- Global Voices en Español - https://es.globalvoices.org -

Acusaciones entre el gobierno y la Hermandad Musulmana por mortal ataque al procurador público de Egipto

Categorías: Medio Oriente y Norte de África, Egipto, Medios ciudadanos, Política
A photograph of the explosion that killed Egypt's Public Prosecutor that has gone viral on Twitter. Shared by @TheMiinz [1]

Una fotografía de la explosión en la que falleció el procurador público de Egipto se ha hecho viral en Twitter. Compartida por @TheMiinz [1].

El Gobierno egipcio y la Hermandad Musulmana se acusan mutuamente tras el asesinato del procurador de la nación, Hisham Barakat, quien falleció a causa de las heridas sufridas en el ataque con un coche bomba a su convoy el 29 de junio de 2015. La televisión pública de Egipto anunció que el funeral militar se celebraría al día siguiente de los atentados.

Barakat llegó al hospital El-Nozha con una hemorragia interna tras el ataque. Al mediodía se conocieron los informes médicos acerca de su estado crítico y poco después el portavoz del Ministerio de Salud confirmaba su muerte.

ÚLTIMA HORA: El procurador público de Egipto muere a causa de las heridas sufridas en el ataque a su convoy, informa el portavoz del Ministerio de Salud

Los detalles acerca de cómo se produjo el ataque siguen sin estar claros. Por un lado, existen informes en los que se expone que un coche bomba embistió el convoy de Barakat, y por otro lado, la agencia Reuters cita a agentes de las fuerzas de seguridad diciendo que el atentado se produjo con la detonación a distancia de un coche aparcado.

El ataque tuvo lugar cuando Barakat salía de su casa en el barrio de Heliopolis en El Cairo. Los residentes de este barrio se despertaron con una explosión de enormes proporciones que sacudió toda la calle y causó el incendio de unos 30 coches; los cristales de las ventanas de los edificios que lo circundaban quedaron hechos añicos hasta el décimo piso, tal y como se podía ver en los vídeos [5] tomados después del ataque. Los medios de comunicación públicos informaron que nueve personas, incluídos dos conductores y cinco miembros de las fuerzas de seguridad de Barakat, resultaron heridas en la explosión.

Erin Cunningham, corresponsal en El Cairo para el Washington Post, tuiteaba:

El coche bomba fue bastante grande, daños en los alrededores. Ventanas rotas en los edificios, hasta 8-10 plantas. Coches a su alrededor carbonizados.

Un grupo poco conocido, «Giza Popular Resistance», reivindicó la responsabilidad por el ataque, según consta en su página de Facebook . El grupo había sido el responsable de varios atentados a principios de año poco antes de la cumbre económica internacional que se celebraba en Egipto.

El experiodista de Daily News Egypt, Joel Gulhane, escribía en Twitter:

Para aquellos que no se acuerden de quiénes son Giza Popular Resistance, son los que pusieron una bomba en los restaurantes KFC a principios de año.

Sin embargo, unos horas después de haber asumido la responsabilidad por el ataque, la publicación desapareció de su página de Facebook, según informa Evan Hill, un periodista especializado en Medio Oriente:

El mensaje del grupo Popular Resistance en el que asumían la responsabilidad parece que ha desaparecido.

El Servicio de Información Estatal publicó noticias sobre el ataque en su portal acusando de forma explícita a la Hermandad Musulmana [10]. Mientras que por su parte, la Hermandad Musulmana acusó al actual régimen de crear un clima de violencia y añadieron que la violencia no cesará hasta que Egipto sea «libre»:

Afirmamos que la violencia no cesará solo si se consigue justicia y se derroca este régimen ilegítimo y se permite que Egipto sea libre

El periódico estatal Al-Ahram insistía, al momento de escribir este artículo, que la identidad del agresor todavía era desconocida y que nadie había reivindicado la responsabilidad por el atentado.

Hisham Barakat fue nombrado procurador público de la nación en julio de 2013 tras el derrocamiento al presidente de la Hermandad Musulmana, Mohamed Morsi. Durante su mandato, Barakat fue testigo de varios casos de gran controversia como la inclusión de la Hermandad Musulmana en la lista de organizaciones terroristas y el proceso a varios líderes y miembros, incluido el expresidente Morsi. Barakat llamó a juicio a cientos de miembros de esta organización y muchos de ellos fueron condenados a la pena de muerte.

Antes de ser procurador público, Barakat trabajó como jefe de la oficina técnica en el Tribunal de Apelaciones de Ismailia. Este tribunal fue el responsable de investigar las declaraciones en las que se afirmaba que Morsi se había fugado de la cárcel durante la revolución de 2011. Tras los resultados de dicha investigación, Morsi fue condenado a la pena de muerte a principios de este año.

El procurador también fue quien se encargó de llevar a juicio a Yassine Salah Eddin, un teniente de las fuerzas de seguridad centrales, que con sus golpes causó la muerte de un activista durante una manifestación pacífica. Salah Eddin fue condenado a 15 años en una cárcel de máxima seguridad.

Barakat también formó parte de otros casos polémicos en el que los acusados eran activistas, periodistas o un grupo de seguidores de fútbol, así como otros muchos casos relacionados con la Hermandad Musulmana.

La muerte de Barakat se ha convertido en el primer asesinato de un representante del gobierno desde hace más de una década. El escenario que se observa en El Cairo en estos momentos es de miedo y expectación ya que los atentados han dejado ver lo lejos que pueden llegar los militantes, mientras que los activistas temen que el ataque tenga como consecuencia la implantación de importantes medidas de emergencia y restricciones en las libertades por parte del Gobierno.

Para más noticias de última hora e informes, sigue nuestra cobertura en Global Voices Checkdesk [12].