— El Master (@PerroDe3patas) enero 16, 2015

Cabe mencionar que hace poco más de un año, en Francia, el Senado de ese país aprobó prohibir concursos de belleza para niñas menores de 16 años.