Durante la Segunda Guerra Mundial, Manila fue ocupada por el ejército imperial japonés. A principios de 1945, las tropas estadounidenses y los miembros de la guerrilla filipina liberaron la capital filipina después de un mes de batalla. A causa de los encarnizados combates y los fuertes bombardeos, Manila se convirtió en la segunda ciudad aliada más devastada (seguida de Varsovia) en la Segunda Guerra Mundial.
Para conmemorar el septuagésimo aniversario de la cruenta batalla, en 2015, el gobierno filipino lanzó un portal en línea [2] que muestra imágenes [3], vídeos, reportajes, mapas, testimonios y otros informes [4] pertenecientes a la batalla histórica. Esta colección especial también ilustra imágenes en color [1] de algunos de los edificios simbólicos y algunas escenas de guerra de la antigua Manila.
En la batalla de Manila, más de 100 000 civiles fueron asesinados y los edificios del gobierno quedaron prácticamente destruidos. En esta web informativa [5] se relata la situación en la capital tras la batalla:
100 000 Filipinos perished, government buildings lay in ruins—and Manila was Pearl of the Orient no more. The once illustrious city and the Orient’s first cosmopolitan hub that merged the East and West now vanished under piles of debris.
100 000 filipinos perecieron, edificios de gobierno quedaron en ruinas y Manila dejó de ser la Perla de Oriente. La que una vez fue una ciudad ilustre y el primer centro cosmopolita, nexo de unión entre Oriente y Occidente se había desvanecido entre montones de escombros.
El patrimonio europeo de Manila (Filipinas fue una colonia española durante más de 300 años) se perdió por la destrucción de la ciudad. Y la web informativa [5]añade:
Filipinos lost invaluable articulations of culture and their identity as a people. Government buildings, universities and colleges, churches as well as other institutional landmarks perished along with all the valuables in their possession. Buildings suffered demolition to pave the way for progress. This meant doing away with European architecture in lieu of the functional, American style architecture that inspires some of our buildings today. Only few among the original edifices would remain intact.
Los filipinos perdieron piezas culturales de un valor incalculable, al igual que su identidad como pueblo. Se destruyeron edificios del gobierno, universidades, iglesias, así como otros lugares institucionales emblemáticos con todos los objetos valiosos en su interior. Se demolieron los edificios para dar paso al progreso. Esto implicaba reemplazar la arquitectura europea por otra estadounidense de tipo funcional que inspira algunos de nuestros edificios actuales. Solo unos pocos edificios originales permanecen todavía intactos.
Mire algunas de las imágenes en color de la antigua Manila después de la guerra. Algunas fotos están superpuestas con otra imagen actual:
Este peculiar vídeo [7] documental, grabado en color, nos da una idea de la devastación provocada por la guerra:
A pesar de que el ejército japonés es el principal responsable de asesinar [8] a miles de civiles, algunos historiadores también han acusado al ejército estadounidense de bombardear algunos edificios y otras infraestructuras que destruyeron la economía de la capital del país.