Arabia Saudita cambia la pena de muerte para Ashraf Fayadh a ocho años en prisión y 800 azotes

Ashraf Fayadh .. via Instagram

Ashraf Fayadh .. vía Instagram

Arabia Saudita anuló la condena a muerte del poeta palestino Ashraf Fayadh, acusado de apostasía y de otras ofensas relacionadas con la blasfemia, las cuales él niega, y cambió la sentencia a ocho años de prisión y 800 azotes, anunció su abogado el dos de febrero vía Twitter.

En un tuit, que tenía un comunicado de prensa en árabe adjunto al mismo, su abogado, Abdulrahman Al-Lahim dijo que la corte revocó la pena de muerte, reemplazándola con la condena a prisión y azotes públicos, a razón de 50 latigazos por semana, así como obligar a Fayadh a renunciar a su poesía en los medios de comunicación sauditas:

La corte ha decidido anular su decisión previa y emitir un nuevo veredicto. Los detalles se incluyen.

El abogado sostuvo que Fayadh era inocente y pidió su liberación inmediata de prisión.

Fayadh, quien nació y vive en Arabia Saudita, ha comisariado exposiciones de arte en Yeda y en la Bienal de Venecia y ha sido un líder clave de Edge of Arabia, una organización de arte británica-saudita. Fayadh fue detenido inicialmente en agosto del 2013, al sudoeste de Arabia Saudita, por la policía religiosa de su país, también conocida como el Comité para la Promoción de la Virtud y Prevención del Vicio.

El hombre de 35 años fue liberado bajo fianza sólo para ser arrestado nuevamente el 1ro de enero del 2014, cuando fue sentenciado a cuatro años en prisión y 800 azotes. Luego de que su abogado apelara, las autoridades judiciales decidieron realizar un nuevo juicio frente a un nuevo panel de jueces, quienes sentenciaron a muerte a Fayadh en noviembre del 2015, bajo los cargos de promover el ateísmo en su colección de poesía del 2008, Instructions Within.

Según el Observatorio de Derechos Humanos:

Prosecutors charged him with a host of blasphemy-related charges, including: blaspheming “the divine self” and the Prophet Muhammad; spreading atheism and promoting it among the youth in public places; mocking the verses of God and the prophets; refuting the Quran; denying the day of resurrection; objecting to fate and divine decree; and having an illicit relationship with women and storing their pictures in his phone.

La fiscalía lo acusó de una serie de cargos relacionados a la blasfemia, incluyendo: blasfemar «el ser divino» y al Profeta Mahoma, difundir el ateísmo y promoverlo entre la juventud en lugares públicos; burlarse de los versos de Dios y de los profetas, refutar el Corán, negar el día de resurrección, objetar el destino y el decreto divino; y tener una relación ilícita con una mujer así como guardar sus fotos en su teléfono.

En Twitter, muchos siguieron criticando a Arabia Saudita y su historial en derechos humanos, a pesar de la reducción de la sentencia a Fayadh. Zena tuitea:

Un alivio que la pena de muerte a Ashraf Fayadh haya sido anulada. Pero 8 años y 800 azotes por ningún crimen no es justicia.

Bandar Almogtrb añade:

Justicia es la liberación inmediata de Ashraf Fayadh y su compensación por lo que le pasó a él y a su familia con todo esto

Y Naser Al-marshdi dice que es hora de que Arabia Saudita tenga una ley escrita para evitar lo que el describió como fallos arbitrarios por parte de los jueces:

El caso de Ashraf Fayadh es clara prueba de que se necesita leyes escritas a las cuales los jueces se atengan para que no basen sus fallos en sus sentimientos e impresiones e interpretaciones personales

Entretanto, Shatha Nour se sorprendió de que alguien celebrara esta decisión como una victoria para la justicia saudita:

Estoy sorprendido con aquellos que celebran la justicia saudita. ¿Es justo que él vaya a prisión por ocho años? ¿Lo son los 800 azotes? ¿De qué justicia están hablando?

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