Abril fue un mes particularmente fatídico para el Mar Mediterráneo, donde gran cantidad de barcos que transportaban migrantes con el sueño de llegar a Europa naufragaron. Se calcula que más de un millar se ahogaron, 800 de ellos en el naufragio del 19 de abril.
A raíz de las tragedias, una «manifestación» tuvo lugar el 25 de abril de 2015 en la Plaza Kléber, la plaza principal en el centro de Estrasburgo, Francia. La marcha fue organizada como consecuencia de la convocatoria del colectivo por una nueva política migratoria. A pesar de una persistente llovizna, los participantes fueron invitados a permanecer acostados durante 10 minutos junto a un largo cartel con los nombres y circunstancias en que murieron, entre 1993 y 2012, 17,306 migrantes mientras intentaban cruzar el mar Mediterráneo.
Frontex es la agencia europea a cargo de la seguridad y las fronteras externas de la Unión Europea. Se ha convertido en un símbolo de la severa política de la UE de limitar de manera drástica el acceso a migrantes y solicitantes de asilo a través de las fronteras de la UE. Pero las políticas no han detenido el flujo de migrantes que, contra todos los pronósticos y corriendo riesgo de muerte, insisten en buscar su futuro del otro lado del Mediterráneo.
A continuación, algunas imágenes de la manifestación:
Migreurop, una red de organizaciones de beneficencia y ONG que luchan por la reforma de la política migratoria de la UE, se lamentó en un comunicado del 24 de abril de la falta de voluntad del Consejo Europeo para tomar las medidas pertinentes. También se comprometió a realizar nuevas actividades luego de la protesta:
23 April 2015 was a terrible day: the European Council, that was at last to “take action” as regards a “tragic” situation in the Mediterranean, merely attempted to shelter the European Union and its Member States from migrants by toughening border protection.
The European Union Heads of Government, who met with great ado, had but one message for those thousands of human beings – men, women and children – who risk death and often find it, attempting to reach a place to rebuild their lives. That message was: “Security!” They did not seek to put an end to the race to the bottom between Member States to take as few migrants as possible after rejecting all the others. As for the word “welcome”, it does not form part of the vocabulary of the Heads of Government
El 23 de abril de 2015 fue un pésimo día: el Consejo Europeo, que finalmente iba a “tomar medidas” en cuanto a la “trágica” situación en el Mediterráneo, solamente trató de resguardar a la Unión Europea y sus estados miembros de los migrantes endureciendo las medidas de seguridad en la frontera.
Los jefes de gobierno de la Unión Europea, que se reunieron con mucho ruido, tuvieron un solo mensaje para los miles de seres humanos –hombres, mujeres y niños– que arriesgan su vida y en ocasiones mueren, intentando llegar a un lugar donde rehacer sus vidas. Ese mensaje fue: “¡Seguridad!” Ellos no pretendieron poner fin a la carrera hacia la máxima desregulación entre los estados miembros para aceptar la menor cantidad posible de migrantes luego de rechazar a todos los demás. En cuanto a la palabra “bienvenidos”, no forma parte del vocabulario de los jefes de gobierno.
La Cumbre especial del Consejo Europeo del 23 de abril en Bruselas mostró que los estados miembros de la UE no han logrado alcanzar consenso en asuntos migratorios: Cada estado se aferra a sus propias políticas restrictivas nacionales en lugar de delegar la autoridad a la agencia europea dedicada al tema.
Durante la reunión especial del Consejo Europeo, inmigrantes indocumentados protestaron frente al Parlamento Europeo en Bruselas. ¿Su mensaje tendrá importancia para lograr que las políticas pasen de priorizar la seguridad a ofrecer una respuesta humanitaria?