Por primera vez, un tribunal ruso ha producido una sentencia de prisión real a un usuario con cargos de «propaganda del extremismo en redes sociales». Anteriormente, cargos similares habían resultado en su mayoría en multas y suspensiones de las sentencias.
Un usuario de internet en la ciudad siberiana de Surgut ha sido sentenciado a un año de prisión en una colonia penal. La sentencia real (no suspendida) de un año de prisión fue emitida por un tribunal municipal tras encontrar culpable al acusado por distribución de «material extremista» en redes sociales, de acuerdo con el artículo 282 del Código Penal ruso. Según los informes de los medios, el usuario, Oleg Novozhenin, había publicado videos y audios «fomentando la actividad» del partido nacionalista ucraniano «Right Sector» (actualmente ilegalizado en Rusia) y el batallón voluntario derechista «Azov».
Esta no es la primera vez que usuarios de la RuNet han sido imputados por actividades en línea, con crímenes relacionados con el extremismo. Los cargos de «incitación al extremismo» junto con la creciente restricción de la libertad de asociación y las regulaciones de protestas son lo que ponen a los usuarios en problemas. El retuit de una imagen, un artículo republicado en VKontakte e incluso una caricatura anti-fascista del Pato Donald puede costar a los ciudadanos rusos su acceso ilimitado a Internet.
El artículo 282 del Código Penal Ruso presenta una definición bastante vaga de lo que significa «fomentar el extremismo» y se aplica sencillamente como una herramienta de censura. Junto con otras leyes represivas, ha acabado con un puñado de casos en los tribunales, pero en la mayoría de ellos, los tribunales han acabado por suspender la sentencia, con penas administrativas o multas. Ahora, el veredicto del tribunal de Surgut ha creado el primer precedente de sentencia de prisión real por actividad en línea «extremista».