
Colegialas turcomanas de primer grado. Todas las escolares en Turkmenistán, como las presentadoras de noticias y ministros del gabinete están obligadas a vestir el traje nacional. Foto tomada del servicio de Radio Libre Europa. Usada bajo licencia CC.
«Esta noche somos una y estamos respirando el mismo aire», canta una escolar turcomana en un video grabado con un teléfono móvil que actualmente tiene cerca de 50 000 visitas en YouTube. La rutina de baile que realiza con sus amigos al estilo del bien conocido ‘Turn Up the Love’ de Far East Movement ganó fama a través del planeta incluyendo Turkmenistán, donde las autoridades están supuestamente investigando el incidente y confiscando los teléfonos móviles de los escolares.
El clip es inocente, quizás un poco rebelde, divertido. El problema es que en Turkmenistán los escolares no respiran el mismo aire como sus contrapartes en otros lugares del mundo. El país está en una pequeña élite de estados represivos que incluye la vecina Uzbekistán, Corea del Norte, Zimbabue, Arabia Saudita y otros. En 2004 para The Economist era el ‘peor lugar’ del mundo para vivir.
Por esta razón, la decisión del blog de noticias Turkmen Chronicles de publicar — o republicar — el video vía su canal de You Tube TurkmenDissidentTV es problemática, dado que asocia a las niñas con un sitio web prohibido en Turkmenistán y bastante conocido por producir material de constante crítica a las autoridades.
El autor del artículo en el blog de noticias escribe que las autoridades están molestas con el video y han hecho inspecciones masivas en las escuelas en la provincia de Lebap donde fue supuestamente filmado. Representantes de la oficina del fiscal están comprobando el contenido de videos y fotos de los teléfonos móviles y confiscándolos.
Global Voices no pudo encontrar versiones anteriores del clip a pesar de que el autor sugirió que el video «apareció en las redes» antes de aparecer en el disidente canal de YouTube. Por otra parte, las caras de las colegialas son totalmente visibles y fácilmente identificables. El clip está aquí.
Como de costumbre, las discusiones del video en You Tube y en el sitio web de Turkmen Chronicles tenían connotaciones políticas, las que podrían no haber ayudado a la causa de las niñas en un estado donde las discusiones en internet están estrechamente monitoreadas:
El administrador del canal responde:
Мен наоборот очень довольный. Молодцы девушки, отрываются. Ничего предосудительного здесь нет.Счастливые дети для вас масгара?
Por el contrario, estoy muy contento. Las niñas hicieron un buen trabajo y se divirtieron. No hay nada malo en ello. ¿La felicidad de los niños es una vergüenza para usted?
Pero Guncha Halmyradova argumenta:
девченки веселятся, ничего плохого в этом нет, не правильно поступил тот кто выложил видео в социальную сеть.
Las niñas se divirtieron. Nada de malo con ello. La gente que lo puso en las redes sociales hicieron las cosas mal.
En Turkmenistán, donde el patriarcado es reforzado desde el ámbito presidencial, algunos sugieren que es inmoral bailar de forma provocativa con música occidental:
Aziz Nazarov:
что вы творите? как же вам не стыдно, разве мусульманка должна быть такой?
¿Qué están haciendo? Qué vergüenza. ¿Puede una mujer musulmana comportarse así?
Pero estas expresiones de moralidad fueron rápidamente recibidas con críticas por un sector favorable a la infancia.
Bill Uoker escribe:
net musulmanka doljna yexat v siriyu i ucastvot v seks cixade…a eti devki vmesto etoqo poyut inastrannuyu pesnyu…
No, una mujer musulmana debiera ir a Siria para participar en un jihad del sexo… mientras estas niñas en cambio se atreven a cantar una canción extranjera…
No ha habido noticias de la suerte corrida por las niñas desde la publicación del video.
Nijat Guluzade escribe desde otro estado autoritario al otro lado del mar Caspio:
Kan Torren vio la semilla de la desobediencia masiva:
MegaWolkov cuestiona el propósito del canal disidente al publicar el video:
Server Illiyev también critica al canal: