Captura de pantalla del video «Me and My Shadow» (Yo y mi Sombra), por Tactical Technology Collective.
Escrito por Fieke Jansen [1] y Maria Xynou [2] de Tactical Technology Collective.
Cuando pensamos sobre la vigilancia, solemos olvidar que varias de nuestras actividades cotidianas, como leer las noticias en línea, son registradas y compiladas para propósitos comercailes. Esto es hecho, frecuentemente, sin nuestro conocimiento o consentimiento y sirve como una mina de oro para analistas de datos y la industria de los datos [3]. Esta industria es opaca, ya que no es claro para nosotros cuáles y cuántas compañías están siguiendo nuestras actividades en sitios web, cómo nuestros datos son manejados y con quiénes son compartidos.
Tactical Technology Collective [4] está trabajando para explorar y visualizar a la industria de los datos mediante Trackography [5], una nueva herramienta de código abierto que revela cuáles entes nos vigilan y hacia dónde van nuestros datos cuando accedemos a sitios web de noticias.
[4]Publicamos artículos de proyectos aliados para ayudar a nuestros lectores a aprender sobre nuevos proyectos técnicos de código abierto desarrollados por organizaciones no gubernamentales que conocemos y en las que confiamos. Aunque similares en apariencia, son artículos diferentes a las noticias y análisis presentes en nuestra web
Cuando nuestros datos viajan por internet, una red internacional de redes [6], lo hacen a través de múltiples servidores alrededor del mundo. Al visitar un sitio web, nuestros datos viajan a los servidores del mismo y a los de terceras personas, como servicios de publicidad.
Trackography ilustra que leer noticias en línea es mucho más político que lo que pudiésemos pensar. Según una prueba de Trackography [7], cuando personas en Ucrania acceden a los sitios web de dos medios nacionales, pravda.com.ua and vesti.ua, sus datos viajan a través de la infraestructura de redes de Rusia y también son seguidos por terceros, uno de ellos la empresa Yandex [8] (ubicada en Rusia). Dada la tensión política entre Rusia y Ucrania, el estudio comercial a ucranianos por parte de compañías de seguimiento rusas puede ser cuestionable -especialmente porque las compañías realizan creación de perfiles y comparten con terceras partes- [9] pero no está claro cuánto tiempo son retenidos los datos, cómo son empleados estos perfiles y quién tiene acceso a ellos.
Las políticas sobre los datos no solo están relacionadas con estas rutas contradictorias de la geopolítica, pueden también interferir con las normas legales relativas a la privacidad. Aunque podemos acceder a las noticias digitales en países conocidos por sus fuertes leyes de protección a la privacidad, nuestros datos pueden viajar a países que no las tengan. Una de las pruebas de Trackography [7] demuestra que cuando los individuos acceden a sitios web de Alemania, sus datos viajan a través de las redes de India, que no cuenta con leyes de privacidad. Por esto, podemos cuestionar cómo nuestros datos pueden ser protegidos adecuadamente, dado que acceder a varias web requiere que ellos viajen a países extranjeros con diferentes tipos de protección (o ninguna).
Un vistazo a la industria de datos
La mayor parte de las páginas web que visitamos incluyen imágenes y código incrustados que recopilan y envían información sobre nosotros a los servidores de compañías. Estas son los “terceros vigilantes” [9] que recogen nuestras direcciónes IP y siguen nuestra actividades digitales a través de las «cookies» de los navegadores y otras tecnologías. Frecuentemente, ellos también guardan diferentes tecnologías de vigilancia en nuestro navegador que les permiten conocer cuáles otras web visitamos periódicamente a lo largo del tiempo. Todo esto les permite trazar nuestros intereses y crear perfiles [10] acerca de nosotros.
Trackography ilustra cuáles compañías nos vigilan cada vez que entramos a un sitio web. En 37 países del globo, las pruebas de Trackography probaron [9] que Google, Facebook y Twitter vigilan preferentemente a los visitantes de portales digitales de noticias.
Sin embargo, no está claro cómo las compañías manejan los datos que recolectan. Un examen de las políticas de privacidad [8] de algunas de las principales compañías de seguimiento a nivel global muestra que muchas de ellas reúnen información personalmente identificable, la cual revelan a terceros, sin prohibirles explícitamente usar dichos datos para propósitos no especificados. Es también estacable que la mayoría de esas compañías establecen en sus políticas de privacidad [8] que retienen los datos que guardan, pero no especifican por cuánto tiempo.
Aunque todo esto parece inocuo, no olvidemos que la construcción de perfiles está en el corazón del seguimiento digital [11]. Los datos recogidos por el seguimiento digital pueden ser sumados a otros datos recogidos de fuentes digitales o analógicas para crear perfiles individuales. No podemos controlar qué tipo de perfiles son creados acerca de nosotros, si son verídicos o a quiénes son vendidos.
Tactical Tech desarrolló Trackography [5] para incrementar la transparencia sobre la industria global del seguimiento digital y servir como insumo para la investigación y el activismo. Cualquier persona puede contribuir con Trackography [12] al poner en marcha su software [13] y/o contribuir con sus listas de sitios web de medios de comunicación [14] y análisis de las políticas de privacidad [8]. ¡Ayúdanos a vigilar a los vigilantes e incrementa la transparencia de la industria de datos del planeta!
Escrito por Fieke Jansen [1] y Maria Xynou [2], Tactical Technology Collective.