
El primer ministro de Singapur, Lee Hsien Loong, se dirige al público en un mitin. El lema del partido gobernante es «Con usted, para usted y para Singapur.» Fuente: página de Facebook del Partido de Acción Popular.
El partido gobernante Acción Popular de Singapur (PAP, por sus siglas en inglés) predominó en los comicios obteniendo casi 70 por ciento del voto; una mejoría aproximada de 10 puntos sobre las elecciones anteriores en 2011, lo que indicó una transición que se alejaba del modelo de gobernanza del partido único en la ciudad-estado.
Los comicios del 2015 se llevaron a cabo unos meses después del fallecimiento del primer ministro de la nación, Lee Kuan Yew; dicha convocatoria se realizó poco después de la celebración masiva del quincuagésimo aniversario de la independencia. El plazo para hacer campaña electoral duró únicamente 10 días. Además del titular del PAP, otros ocho partidos políticos de diferentes dimensiones y cualidades participaron en la contienda. Esta fue la primera vez, desde 1963, en que cada escaño se estaba disputando.
En gran parte se anticipaba que las elecciones siguieran la tendencia que inició en 2011, año en el que PAP obtuvo 60,1 por ciento del voto popular; su peor actuación desde que asumió el poder en 1959. Se esperaba que los partidos de oposición, en su mayoría, consiguieran las victorias, especialmente el Partido de los Trabajadores – el único partido opositor que posee miembros del parlamento electos.
No obstante, muchos habitantes de Singapur se sorprendieron al saber que el partido gobernante terminó ganando el 69,86 por ciento del voto, pues en cada distrito electoral de la isla se observaron cambios que se distanciaban de la oposición. El Partido de los Trabajadores perdió uno de los siete escaños en el parlamento, aunque se aferra a los cinco que obtuvo en el distrito electoral de representación grupal de Aljunied (GRC, por sus siglas en inglés), con un margen de victoria de menos de uno por ciento.
Algunos blogueros y analistas singapurenses analizaron minuciosamente los resultados de los comicios para obtener un mejor entendimiento del porqué el PAP obtuvo más votos, pese a que se esperaba que perdiera un número signficativo de escaños.
Con la publicación de los nuevos resultados, el bloguero Alex Au reevaluó la manera en que se podrían interpretar los comicios anteriores:
The 2011 results, including the by-election results following that general election, now have to be read as purely a protest vote. People were angry at a few things, and once the government took the sting out of these key issues with a number of policy tweaks, the electorate reverted to form.
Los resultados del 2011, incluyendo los de las elecciones extraordinarias que prosiguieron a esos comicios, ahora deben interpretarse sencillamente como un voto de protesta. Las personas estaban enfadadas por varias cosas y una vez que el gobierno retiró la trampa de esos asuntos claves mediante varios ajustes políticos, el electorado revirtió a lo anterior.
Ghui, un comentarista en The Online Citizen, especuló que el cambio hacia el PAP se originó por el miedo de una «elección anormal» – una en la que un aumento de apoyo repentino a la oposición provocaría que el PAP perdiera la facultad de conformar un gobierno, dejando esa tarea a una coalición inestable de partidos opositores:
The PAP… played up the threat of the opposition ruining Singapore, feeding fears that the entire governmental system would collapse, inexperienced politicians would charge into Parliament and the country would be run to the ground.
People I have spoken to unanimously agreed that they wanted more opposition MPs in Parliament. Most were also in agreement that seven elected MPs were insufficient to be an effective check in Parliament. Yet, many were also fearful that if everyone voted that way, the PAP may end up losing power.
El PAP… fue enfático sobre la amenaza de que la oposición va a destruir Singapur, alimentando el miedo de que todo el sistema gubernamental colapsaría, los políticos sin experiencia ocuparían el parlamento y que la nación sería llevada a la ruína.
Las personas con las que he hablado concuerdan de manera unánime, que desearían tener más miembros opositores en el parlamento. La mayoría también está de acuerdo en que siete parlamentarios electos no son suficientes para constituir un control efectivo en esa institución. Sin embargo, muchos temían que si todos votaban de esa manera el PAP posiblemente terminaría perdiendo el poder.
E. Lee, miembro de uno de los partidos opositores, también escribió un reporte acerca de su experiencia electoral para The Online Citizen, en el cual hace énfasis de las dificultades que los partidos experimentan al competir contra el poderoso PAP:
The fact that the official media limits the publication and portrayal of political parties is widely known. But what is not so common knowledge is how they do so. Take, for instance, my experience with a local broadcaster to get our party’s script cleared for TV during this general election. As the person who submitted the script, I was required to stay behind for six hours until I received clearance from their legal department. On that occasion, their representative highlighted four short sentences in our script that contained a few “potentially defamatory” names and words. I sought clarification for why these words were defamatory, but the representative merely said they do not want to be liable for the statements made by the party and wanted us to relook the content.
Es de conocimiento público que el medio de comunicación oficial restringe la publicación y representación de los partidos políticos. No obstante, lo que pocos conocen es la manera en que llevan esto a cabo. A manera de ejemplo, narro mi experiencia con un canal local donde buscamos obtener la autorización del libreto de nuestro partido, de modo de pautar en televisión durante estas elecciones generales. Como yo fui quien presentó el libreto, me solicitaron quedarme por seis horas hasta que recibiera la autorización de su departamento legal. En esa oportunidad, su representante resaltó cuatro oraciones cortas en nuestro libreto, que contenían unos cuantos nombres y palabras «potencialmente difamatorios». Solicité que aclarasen el porqué eran difamatorias, pero este únicamente indicó que no deseaban que los hicieran responsables por las declaraciones hechas por el partido, por lo tanto, querían que revisaramos el contenido.
Yeah Lam Keong, ex economista en jefe de uno de los fondos soberanos de inversión de Singapur, enfatizó sobre los obstáculos que los partidos de oposición afrontan:
…there are severe barriers to entry to effective political competition. Extensively redrawn political districts, minister-fortified GRCs, a govt dominated mainstream media, ridiculously short campaigning periods, non independent civil service organizations (to name a few) mean the playing field is extremely unequal to begin with and that better MPs are deterred from offering their services as opposition members while less able or altruistic ones my be incentivized to join the ruling party. Just look around. Meritocracy in politics is being eroded, which is not good for governance long term.
…existen barreras severas para ingresar de manera efectiva en la contienda política. Distritos políticos grandemente reformados; distritos electorales de representación grupal fortalecidos con ministros; canales de transmisión controlados por el gobierno; períodos de campaña ridículamente cortos; organizaciones de servicio civil no independientes (para nombrar algunas), todo esto significa que la plataforma es extremadamente desigual para empezar y que disuaden a los mejores parlamentarios de ofrecer sus servicios como miembros de oposición, ya que probablemente incentivan a los menos aptos o los altruistas para que se unan al partido gobernante. Solo miren a su alrededor. La meritocracia en la política se está deteriorando; esto no es bueno para gobernar a largo plazo.
El primer ministro, Lee Hsien Loong, afirmó que el nuevo parlamento iniciaría labores a partir del mes de enero.