Película «La niebla de Srebrenica» muestra a sobrevivientes de una de las peores masacres de Europa

Samir Mehanović, Director (Credit: Marta Vidal)

Samir Mehanović, director (crédito: Marta Vidal).

Considerada la peor masacre en Europa desde la Segunda Guerra Mundial, tropas bosnio-serbias mataron a 8,000 hombres y niños musulmanes en Srebrenica en 1995. Alessandra Goio y Marta Vidal informan sobre una nueva película acerca de los sobrevivientes del genocidio de Srebrenica, que se estrenó en agosto en el XXI Festival de Cine de Sarajevo. Este artículo se publicó originalmente en Balkan Diskurs, dirigido por el Centro de Investigación Postconflicto (PCRC), beneficiario de Rising Voices en 2014. Se reproduce acá como parte de un acuerdo para compartir contenido.

El 17 de agosto, el director bosnio Samir Mehanović presentó su documental «La niebla de Srebrenica» en una concurrida sala de cine durante el XXI Festival de Cine de Sarajevo.

La película cuenta la historia de Mehmed, Hatidža, Ahmed y Zinahida, cuatro sobrevivientes de lo que muchos definen como el peor crimen cometido en suelo europeo desde la Segunda Guerra Mundial. En un periodo de siete días durante la guerra bosnia en julio de 1995, más de 8,000 musulmanes bosnios en y alrededor de la ciudad de Srebrenica fueron masacrados por fuerzas bosnio-serbias al mando del general Ratko Mladić.

Con el informe de la experiencia personal de los personajes de esta tragedia, la película hace reflexionar a la audiencia sobre muchos asuntos importantes sobre humanidad, memoria y perdón.

En escena con algunos de los personajes de la película, sobrevivientes y familiares de las víctimas del genocidio de Srebrenica, Mehanović conversó sobre la importancia de recordar Srebrenica y la necesidad de construir esperanza para futuras generaciones en Bosnia.

“Empecé a hacer esta película hace 20 años”, dijo Mehanović, que creció en Tuzla y todavía recuerda los hechos de julio de 1995, cuando innumerables refugiados llegaban de Srebrenica, a unos 65 kilómetros de su ciudad. “Los recuerdos son persistentes. Al hacer esta película, abrí una caja de Pandora”, agregó.

Mehanović quería estudiar dirección antes de la guerra, pero cuando el conflicto empezó, fundó un compañía de teatro. “En tiempos de la guerra, hacíamos representaciones como El Principito”, recuerda.

En mayo de 1995, Mehanović escapó a la masacre de Tuzla, donde murieron cerca de 71 jóvenes, y partió de Bosnia en agosto de ese año, buscando asilo en Escocia luego de ser invitado a actuar en el Festival Fringe de Edimburgo.

“Fui a Edimburgo y me quedé ahí, pero estaba continuamente vinculado a Bosnia”. le dijo al público.

En 2013, dirigió «La manera en que jugábamos», una película sobre dos niños de diferentes orígenes étnicos a comienzos de la guerra en Bosnia. Pero para «La niebla de Srebrenica”, la motivación de Mehanović llegó simplemente del deseo de contar la historia de las personas que murieron y desaparecieron.

National Theater, Sarajevo (Credit: Marta Vidal)

Teatro Nacional, Sarajevo (Crédito: Marta Vidal).

Mientras hacía la película, realizó una exhaustiva investigación sobre el genocidio, que abrió viejas heridas. “Cuestionó mi posición sobre la humanidad”, explicó, y lo obligó a preguntarse “¿es realmente el hombre peor que un animal?” Sin embargo, hacer el documental también le dio esperanza“.

“Lo hermoso fue que no sentí odio en los personajes”, explicó Mehanović, y agregó que piensa que el perdón jugó un papel muy importante en esta película. Aunque la mayoría de los personajes del documental perdieron a varios familiares y presenciaron situaciones extremadamente violentas, pudieron perdonar y afirmaron que no buscaron venganza. “La gente perdona, no están llenos de odio”, sostuvo el director.

Mehmed Hodžić, uno de los personajes de la película y un peluquero que vivía con su esposa y dos hijos en Srebrenica, perdió a 67 parientes durante la masacre. Se mudó a Sarajevo, pero luego de la guerra decidió regresar a Srebrenica. Describió que la vida ahora en Srebrenica es pacífica, y tan normal como en cualquier otra ciudad pequeña.

Aun así, Srebrenica es un acontecimiento que nunca debe ser olvidado, sobre todo por las futuras generaciones. En palabras de uno de los personajes de la película, “Srebrenica nunca será una historia terminada”. En ese sentido, Mehanović está planeando hacer un largometraje. “Siento que no he contado lo suficiente”, dijo.

Mehanović también usó su discurso para destacar la importancia de la justicia en los procesos de reconciliación. “Si cometes un crimen, debes enviar un mensaje a las futuras generaciones: no quedarás impune”, afirmó.

En su investigación, Mehanović usó archivos e informes del Tribunal Criminal Internacional para la Antigua Yugoslavia (ICTY). El Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas estableció la institución en 1993 con el objetivo principal de procesar a los autores de los crímenes cometidos en la antigua Yugoslavia. “El Tribunal tuvo a los mejores jueces del mundo”, comentó Mehanović, “sin embargo, en los últimos veinte años procesaron a pocas personas por su participación en Srebrenica”.

El director también afirmó que la situación sigue siendo “insoportable» para los sobrevivientes.

“No tienen ni lo básico y viven con apenas cinco a diez euros al día. Al gobierno no le importan, tampoco a la gente normal. Ahora las personas parecen hacerse de la vista gorda y le dan la espalda a asuntos como Srebrenica”. Y prosiguió, “Creo que hay una conspiración de silencio. La gente no habla de estos asuntos”.

Mehanović cree que la paz futura en Bosnia yace en la existencia de un diálogo que permita a la gente aprender cómo vivir junta. Pero aunque su película se trata de Bosnia y la guerra yugoslava, este mensaje está diirigido al mundo. “Tristemente, horrores como Srebrenica pueden ocurrir en otros lugares y en cualquier momento”, explicó.

“No debemos permitir que esto ocurra otra vez”, concluyó.

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