Camboya ha tenido un rápido desarrollo en las dos últimas décadas pero la desigualdad y pobreza continúan azotando el país. De hecho el país tiene elecciones libres, permite el libre comercio y ha abierto sus fronteras a los turistas e inversionistas, pero mucha de su gente es incapaz de beneficiarse de estas reformas.
El álbum fotográfico ‘Transitioning Cambodia’ [Camboya en transición] narra la historia moderna de un «país que permanece, por un lado, aún desgarrado por el peso del horroroso pasado y las promesas del porvenir por el otro”. Es una colaboración entre el fotógrafo Nicolás Axelrod y la periodista Denise Hruby, quienes han presenciado las diversas repercusiones del ascenso de Camboya como una nación en desarrollo, en la gente común en varias comunidades a través del país.
Este álbum de fotos, realizado con financiamiento compartido, ofrece una nueva mirada a un país que ha iniciado programas de desarrollo de largo alcance mientras que sus residentes han luchado por sobrevivir en medio de los cambios.
A continuación nuestra entrevista por correo electrónico con Nicolas y Denise:
Global Voices: ¿Cuáles fueron sus objetivos al realizar este proyecto?
Denise Hruby: The objective was to document Cambodia at a time of rapid transition that is fundamentally — and irreversibly — changing its landscapes, politics, and the overall make-up of society. There's no doubt that Cambodia needs to develop on all those levels, but the way some of these changes are happening have left wide gaps between the poor and the rich. Often, development here means that the poor are getting poorer, while the rich continue to increase their wealth.
Denise Hruby: El objetivo fue documentar Camboya en un momento de rápida transición que está fundamental — e irreversiblemente — cambiando su entorno, su política así como la imagen global de la sociedad. No hay duda que Camboya necesita desarrollarse en todos esos niveles pero la forma de algunos de esos cambios que están sucediendo han dejado grandes lagunas entre ricos y pobres. Con frecuencia desarrollo significa aquí que los pobres se hacen más pobres mientras que los ricos siguen aumentando su riqueza.
Nicolas Axelrod: There are few places in the world that have changed as rapidly and dramatically as Cambodia in such a short period of time. Not only physically, looking at infrastructure, but also psychologically, there has been a change in people’s way of thinking be it in regards to politics or family values. For example: the book starts at a time where politics were not openly discussed, this has now changed. These two chapters looking at family and politics describe this change, by giving the reader a look into where the country was, and where it might be going. The other chapters – Land and wealth deal with how the development happened, and the impact it had on both the poor and the rich.
Nicolas Axelrod: Hay pocos lugares en el mundo que han cambiado tan rápida y dramáticamente como Camboya en un periodo tan breve de tiempo. No solo físicamente, miremos la infraestructura, sino también sicológicamente ha habido un cambio en la forma de pensar en relación con la política o los valores familiares. Por ejemplo: el libro comienza en el periodo donde la política no era comentada ni discutida abiertamente, ahora eso ha cambiado. Los dos capítulos relativos a la familia y la política describen estos cambios permitiendo al lector dar una mirada donde el país estaba y hacia donde se podría dirigir. Los otros capítulos – Tierra y riqueza, hacen referencia a cómo ha sido el desarrollo y el impacto que ha tenido tanto en los pobres como en los ricos.
GV: ¿Cuáles han sido en Camboya las reacciones sobre este proyecto?
DH: So far there has been a very positive feedback from the Cambodians and others who have talked to us about the book.
The launch was packed with foreigners and Cambodians, and in the media, too, it's gotten great reviews. Most people tell us that they are happy that there's a book that looks at Cambodia as it is — not just the beautiful temples of Angkor or nostalgic photos of children riding an oxcart. Decision-makers have called it a must read for those following Asian affairs.
DH: Hasta ahora hemos tenido una reacción muy positiva de los camboyanos y otros quienes nos han hablado del libro.
La presentación ha sido muy visitada por extranjeros y camboyanos y en los medios de comunicación también ha tenido excelentes comentarios. Muchas personas nos han dicho que están felices de que exista un libro que mire a Camboya como es — no solo los hermosos templos de Angkor o fotos nostálgicas de niños conduciendo una carreta de bueyes. Los responsables de la toma de decisiones lo han mencionado como el libro que deben leer quienes se interesan en los asuntos asiáticos.
GV: ¿Según usted, cual es su opinión de las perspectivas de desarrollo en Camboya? ¿A qué se le debiera dar prioridad?
DH: One of the biggest issues in Cambodia is this deeply entrenched system of corruption and nepotism that runs the whole country. Changing this and making the country a fairer place for everyone will take decades, simply because everyone plays along – from the lowest level village chief to top government officials. There's still a huge lack of understanding of corruption, what it is and how harmful it is to society and the economy on a larger scale. Bribes are described as «tea money» and hardly anyone sees anything wrong with that.
The second priority I believe is better education. The government has already allocated more funds to the education ministry, and the new minister is pushing through with major reforms. But here, too, corruption is a major issue. School teachers get paid so little they demand a daily fee from students to attend class, and the poor often don't have the means to pay.
But that's also where I see Cambodia's biggest hope for the future: About half of the population is under the age of 25. It's the youngest population in the region. Investing in their education will be key.
DH: Uno de los mayores problemas en Camboya es este sistema profundamente arraigado de corrupción y nepotismo que existe en todo el país. Cambiar esto y hacer el país un lugar más justo para todo el mundo tomará décadas simplemente porque cada uno juega el juego – desde el nivel más bajo de jefe de aldea a altos funcionarios del gobierno. Aún existe una gran incomprensión de la corrupción, qué es y cuan mala es para la sociedad y la economía a gran escala. Los sobornos son descritos como «tea money» [dinero para té] y difícilmente casi nadie ve algo malo en ello.
Creo que la segunda prioridad es una mejor educación. El gobierno ha asignado más dinero al Ministerio de educación y el nuevo ministro está promoviendo mayores reformas. Pero allí también la corrupción constituye un problema mayor. Los profesores de escuela reciben un pago tan pequeño que piden a los estudiantes una asignación diaria para asistir a clases y los pobres con frecuencia no tienen los medios para pagar.
Pero veo la mayor esperanza de Camboya en el futuro: cerca de la mitad de la población es menor de 25 años. Es la población más joven de la región, invertir en su educación será la clave.