Prisioneros políticos de Azerbaiyán, el estado y su sociedad secreta

Khadija Ismayilova, an investigative journalist of world renown. Photo by Abas Atillay, RFER/L. Creative commons.

Khadija Ismayilova, periodista de investigación de renombre mundial. Foto de Abas Atillay, RFER/L. Creative Commons.

¿Es esta la posición a favor del gobierno de Azerbaiyán sobre los Illuminati?

Un nuevo capítulo en el triste lamento del sistema de justicia de Azerbaiyán es la aparición repentina de asistentes a juicios que llenan los tribunales para importantes audiencias, aparentemente para negarle espacio a otros espectadores. Algunos dicen que son capaces de arrojar alguna piedra cuando es necesario.

Han sido una característica clave en los procedimientos en curso contra la conocida periodista de investigación Khadija Ismayilova. Ismayilova permanece detenida desde el 5 de diciembre de 2014, acusada de instigación al suicidio, evasión fiscal, actividades comerciales ilegales, abuso de poder y malversación de caudales.

También han ocupado numerosos asientos en el juicio de los activistas de derechos Leila y Arif Yunus, acusados el año pasado de espiar a Azerbaiyán para el vecino y rival Armenia.

Los críticos en todo el mundo han declarado que las acusaciones contra Ismayilova y los Yunus son falsas y constituyen un intento de silenciar voces críticas dentro de Azerbaiyán, uno de los estados más represivos de la ex Unión Soviética.

Esos anónimos asistentes a los juicios por lo general son recibidos con los brazos abiertos por el personal interno, y evitan milagrosamente –o tal vez mediante un secreto apretón de manos– el escrutinio que familiares, amigos y colegas de los acusados normalmente enfrentan cuando intentan acceder a los procedimientos.

Portan celulares, generalmente prohibidos en la corte, y ocupan la mayoría de los asientos de los diminutos tribunales. Cuando los periodistas les preguntan, se presentan como parientes y amigos de los acusados, pero no aportan ningún dato sobre ellos.

Pero sus habilidades, supuestamente, no se limitan a ser pasivos espectadores del juicio.

Durante el juicio de Ismayilova, que empezó el 24 de julio, algunos miembros de la presionada prensa local intentaron filmar detrás de la corte, donde los simpatizantes de Ismayilova hacían una manifestación. Atacantes desconocidos les arrojaron piedras por los problemas ocasionados.

Nadie asumió la responsabilidad del ataque. Pero, si no fue obra de la sociedad secreta, ¿de quién fue entonces?

Simpatizantes de la periodista de investigación azerí Khadija Ismayilova se manifestaron afuera del tribunal donde está siendo juzgada.

Como los misteriosos asistentes ocupaban todos los buenos asientos, los amigos y colegas de Ismayilova tuvieron que pararse y esperar afuera del tribunal, coreando el nombre de Khadija en apoyo y aplaudiendo tan fuerte como podían.

Se impidió ingreso de activistas al tribunal de Bakú al inicio del juicio contra Ismayilova: simpatizantes de la periodista Khadija Ismayilova…

El represivo estado azerí es experto en farsa política. Llena urnas con votos, periódicos con mentiras y parece que ahora también rellena tribunales con falsos asistentes.

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