Antipas «Biboy» Delotavo es un artista muy conocido en Filipinas que ha comprometido su arte a revelar algunas de las realidades más duras que viven los ciudadanos en la sociedad filipina. Junto con otros pintores del realismo social que mostraron el lado oscuro de la dictadura de los 70's, Biboy continua pintando cuadros para concienciar al público sobre el impacto de la pobreza, la opresión y la injusticia en el país.
Una de sus obras más conocidas representa a un trabajador mayor caminando enfrente del logotipo de una empresa multinacional (ver foto arriba). Algunos críticos la describieron como La crucifixión del proletariado por el duro sistema capitalista.
Preguntado por Global Voices acerca de su inspiración, Biboy respondió así:
Most great art emanates from pleasant positive spirit which is uplifting that inspires it. My art seems to contradict it. Social burden initiates it and I seek relief by painting it. I’m not sure if it’s inspiration. I think it’s more of a responsibility as a social being with a conscience.
Mucho gran arte emana del espíritu placentero y positivo que las inspiró. Mi arte parece contradecir eso. La carga social lo origina y pinto buscando aliviar esa carga. No estoy seguro si es inspiración, creo que es más bien la responsabilidad de un ser social con conciencia.
Este es su consejo para los artistas jóvenes:
What you create as an artist reveals what you are. If you paint solely for money or otherwise it will surely show it. Sincerity, conviction, passion and talent are always the ingredients of enduring works of an artist.
Lo que creas como artista revela quien eres. Si trabajas solo por dinero seguramente se reflejará. Sinceridad, convicción, pasión y talento son siempre los ingredientes de las obras perdurables de un artista.
Esta pintura representa el éxodo masivo de trabajadores filipinos. Hay 12 millones de filipinos trabajando en el extranjero que han dejado a familias y amigos detrás.
El investigador de arte Patrick D. Flores comentó sobre este cuadro:
They are facing a horizon that seems to be a dis-place, but their strides are decisive, their load roots them to their ground, and they are resolute in “being there” and disappearing into a depth. Are they coming or going? Are they in a vast terminal in the airport or on the tarmac to catch their flight or have they arrived?
Se enfrentan a un horizonte que parece fuera de lugar, pero sus pasos son decisivos, su carga los enrumba a su tierra y están decididos a «estar allí» y desaparecer en esa profundidad. ¿Van o vienen? ¿Están en la enorme terminal de un aeropuerto, en la pista a punto de tomar el avión o han llegado ya?
Con frecuencia, las autoridades acosan y abusan de una gran parte de la población filipina que trabaja como vendedores ambulantes.
Hay una gran disparidad en el nivel de ingresos entre las regiones rurales y urbanas, con muchos granjeros forzados a emigrar a las ciudades como consecuencia de la pobreza crónica en que viven.
Un critico de arte describió esta obra como un recordatorio del falso acuerdo de buena voluntad dado a los filipinos por los invasores norteamericanos hace más de 100 años, cuyos efectos todavía perduran en la actualidad. Filipinas fue una colonia de los Estados Unidos desde 1898 a 1946.
Los juegos de guerra entre tropas filipinas y norteamericanas aumentaron durante la llamada Guerra del Terror, después del ataque a la ciudad de Nueva York del 11 de setiembre.
Un critico describe esta pintura como una alusión al «desconcierto ante la opulencia que descansa sobre una andrajosa bandera filipina».